Hahahaha, ¿cuál de los dos se trae más ganas? Espero que estén amando esta historia como yo. ¡Un besote!
「 ✦INTERESES PERSONALES✦ 」 Todo pensamiento coherente se evaporó de sus mentes. Cada pensamiento lógico se desvaneció, solo para ser reemplazado por una necesidad enloquecedora, una fuerza salvaje que ninguno de los dos había experimentado. Tanto Santino como Sophia querían más, más de sus labios, más de su olor, más de todo. El sonido de un cristal al rompiéndose atrajo la atención de los invitados y la humedad salpicó los pies de Sophia, ella abrió los ojos y empezó a volver a la realidad. El rostro de Santino se encontraba a escasos centímetros del suyo, con su mano todavía en su nuca y la respiración agitada. Los dedos de Sophia aún estaban en su cabello, agarrando las sedosas hebras negras y sintiendo como en su interior comenzaban a desarrollarse sentimientos errados, sentimientos que no debería sentir por su esposo falso. —Ha sido una actuación perfecta —dijo Santino en voz baja— El cristal fue un detalle magistral. Sophia sintió como si un balde de agua fría le hubiera emp
「 ✦EL NO PUEDE SATISFACERTE✦ 」 Sophia se levantó lentamente y se acomodó el vestido, sintiendo la mirada abrasadora de Santino sobre ella. ―Supongo que fuimos más que convincentes ―dijo ―Todos deben pensar que… ―Que estoy loco por mi esposa ―completó él, su voz, bajando a un tono más suave, más íntimo. Sophia tragó saliva y respiró hondo. ―Sí, tú también hiciste un trabajo convincente ―respondió, intentando mantener su voz estable, aunque por dentro se sentía como si estuviera en una montaña rusa emocional. Santino la observó, su mirada intensa y llena de emociones no dichas. Por un momento, parecía que iba a revelar algo importante, algo que venía directamente de su corazón. Quería decirle a Sophia que para él todo había sido real; cada caricia, cada beso, cada palabra dicha. Pero se detuvo apretando los labios en un gesto de conflicto interno. La razón era simple, pero devastadora: aún tenía sus reservas debido a la traición de Kiara. Era herida, aún estaba demasiado fresca,
「 ✦EL NO PUEDE SATISFACERTE (II)✦ 」 Cuando la camioneta se detuvo en uno de los galpones secretos de la mansión, Santino no se molestó en seguir con su papel. Las puertas se abrieron y los dos hombres fueron arrastrados adentro. Los reconoció de inmediato, trabajaban para su padre. Soltó un chasquido y metió las manos en los bolsillos de sus pantalones. ―Fue un error. Nosotros solo… ―dijo uno de los hombres, temblando. ―Bueno… ―Santino se paseó frente a ellos, las piedras crujieron debajo de sus elegantes zapatos de vestir. ―Escuché que han estado robándome. ―No, por favor, señor ―suplicó uno de ellos, levantando las manos frente a él. ―¡Cierra la boca! ―le gritó el otro. ―No. ―El hombre asustado se volvió hacia el otro. ―¡Todo fue idea tuya! Te dije que no intentáramos traicionarlo. ―Soplón ―escupió el otro, tratando de acercarse a él, pero Andre lo detuvo. Fue entonces cuando Santino decidió matar dos pájaros de un tiro. Podría sacar su frustración mientras les mostraba a lo
「 ✦LEJOS DE ELLA✦ 」 El silencio se apoderó del jardín mientras Santino avanzaba hacia ellos, su expresión era una mezcla de ira y desconcierto. Sophia intentó recomponerse, su respiración aún entrecortada por el miedo y el esfuerzo. ―Santino… él intentó… ―Vuelve a la fiesta, yo me ocuparé de esto ―ordenó sin quitarle la mirada a Damiano. ―Pero… déjame explicarte, e… ―No me hagas repetirlo dos veces, Sophia ―dijo esta vez mirándola. Sophia asintió, incapaz de encontrar las palabras adecuadas. Y mientras se alejaba, no pudo evitar sentir un escalofrío recorriendo su espina dorsal. Una vez que se fue, Santino se acercó a Damiano con una amenaza velada en su mirada. ―Te lo advierto, mantente alejado de mi mujer― le ordenó con una promesa de violencia. Damiano, aún adolorido por el golpe previo, se burló con desdén de la advertencia. ―¿Tu mujer? Vamos, Santino, mírate. Eres un lisiado, una sombra de lo que fuiste. Un monstruo desfigurado ―escupió con veneno en cada palabra. ―Pron
「 ✦PERFECTA PARA MI HIJO✦ 」Mientras tanto, Sophia caminaba apresurada hacia las escaleras cuando fue interceptada por Vivian, quien observó su cara pálida y supuso que su plan con Damiano había tenido éxito. Internamente, sonrió.―Oh, querida, te ves tan pálida. ¿Estás bien? ―pregunto con una voz cargada de una preocupación tan fingida que casi podía verse la falsedad flotando en el aire.Sophia, sin embargo, no era estúpida y podía ver a kilómetros la hipocresía en la mujer. Y no estaba de ánimo para ponerla en su lugar; lo único que quería era subir a su habitación y calmarse. Iba a dar un paso cuando Vivian la agarró del brazo, enterrando sus uñas en su carne.―Realmente, querida, deberías aprender cuándo eres invisible ―siseó Vivian con desprecio, creyendo que Sophia pretendía ignorarla.Sophia siseó leve y rápidamente sujetó la mano de Vivian con fuerza, apretándola hasta el punto de que ella gimió.―No te equivoques, Vivian, y mucho menos me subestimes. Mantente lejos de mí. No
「 ✦DELICIOSA ADVERTENCIA✦ 」Santino, con voz baja y cargada de deseo, susurró cerca del oído de Sophia.―Eres una jodida tentación.Sophia contuvo la respiración, perdida en el azul profundo de los ojos de Santino. Sus alientos cálidos se mezclaron poco a poco y ella no hizo nada para apartarse; por alguna razón, esto no le parecía incorrecto. Alargando la mano, Santino movió el largo mechón de cabello que había caído sobre su cara y, sin pensarlo, la sujetó por la nuca, inclinándose más hacia ella y dejando un beso en su delicado y esbelto cuello, logrando que un jadeo bajo escapara de los labios de Sophia.Con la otra mano encontró la abertura de su bata, y escuchó la aguda respiración de ella cuando comenzó a deslizar su mano por su muslo desnudo. Sophia no dijo nada, y, en cambio, cerró los ojos disfrutando de su toque, sintiendo cómo su cuerpo reaccionaba extrañamente a este hombre del cual no sabía nada, pero del cual quería saberlo todo.Santino bajó su mano nuevamente y esta v
「 ✦UN ERROR✦ 」 Santino tuvo que contener una maldición, Sophia no tenía ni idea de lo mucho que le estaba costando mantenerse al margen. —Amore, me lo estás poniendo muy difícil y de verdad quiero ser bueno. Ella se estremeció cuando escucho su seductora voz en su oído. Movió sus caderas sobre sus piernas y su trasero se frotó contra la larga y dura polla debajo de los pantalones. —Me siento loca. No debería desearte, pero te deseo. ―ella susurró casi sobre sus labios, puede que después desee tirarse por un acantilado, pero mientras iba a llegar hasta el final de lo que en ese momento estaba viviendo. Santino no contuvo el gemido doloroso, y paso la nariz por el lateral de su cuello e inhalo. —No sabes lo que es la desesperación, amore. Apenas puedo ser el mismo desde que te conocí. Si pudieras ver dentro de mi cabeza ahora mismo, entenderías la desesperación que siento. Sophia movió el culo de un lado a otro contra su erección. —Tal vez tu desesperación se iría si haces lo que
「 ✦DESAYUNANDO INDIFERENCIA.✦ 」 ―¡Eres un estúpido! Rocco, con un movimiento rápido y lleno de ira, abofeteó a su hijo causando que su labio comenzara a sangrar. Damiano, mirando fijamente a su padre, le respondió con una mezcla de ira e impotencia en su voz. ―Ya no soy un niño, así que no atrevas a volver a pegarme o te juro que olvidaré que me diste la vida. Rocco, sin mostrar remordimiento por su acción, se burló. ―Entonces comienza a comportarte como tal y mantén tus hormonas bajo control ―le espetó con sarcasmo. Se giró y camino hacia el gran ventanal que le daba una vista a la ciudad. ―No permitiré que eches a perder mis planes solo porque quieres meter a tu cama a la esposa de Santino. Damiano, con los labios apretados y recordando la patada de Sophia, sintió cómo su ira e interés por ella crecían. La determinación por hacerla suya lo hizo estar aún más decidido a doblegarla. Rocco se giró nuevamente hacia Damiano y le espeto a su hijo con ira contenida. ―Santino tuvo el