CAPÍTULO 65

—¡Ámber! ¡Abril! —grité, mientras mi voz resonaba en el gran salón del castillo. El aroma a lavanda y madera vieja llenaba el aire, mezclándose con el lejano zumbido de los preparativos.

—¡Freya! —El rostro de Ámber se iluminó al correr hacia mí, con su cabello rubio fresa rebotando con cada paso. Abril la seguía de cerca, con una cálida sonrisa dibujada en su rostro—. ¡Qué bueno verte!

—Vengan aquí —dije, abrazándolas con fuerza a ambas—. Me alegra mucho que hayan podido venir.

—¿Estás bromeando? —April soltó una risita, mientras su cabello castaño reflejaba la luz—. No nos perderíamos esto por nada del mundo. Has pasado por tanto, Freya. Te mereces toda la felicidad que te espera.

—Absolutamente —añadió Ámber, con sus ojos color avellana llenos de una calidez genuina—. Después de todo lo que has soportado, ya es hora de que te suceda algo maravilloso.

—Gracias —dije, sintiendo un nudo en la garganta—. Significa mucho tenerlas aquí. Realmente necesito su ayuda con los preparativos de
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo