Por primera vez, Natalia se portó de maravilla con Jandé, esta se ha quedado sin poder creer lo que sucede en la cabeza de esa niña que anteriormente demostraba lo mucho que la odiaba y ahora de la noche a la mañana pareciese que la adora.Anduvieron por varias tiendas de ropa y también fueron a comer una deliciosa sopa de mariscos, típica de ese lugar turístico. Entre broma y broma, la hermosa Jandé se divirtió sin pensarlo, aunque siempre extraña a su esposo y hubiese preferido que él también les estuviese acompañando para sentirse protegida.— Chicas, ya deberíamos regresar al hotel, es tarde y temo que Imanol se moleste por estar fuera mucho tiempo. —pide.— Querida, quédate un poco más y acompáñanos a tomar un cóctel, prometo que luego de eso nos iremos. —dice Natalia, siendo ella la anfitriona del grupo.— Está bien, pero si ustedes no cumplen con su palabra, me iré sola. —les aseguró.De inmediato se dirigieron a un bar. Jandé les pidió a las chicas que la esperasen un momento
Por otra parte, Natalia se negó a acompañarle porque temía que la chica esté despierta y de inmediato la acuse frente a Imanol de haber sido ella la que pretendió con buenas intenciones que fueran a tomar y finalmente caer profundamente en un sueño.— Mi primo no es cualquier estúpido, él va a querer investigar lo que ocurrió y seré la primera sospechosa. —repite en su mente mientras que no deja en paz los dedos de sus manos por los nervios que se han apoderado de ella.El corazón de Imanol dio un vuelco y casi se paralizó cuando el joven de recepción le confirmó que hace unas horas se ha registrado un huésped con ese nombre que él menciona. Le pidió el número de habitación y luego de sobornarlo con un par de billetes fue directo a la puerta con la llave que se le entregó.Al ver que Jandé estaba casi desnuda sobre la cama, sus venas se inflaron de odio. Ha vuelto a revivir el episodio de hace unos años cuando estaba muy enamorado de su prometida, pero esta le fue infiel con uno de su
Al sentirse acorralada por su situación lamentable y sin saber que más hacer, ella le llamó a Leo para que le enviara dinero y poder regresar a casa en poco tiempo y así hablar lo más rápido que se pueda con su esposo.—¿Qué sucede, Bambi? ¿Acaso el imbécil de tu esposo se ha quedado sin dinero? —Quiso saber.—Te ruego que no lo tomes a burla. Es algo muy serio y no, él tiene mucho dinero como siempre. El problema es que… es que… creo que él se ha marchado y me ha dejado en este lugar.—¡Cómo! —Exclamó con un grito ensordecedor el hombre al otro lado de la línea.Jandé le comentó detalle a detalle lo sucedido, ella lloró mientras lo hacía. El corazón de Leo se hizo pequeño al escuchar el relato de la chica, esa niña a la que le tiene mucho aprecio y cariño desde que la conoció por primera vez y que, aunque haya sido de una manera peculiar ese encuentro, él guardaba la esperanza de que Imanol por fin se enamorara nuevamente de alguien y dejase en el pasado a su ex prometida.Finalmente
Fue así como pasaron los días y el orgullo de Imanol seguía intacto. Cuando su madre le preguntó por su nuera, este le comentó que se había ido de visita donde un familiar y que no regresaría hasta dentro de unos días porque aquella persona estaba en delicado estado de salud y ella es su única pariente.Cuando la curiosidad le ganó, bueno, más que todo, las ganas de saber de su mujer, llamó a uno de sus amigos y este le informó que no saben nada de la chica, pero que le urge hablar cara a cara con él y que en ese momento se dirigía a la empresa.—Nos hemos distanciado por tu culpa, hermano, estás molesto y pretendes que todo a tu alrededor pague por ello. —reclamó el joven.—Tienes razón, lo siento mucho. La culpable de esto es Jandé, seguro ella se ha marchado con su amante y yo me la estoy desquitando con ustedes —expresa—. Ella cree que si huye de mí, me olvidaré del divorcio y del dinero que le pagué para que alquilara su vientre. —finaliza.—Deja en paz a la chica. Leo te pidió q
Cargada de ansiedad y al mismo tiempo curiosidad por saber quién es la persona que está próxima a llegar. Jandé se vistió con ropa sencilla, pero que la hacía ver hermosa. Ella guarda la esperanza de que sea Imanol quien haya decidido ir a verla y, por ende, pedirle que se vaya junto a él a casa.Cuando el timbre sonó, se llenó de nervios y no sabía qué hacer, ¿mostrarse enfadada ante él o demostrarle que está muy feliz de encontrarse? Finalmente, y después de un largo debate en su mente, ella corrió a abrir la puerta, va con una sonrisa enorme y vaya sorpresa la que se llevó al no encontrarse con el hombre que tanto había esperado y alucinado que llegaría.—¿Señora Melisa? —dice un poco decepcionada a medida que su sonrisa se desvanece.—¿Acaso esperabas a otra persona? —preguntó con gracia la señora y alzando una ceja, pues se imagina el motivo de su reacción.—Eh, no. Leo no me dijo que era usted la que vendría. Oh, por Dios, aún la tengo de pie en la puerta, sea usted bienvenida.
Jandé se niega por completo al hecho de estar embarazada, ella no acepta la insinuación que ha hecho la señora Melisa y le molesta que todos la estén ahora felicitando como si de verdad hubiera un hijo en su vientre.—¿De qué se alegran ustedes? Además, ¿Usted de dónde ha sacado eso de que hay un bebé entre nosotros? —le cuestiona a su suegra.—Hija, esta mañana solo te vi y supe que estás embarazada. ¡Voy a ser abuela! Mi intuición me lo grita en la mente y en el corazón.—Un momento, no celebren algo que no sabemos si existe. —les dice la chica.—Ahora mismo saldremos de dudas. Mientras tú te duchabas, he llamado a la farmacia y me han enviado una prueba de embarazo. —Se adelanta la señora.—¡No puede ser!, me siento acosada por todos ustedes. —Dice Jandé en tono divertido.—Date prisa, querida nuera, mi hijo pronto llegará a casa y al no encontrarme se preocupará.La señora le entregó una caja que contiene la regleta y de inmediato la enviaron al baño. Mientras los segundos corren,
Seis años más tardeImanolSeis años han pasado desde que vi por última vez a Jandé. Desde entonces no he vuelto a saber nada de ella, bueno en realidad al día siguiente de que fui a casa de Leo y la encontré allí recibí una llamada por parte de ella misma en donde me decía que no la buscara porque se había marchado con un hombre bueno y que se olvidaría de mí.No le tomé importancia y sin dejar que terminase de hablar colgué la llamada. Ella sabía que yo estaba muy cabreado en ese momento porque me habían mentido y aun así creyó que la estaría buscando si desaparecía sin decírmelo.Mis amigos y mi madre tienen prohibido mencionar su nombre en mi presencia, siento mucho coraje en mi corazón cuando en ocasiones les escucho decir que ojalá su Bambi se encuentre bien en donde esté. Sé que a mi madre le ha afectado bastante porque ella la quería como a la hija que nunca tuvo, pero ha sabido controlarse por el amor que me tiene a mí.¿Qué cómo ha ido la empresa sin Jandé?Reemplazar su pue
Seis años atrás…Después de que Imanol se marchó de la casa de su amigo Leo, Jandé se fue a su habitación sin comentarle una sola palabra a este sobre lo que acababa de suceder. Esa noche no pudo dormir por estar llorando y analizando lo mejor que puede hacer para alejarse y no fastidiar a las personas cercanas e importantes para su esposo.Entonces decidió salir en horas tempranas y volver a su antigua casa, a esa que compartió algún tiempo con Darío. Ella nunca se imaginó volver a encontrarse con su verdugo en la misma habitación donde muchas veces hicieron el amor y dijeron amarse con palabras que finalmente el viento se las llevó porque en realidad él no la quería.—Oh, eres tú, que has vuelto esposa mía. Pensé que era un ladrón que se había introducido en nuestro hogar. —Le dijo el hombre que ya estaba preparado para salir cuando escuchó sonidos afuera.—¿Qué haces aquí, Darío? —cuestionó armándose de valor, aunque en su interior se esté muriendo de miedo.—Esperándote, mi amor.