Evangeline intentó asimilar las palabras de Roberto. Su mente era un torbellino de emociones, principalmente de sorpresa, nerviosismo, y mucha de indignación. Había trabajado arduamente durante seis años, soportando las excentricidades de Beatriz White, su jefa y mentora, con la esperanza de algún día ocupar su lugar. Y ahora, en lugar de recibir la promoción que creía merecer, tendría que competir por ella.

Esa era una m*****a broma.

"¿Una competencia?", repitió Jeremy, su voz cargada de incredulidad y molestia. "Pensé que habíamos discutido esto, padre. Se suponía que yo tomaría el puesto."

Roberto lo miró fijamente, su expresión imperturbable. "Jeremy, tienes que demostrar que puedes liderar. Esta es una oportunidad para ambos de mostrar lo que pueden hacer. La decisión final no se basará solo en tu experiencia o tus títulos, sino en tu capacidad para innovar y liderar un equipo."

Evangeline sintió un nudo en el estómago al escuchar las palabras de Roberto. Aunque le costaba admitirlo, sabía que Jeremy tenía razón para estar molesto, pero también sabía que no iba a permitir que alguien la pisoteara sin pelear. Había trabajado demasiado duro para llegar hasta aquí.

No dejaría que el hijito mimado del jefe la arruinara.

"Entiendo," dijo finalmente, su voz firme. "Estoy lista para la competencia."

Jeremy la miró con una mezcla de desafío y burla. "Bien. Que gane el mejor entonces."

Después de la reunión, Evangeline aun aturdida, se dirigió a la cafetería de la empresa para tomar un batido y discutir la inesperada noticia con su mejor amiga y compañera de trabajo, Laura Sánchez. Laura, siempre positiva y enérgica, intentó animar a su amiga.

"¡Esto es increíble, Evie! Tienes una oportunidad real de demostrar lo que vales. Además, eres muy competitiva, exageradamente competitiva, peleas hasta en los juegos de mesa y somos un equipo increíble. Vamos a ganar esto," dijo Laura, dándole un leve empujón en el hombro.

Evangeline sonrió, aunque su mente seguía abrumada por la magnitud de la competencia. "Gracias, Laura. No sé qué haría sin ti. Pero Jeremy es un remedado imbécil y para mi desgracia un rival duro. Tiene mucha más experiencia y recursos."

Había aprovechado para investigar, tenía un currículo impresionante, además de ser el hijo del dueño y gerente general de toda la empresa.

Laura hizo un gesto despreocupado con la mano. "Y tú tienes la pasión y la creatividad. Además, tienes algo que él no tiene: a mí." Ambas rieron, aliviando un poco la tensión del momento.

Evangeline mordió la pajilla de su batido, fue un largo camino llegar hasta donde estaba. Desde escapar de casa a penas terminar la escuela, porque sus horrorosos padres que eran fanáticos religiosos querían casarla con el pastor viejo y asqueroso de su iglesia. Despues contra viento y marea terminar una carrera universitaria en una prestigiosa universidad donde tenía una beca por haber tenido calificaciones notables, soportando hambre y trabajos de m****a porque no tenía donde caerse muerta. Cuando termino la universidad logro entrar en una de las empresas más sobresalientes del país y soportar a la loca de su jefa. Todo eso mientras lidiaba con un exnovio que resulto ser todo un imbécil.

Era una sobreviviente, ella no iba a rendirse ahora, tenía que ganar esto, se lo debía así misma, a la pequeña versión suya, la niña Evangeline con grandes sueños.

Evangeline y Laura continuaban discutiendo estrategias. "Primero, necesitamos asegurarnos de que tenemos las personas adecuadas en nuestro equipo," dijo Evangeline, tomando un sorbo de su segundo batido de chocolate. "James Mendez es excelente en redes sociales, y Sofía es brillante analizando datos de mercado."

Laura asintió, emocionada. "Definitivamente. Con ellos, tenemos una combinación perfecta de creatividad y análisis. Y claro, tienes a la mejor diseñadora gráfica a tu lado." Le guiñó un ojo a Evangeline, quien no pudo evitar sonreír.

"Sí, lo sé. Con tu ayuda, podemos hacerlo. Pero necesitamos más que un buen equipo. Necesitamos una idea innovadora, algo que realmente haga que nuestra campaña se destaque. ¡Necesitamos una idea ganadora!" dijo golpeando la mesa con su puño.

Laura se inclinó hacia adelante, con una chispa de entusiasmo en sus ojos. "Entonces, ¿qué tal si comenzamos con una lluvia de ideas esta misma tarde? Podemos reunir a todos y empezar a planear. Cuanto antes, mejor."

Evangeline asintió, su determinación renovada. "Vamos a ganar esto, Laura. Estoy lista para luchar por ello."

Las dos mejores amigas siguieron por más rato empezando a idear todo.

Evangeline se sentía un poco más tranquila después de su conversación con Laura, pero aún sabía que tenía mucho trabajo por delante. Mientras caminaba hacia su escritorio, trataba de ordenar sus pensamientos y planificar los siguientes pasos. Necesitaban un enfoque claro y estrategias bien definidas para ganar esta competencia.

De camino, se encontró con James Mendez en el pasillo. James, con su típica energía y entusiasmo, estaba revisando algo en su tablet.

"James, necesito hablar contigo. Tenemos una gran tarea por delante," le dijo Evangeline, captando su atención.

"¡Claro, Evie! ¿Qué sucede?", respondió James, siempre sonriéndole coqueto.

"Vamos a competir por la gerencia de marketing. Necesitamos formar un equipo y desarrollar una campaña para nuestro nuevo sabor, 'Cola Tropical'. Quiero que seas nuestro especialista en redes sociales. ¿Estás dentro?"

James sonrió ampliamente. "¿Estás bromeando? ¡Claro que estoy dentro! ¡Vamos a hacerlo! ¡Somos el equipo de superchispas!"

James chillo tan entusiasta como siempre, ese día tenía una corbata hecha de lentejuelas de colores. El era todo un personaje y a pesar de que algunos trabajadores lo miraban mal por su alegre manera de actuar, Evangeline siempre lo encontró muy simpático y, sobre todo, un excelente profesional, en su opinión, eso era lo único que importaba.

Con James a bordo, Evangeline se sintió más segura. Sabía que podía contar con él para crear un zumbido en las redes sociales. Era un maldito experto en eso. Ahora, solo necesitaban asegurarse de que Sofía Martínez también se uniera a su equipo.

Encontraron a Sofía en la sala de reuniones, revisando algunos informes. Evangeline y James se acercaron a ella con entusiasmo.

"Sofía, tenemos una gran oportunidad aquí," comenzó Evangeline. "Vamos a competir por la gerencia de marketing, y necesito que seas nuestra analista de mercado. Tu experiencia en análisis de datos es crucial para que nuestra campaña sea un éxito. ¿Te unes a nosotros?"

Sofía levantó la vista de sus informes, visiblemente intrigada. "¿Competir por la gerencia? Eso suena desafiante. Pero se rumorea que vas contra el hijo del jefe"

Evangeline sonrió con malicia.

"Es una tarado Sofia, créeme, no soportarías ni cinco minutos bajo su mando” dijo Evangeline.

Sofia la evalúo rápidamente y sonrió.

"Estoy dentro"

Con su equipo completo, Evangeline se sintió más confiada. Tenían la combinación perfecta de habilidades y talentos, y con Laura a su lado como su mejor amiga y diseñadora gráfica, sabían que podían hacer grandes cosas.

"Bien, equipo. Vamos a tener nuestra primera reunión de planificación esta tarde. Necesitamos ideas frescas y estrategias innovadoras. ¿Todos están listos?"

Los tres asintieron con entusiasmo, y Evangeline se sintió aliviada de ver el mismo entusiasmo reflejado en sus rostros.

Más tarde, esa tarde, el equipo de Evangeline se reunió en la sala de conferencias. Laura tenía sus bocetos listos, James estaba preparado con sus ideas de redes sociales, y Sofía tenía sus gráficos y datos a mano.

"Bien, equipo. Tenemos que destacar la frescura y el exotismo de nuestra 'Cola Tropical'. Quiero que todos pongamos nuestras mejores ideas sobre la mesa. Empecemos con una lluvia de ideas," dijo Evangeline, tomando asiento y abriendo su cuaderno.

Laura fue la primera en hablar. "Estaba pensando en un concepto visual que realmente resalte lo tropical. Algo con palmeras, playas y colores vibrantes. Podríamos usar elementos visuales que hagan sentir a la gente como si estuvieran de vacaciones cada vez que beban nuestra cola."

Evangeline asintió. "Eso suena genial. James, ¿qué piensas sobre las redes sociales? ¿Cómo podemos generar entusiasmo en línea?"

James se inclinó hacia adelante, claramente emocionado. "Podríamos lanzar una serie de desafíos y concursos en redes sociales. Algo como 'Comparte tu lugar tropical favorito' con fotos y videos. Los ganadores podrían recibir productos gratuitos o incluso viajes a destinos exóticos."

"Perfecto," dijo Evangeline. "Sofía, necesitamos datos. ¿Qué dicen las tendencias sobre los sabores exóticos? ¿Cómo podemos usar esa información para nuestro beneficio?"

Sofía abrió su laptop y comenzó a mostrar gráficos y estadísticas. "Los datos muestran que los consumidores están cada vez más interesados en sabores únicos y experiencias nuevas. La idea de un sabor tropical puede atraer a un público joven y aventurero. Podemos enfocar nuestra campaña en resaltar esos aspectos y posicionar nuestra bebida como algo fresco y emocionante."

Evangeline tomó notas mientras escuchaba, visualizando cómo podían unir todas estas ideas en una campaña cohesiva y poderosa. Necesitaban algo más, algo que realmente capturara la imaginación del público y los hiciera elegir su bebida sobre la de Jeremy.

"¿Y si hacemos un evento de lanzamiento?" sugirió de repente. "Podríamos organizar una fiesta temática tropical, con música en vivo, degustaciones y actividades interactivas. Podríamos invitar a influencers y medios de comunicación para asegurarnos de obtener la mayor cobertura posible."

El rostro de Laura se iluminó. "¡Eso es brillante, Evie! Podría diseñar invitaciones y materiales promocionales que realmente capten la esencia del evento. Y podemos usar las redes sociales para generar anticipación antes del gran día."

James y Sofía asintieron, claramente de acuerdo con la idea. "Podríamos hacer una cuenta regresiva en nuestras plataformas," sugirió James. "Publicar teasers y adelantos para mantener a la gente intrigada."

"Y podemos usar datos en tiempo real para ajustar nuestra estrategia según la respuesta del público," añadió Sofía. "De esa manera, nos aseguramos de que nuestra campaña sea efectiva desde el principio."

Sentada en la sala de conferencias, Evangeline sintió una oleada de orgullo y gratitud por su equipo. Sabía que no podría haber pedido un grupo mejor de personas para enfrentar este desafío. "De acuerdo, tenemos mucho trabajo por delante, pero estoy segura de que podemos hacerlo. Vamos a mostrarles a todos de qué estamos hechos."

La reunión continuó con una lluvia de ideas y planificación detallada. Cada miembro del equipo contribuyó con su experiencia y creatividad, y poco a poco, la campaña comenzó a tomar forma. Laura trabajó en los diseños visuales, creando imágenes vibrantes y atractivas que capturaban perfectamente el espíritu de la 'Cola Tropical'. James elaboró una estrategia detallada para las redes sociales, planificando publicaciones, concursos y colaboraciones con influencers. Sofía siguió profundizando en los datos, asegurándose de que cada decisión estuviera respaldada por información sólida.

A medida que avanzaban, Evangeline no podía evitar pensar en Jeremy y su equipo. Sabía que ellos también estarían trabajando arduamente, y aunque no quería admitirlo, le preocupaba que la experiencia y los recursos de Jeremy le dieran una ventaja. Pero cada vez que esa preocupación comenzaba a invadirla, recordaba las palabras de Roberto: esta competencia no solo se basaba en experiencia, sino en innovación y liderazgo.

Evangeline decidió que se concentrarían en sus propios puntos fuertes y en cómo utilizarlos para crear algo verdaderamente espectacular. No podían controlar lo que hacía Jeremy, pero podían asegurarse de que su campaña fuera la mejor posible.

Esa noche, después de horas de trabajo intenso, el equipo decidió que era hora de descansar. Evangeline se quedó un poco más, revisando sus notas y ajustando algunos detalles. Mientras se dirigía a casa, se sintió agotada pero optimista. Sabía que el camino por delante sería difícil, pero también sabía que tenía un equipo increíble y una visión clara de lo que querían lograr.

A la mañana siguiente, Evangeline llegó a la oficina con una taza de café grande y la determinación de enfrentar lo que fuera que el día trajera. Laura ya estaba allí, revisando sus bocetos y ajustando detalles en sus diseños. James estaba en una llamada, organizando colaboraciones con influencers, y Sofía estaba analizando más datos para afinar su estrategia.

Evangeline se sentó en su escritorio y revisó sus notas y planes, sintiéndose más segura con cada momento que pasaba. Estaba tan absorta en su trabajo que casi no notó cuando Jeremy entró en la sala de conferencias con su equipo. Levantó la vista y sus ojos se encontraron brevemente, una chispa de desafío y desagrado en su mirada.

No pudo evitar preguntarse qué tipo de ideas estaba desarrollando Jeremy. Sabía que él era competitivo y no se detendría ante nada para ganar. Pero también sabía que tenía que mantenerse enfocada en su propio trabajo y no dejarse distraer por él.

Durante el día, el equipo de Evangeline se sumergió en su trabajo, ajustando detalles y perfeccionando su estrategia. Laura trabajaba incansablemente en los diseños visuales, creando imágenes vibrantes y atractivas que capturaban perfectamente el espíritu de la 'Cola Tropical'. James estaba constantemente en contacto con posibles colaboradores y planificando estrategias en redes sociales. Sofía seguía profundizando en los datos, buscando cualquier ventaja que pudieran usar para asegurarse de que su campaña fuera un éxito.

Una tarde, mientras revisaban los últimos detalles, Laura se volvió hacia Evangeline con una sonrisa. "¿Recuerdas cuando empezamos aquí, Evie? Nunca imaginé que estaríamos haciendo algo tan grande."

Evangeline asintió, sonriendo ante el recuerdo. "Sí, ha sido un viaje increíble. Y aún no hemos terminado. Vamos a ganar esto, Laura. Lo sé."

Esa noche, mientras salía de la oficina, Evangeline pensó en lo lejos que habían llegado y en lo mucho que aún quedaba por hacer. Pero, por primera vez en mucho tiempo, sentía que estaba exactamente donde debía estar. Confiaba en su equipo, en sus ideas y en su capacidad para superar cualquier obstáculo.

La competencia aún no había terminado, y sabía que Jeremy y su equipo no se detendrían ante nada para ganar. Pero también sabía que, sin importar el resultado, había crecido y aprendido más de lo que jamás había imaginado. Y eso, en sí mismo, era una victoria.