Capítulo 43

Tomé un taxi con mucho temor por el peligro que asechaba de noche esa inmensa ciudad, mi vida empezaba a ser totalmente distinta, antes no me hubiese permitido estar fuera de casa a esa hora. Mientras el hombre conducía pensaba en lo que vendría de ahora en adelante, y la forma en que debía enfrentarlo.

Llegué al hotel y aunque ya era noche, por suerte me dejaron pasar nuevamente, el estómago me dolía, estaba demasiado nerviosa, era un secreto que debía guardar, ni siquiera podía contárselo a Lucrecia, pues sabía que a pesar de su cariño sincero hacia mí, mantener comunicación con esa mujer era algo inentendible y no quería ser juzgada.

Ni siquiera yo era capaz de comprender por qué mi corazón corría tras Eduardo, por qué mi alma siempre lo suplicaba, todo era una terrible batalla entre mi pensamiento razonable y lo que mi ser me obligaba a realizar, solo deseaba mirar sus ojos todas las noches, sentir su olor, que fueran solo sus manos las únicas que tocaran mi cuerpo y que solo s
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo