Capítulo 55: Atando cabos.

La mano de Franco se cerró en un puño, su mandíbula apretada mientras se preparaba para defenderla contra la avalancha de acusaciones. Pero con un rápido movimiento, ella se deslizó delante de él, interceptando su creciente ira. Su mirada recorrió a Angus de pies a cabeza, cubriéndolo de visible desprecio.

—Vámonos de aquí —le susurró a Franco con urgencia, mientras sus dedos se entrelazaron con los de él.

Su tacto era un salvavidas en medio de la toxicidad.

—Creo que este ambiente es altamente dañino.

Con esas palabras decisivas, se alejó con Franco, dejando a Angus sumido en una volátil mezcla de furia e incredulidad.

Pero Angus no era de los que dejan que las brasas de la confrontación se enfríen tan rápidamente. Se abalanzó sobre Leonor y la agarró del brazo, haciéndola girar hacia el caos del que intentaba escapar.

Sus ojos ardían con una necesidad de respuestas que no se había calmado con su marcha.

—¿Crees que puedes ignorarme de esa manera? Por lo menos merezco una explic
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo