Capítulo XXII

Sebastián.

Me quedo observando, como se va Daphne.

—Joder ahora que las cosas están de maravilla, viene Samantha a meter sus narices— Entro furioso, cuando veo a la estúpida de Samantha, la tomo del brazo y le digo:

—Que sea la última vez, que te atreves a ponerle una mano a Daphne, porque a la próxima te las verás conmigo— la suelto y ve voy, pero antes de salir me dice:

—Esto no se va a quedar así, tú y esa mosquita muerta, me la van a pagar.

Salgo, me monto en mi camioneta, y decido ir a buscar a mi chica, entiendo porque está furiosa, yo en su lugar estaría igual, hasta peor; pero no puedo permitir que por las estupideces de Samantha, se aleje de mi.

Cuando llego, veo la camioneta de Paula, eso significa, que sigue aquí, solo espero que no me saquen a patadas. Me bajo, y estoy pensando mejor entrar por la ventana, pero no es necesario, abren la puerta, y es Paula

—Sebastián, ¿Qué haces aquí?

—Vine a hablar con Daphne.

—Es mejor, que hables con ella; cuando este más calmada.

—No p
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo