Capítulo 36.

Narrador:

Como Daniel se lo dijo Brandon fue directo a la casa donde le hizo nuevamente el amor con mucha pasión a Sara y en medio de su encuentro sexual la volvió a morder esta vez reclamándola como suya, la vio dudar al momento de marcarlo a él.

—hazlo por favor déjame ser tuyo— su voz sonó como un ruego perdido en el éxtasis al sentir como algo en el interior de Sara le aprieta con ímpetu y ella al escucharlo no lo dudó más e igual renovó su marca en él. 

*mío*empezó a ronronear su loba y Sara seguía ardiendo por dentro, su cuerpo tenía más energía de lo habitual. 

—eres maravillosa—comentó Brandon embob

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