Ella se equilibró de nuevo y se apartó de él con un manotazo, él la miró divertido.
—¿Leia verdad?
—¡Yo no te hice nada! —ella volvió a retroceder.
—No...
—¡Tú eres el loco que me beso! —le interrumpió.
—Eso es lo que...
—¡¿Has venido a secuestrarme de nuevo?!
—¡No te voy a secuestrar! —él la calló—. Yo… —suspiro y peino su cabello con las manos frustrado—. Yo he venido a disculparme y darte una explicación.
—¿Ah? —ella se detuvo—. ¿No quieres hacerme daño?
—Por supuesto que no —él puso sus manos en su bolsillo—. Yo no quiero hacerte daño, y estoy avergonzado de la manera en la que te trate.
—¿De verdad?
Bael respiró y se acercó a la puerta.
—Apenas está amaneciendo, vamos a tener algo de tiempo antes de ir a la escuela, cámbiate y luego vamos a desayunar, yo te invito.
—Pero… —ella recordó que Liam iría a recogerla.
—Te espero en mi auto.
Él se fue dejándola con la palabra en la boca.
***
Bael la había llevado a un restaurante de comida rápida.
¿Desayunarían hamburguesas?
—Voy a pedirnos un par de hamburguesas.
Si, lo harían.
—Liam me iba a recoger —dijo ella sentándose.
—¿Por qué te recogería el idiota ese?
—¿Por amabilidad?
—Le mandaré un mensaje, no te preocupes.
Se fue a hacer los pedidos, ella se sentía molesta e intranquila, seguía sin confiar en Bael y estaba triste de no pasar tiempo con Liam.
¿Se molestará porque me fui con Bael? , pensó, No, seguro se sintió tranquilo de quitarse la tarea.
Bael volvió con las hamburguesas y empezó a disculparse por todo lo sucedido ayer. Leia le explicó que ya sabía su naturaleza demoníaca y que ya estaba todo olvidado.
—También quiero preguntarte algo —él pareció ponerse nervioso.
—¿Qué cosa?
—¿Quieres ser mi novia?
—¡¿Qué?!
***
—Haber si entiendo —dijo después de sorber un poco del batido que Bael le había comprado—. La chica que estaba llorando frente a nosotros era tu ex llamada Bonnie...
—Sip… —Bael le contestó con la boca llena de hamburguesa.
—Llevan un poco más de un año y según tú, antes de que ella volviera de su manada estaba loquita de amor por ti...
—¡Exacto!
Bael se terminó su hamburguesa de un bocado y miro la mitad de su hamburguesa apuntándola.
—¿Te la vas a terminar?
Leia lo miro con asco.
—Te la puedes terminar si quieres —le entregó la hamburguesa y siguió hablando—. Entonces, después que volvió, exactamente hace dos días, terminó contigo porque se enamoró de otro, ayer la viste besarle y lo atacaste como un enfermo descerebrado.
—Aja.
Leia lo quedó mirando un momento, ahora que estaba calmado, no parecía un asesino en serie que la había secuestrado. Parecía un chico normal.
Hasta le compró una hamburguesa, aunque no era algo que deberían desayunar.
—¿Pero en qué ayudaría que yo me hiciera pasar por tu novia?
—Yo sé que Bonnie todavía me quiere —Bael cambio de semblante triste—. No sé porqué lo hace, pero sé que es un teatro, tal vez si me ve contigo se ponga celosa.
—No se te pasa por la cabeza —Leia toco su hombro—. Que tal vez ella sí se haya enamorado de verdad de ese chico.
—No —negó—. Ella aun me quiere, lo nuestro es especial.
—¡Por el amor de dios! —Leia lo miró incrédula—. ¡Tienen 16 años!, somos muy jóvenes para saber que es especial y que no...
—No lo entiendes.
—¡Claro que no lo entiendo! —se enojó—. Además que no creo que, saliendo con una chica como yo, le de celos.
—¿Una chica como tú? —la miró intrigado.
—No te hagas el tonto —ella bajo la mirada—. Sabes a que me refiero, como si un chico como tú saldría como alguien como yo.
Bael la miró sin comprender y después abrió los ojos de manera exagerada.
—¡¿Eres mitad vampiro?! —dijo alarmado—. Oh no ¡ya se!, eres mitad hechicera como mi tío Dylan.
—¡No te hagas el gracioso!
—De verdad no tengo idea de que me hablas —la miró con los ojos entrecerrados—. ¿Por qué no me fijaría en ti?
Leia lo miraba sorprendida, ¿De verdad no entendía o lo decía por no herir sus sentimientos?
—Yo... yo no soy una chica... tan bonita, ni alta, ni de categoría y delgada como las chicas que hay en esa escuela —no lo vio a la cara por vergüenza—. Además eres un príncipe, ¿No te daría vergüenza que te vean conmigo?
—Para mi eres igual o más bonita que las chicas de la escuela —dijo algo sobrepasado—. Es la primera vez que conozco a alguien en la escuela que entra por ser inteligente, no por su posición social, deberías estar orgullosa de ti misma. Además, a mí nunca me ha interesado lo que digan los demás de mí, como dice mi papá... las personas son estúpidas, no merecen atención y si te molestan quémalos vivos.
—¿Qué tu papá qué?
—¡¿Vas a ser mi novia o no?!
—¡Apenas te conozco!, ni siquiera me caes bien.
—Solo será de mentira —él la miró suplicante—. Solo disimularemos enfrente de todos.
—¿Qué ganaría yo de esto?
—¿Quieres dinero?
Claro que lo quería, pero no así.
—No necesito tu dinero —ella cruzó los brazos.
—Yo haré todo lo que quieras —él se veía desesperado—. Mira, una de sus amigas me dio información, todos piensan en la escuela que tú y yo nos conocemos de antes y es por eso que te metiste en la pelea y te bese, le escuchó decir a Bonnie que tal vez tu seas unas de las chicas que conocí en verano.
—¿Qué conociste en verano? —lo miro sin entender.
—Liam y yo nos metimos en problemas en verano.
—¿De las chicas de las drogas?
—¿Liam te contó? —lo miro extrañado.
—Fue Odette.
—¿También conociste a Odette? —negó con la cabeza—. No importa, la cosa es que Bonnie pensó que mientras ella estaba de viaje en su manada, pensó que yo tuve que ver con alguna de ellas y discutimos mucho por teléfono —él se quedó pensativo y su rostro se apagó—. Hablamos todos los días y de repente ... me termina, no lo entiendo.
—Lo siento —Leia le dio tristeza verlo así—. Quisiera ayudarte, pero no creo poder hacerlo.
El boto el aire que estaba reteniendo y asintió.
—Perdón por pedírtelo —Bael asintió—, y perdón por todo, yo te recompensaré por lo que te hice.
—No tienes que hacerlo..
—Te protegeré
Le dio otra vez esa sonrisa torcida que a ella le ponía los pelos de punta.
***
—Me siento como si fuera algo en exhibición —dijo cuando caminaban por los pasillos de la escuela—. Puedo sentir las miradas por todos lados.
—Bienvenida a mi mundo —le sonrió Bael—. Ser príncipe significa estar exhibido todo el tiempo y que las personas crean tener derecho a juzgarte.
—Qué triste —dijo sarcástica—. Debes llorar mucho en el palacio donde vives y secarte con los billetes que te sobran.
—No vivo en el palacio.
—¿Qué? —pregunto abriendo su casillero—. ¿No se supone que la familia real vive en el palacio?
—Mi padre discutió con mi tía Rosali un día cuando yo tenía 8 y decidió que nos mudaríamos porque no la soportaba —se empezó a reír—. Fue muy gracioso.
—Tu papá parece interesante.
—Si —él se rió un poco—. Es alguien realmente interesante.
—¿Quién es interesante?
Liam llegó a ellos, otra vez se puso nerviosa, no sabía por qué.
—Que te importa oxigenado —Bael lo sujetó del cuello riendo y ahorcándolo—. ¿Cómo está mi tía Rosali?
—Más grande —lo apartó sonriendo también—. ¿Hola Leia?
—Hola —casi susurro.
¿Por qué sentía que se iba a morir de un infarto?
—¿Y de qué hablaron los dos? —Liam intentó parecer desinteresado fallando por completo.
Bael lo noto.
—Le pedí disculpas —Bael alzó una ceja—. Gracias por cuidarla ayer, pero yo me encargo desde ahora, no tienes que recogerla nunca más.
¿Y que seré yo, como para que este se encargue de mí?
—Leia es mi amiga, y ella es quien decide si debo recogerla para venir a la escuela —dijo Liam alzando un poco la voz
Es un sol.
—La voy a recoger yo desde ahora Liam —gruñó Bael—. Deja de actuar como si te interesara.
Feo.
—Me interesa—Liam dejó de sonreír.
¿Le interesó?, ¡Necesito mi inhalador!
Bael le sostuvo la mirada mordiendo su labio para retener una carcajada.
—No debería —él atrajo a Leia, agarrándola desprevenida—. Estamos saliendo ahora.
—¡¿Nosotros qué?! —Leia se quiso apartar, pero Bael puso más fuerza en su agarre.
—¡Gabriela está matando a tu ex!
Leia sintió como Bael se desprendió de él para seguir al chico que había venido gritando, Liam la miró de una manera triste y siguió a los chicos.
¿Qué acaba de pasar?
—¿Me dices que la puta de Deniska se imaginó que tú le sonreíste? Theo estaba recostado en su cama mirando al techo, intentando tener paciencia mientras Gabriela caminaba por su habitación, echándole en cara cosas que jamás sucedieron. —Yo le sonrió a todo el mundo Gabriela. —¡¿Osea que coqueteas con todas maldito idiota?! —le tiró una almohada— ¡Terminamos! —ella gritó histérica—. ¡No puedo seguir con alguien que le sonríe a cualquier estúpida que se le atraviesa! Ella caminó hacia la puerta, pero Theo se levantó rápidamente, la sujetó del brazo y la lanzó a la cama posicionándose encima de ella. Él la beso a la fuerza, sujetándola fuerte de los brazos para que no lo golpeara, ella cedió después de unos minutos, cuando él cedió sus manos, Gabriela enr
Por instinto los seguí, además no era la única, todos corrían para ver lo que sea que estaba ocurriendo. Salí por la parte trasera de la escuela, era como un gran patio, en medio pude ver como Liam luchaba con una chica muy parecida a Bael. Debe ser su gemela. El le gritaba cosas mientras ella esquivaba y lanzaba golpes muy ágilmente, era muy obvio que los dos parecían estar acostumbrados a luchar, porque ella sentía estar viendo una escena de acción de una película. Se preocupo un momento por él, pero en el momento que Liam lograba arrebatarle el bate de béisbol y empezar a intentar romperle la cabeza con eso, mientras la gemela de Bael parecía desquiciada, incitándolo a que le dé, se dio cuenta que ellos parecían divertirse. Se preguntó dónde estaba Bael y porque no era el que intentaba
—¿Solo le rompió el fémur? —¡Alan! Nuestros padres gritaban histéricos dentro de la cocina, mi hermana dormía encima del mueble, normalmente cuando ella dejaba que su demonio la dominara, terminaba muy agotada, antes no solía creerle, pensaba que lo hacía para evitar que nuestros padres le gritaran inmediatamente después de su travesura, para cuando hablaran con ella, ya estarían calmados. Pero después de que fui poseído por primera vez, me doy cuenta que es demasiado peligroso. ¿Cómo ha podido mantenerlo a raya tanto tiempo?, ¿Cómo lo hace papá cuando su demonio es más poderoso? Yo empezaba a asustarme, apenas faltan días para cumplir 17 y ya puedo sentir la manera como voy cambiando, a veces me dan ganas de huir a un lugar donde no pueda dañ
—¿Te gusta la ciudad? Liam me miró por un segundo para devolver la vista al frente del auto, hoy había estado conmigo desde el almuerzo y ahora estábamos paseando en su auto. Estaba un poco sobrepasada con sus atenciones, no sé si estaba paranoica, pero sentía que él cuidaba cada cosa que hacía o decía cuando estaba en mi presencia. Tal Vez era mi mente recordándome las palabras de Bael o mi baja autoestima que aun no podía creer que un chico como él, tenga tantas atenciones conmigo, o tal vez era que apenas llevaba un día conociéndolo y él parecía conocerme de toda la vida. —¿Te puedo hacer una pregunta? —¿Estás respondiendo mi pregunta con otra pregunta? —sonrió. —Me gusta mucho la ciudad, es la más herm
—Espera Bael —Liam sujeto el hombro de su primo—. Tenemos que hablar en privado.—Qué tal si vamos adelantándonos —dijo Theo a Odette y a Joon—. Si tomamos el camino del lago, llegaremos más rápido a la casa de mi tío Jaime.—¿Qué es tan importante que no podemos escucharlo? —Estefan bufo—. Igual nos vamos a enterar.—No seas metiche —Theo sujetó del brazo a Estefan y lo arrastró—. Ellos tienen que hablar.Se fueron discutiendo y adentrándose más al bosque, cuando Liam ya no pudo escucharlo miro a Bael al rostro.—¿Desde cuándo eres tan serio? &m
—¿Estás dormida?Escucho un susurro en la oscuridad, que sueño tan raro estoy teniendo en estos momentos.—¿Quién es el que te mando una canasta llena de bollos y te puso en la tarjeta "lo siento por lo de hoy, ricos bollos para mi pequeña bollo favorita"? ... ¿Quién tiene tan horrible sentido del humor?Gruño exhausta.—¿Estoy escuchando a Bael también en mis sueños? —susurro aun con los ojos cerrados.—¿También?Abro mis ojos dando cuenta de tres cosas:1.-Las luces de mi minidepar
—Hola —un chico que se parecía un poco a Liam me saluda—. ¿Tú eres la nueva cierto?—Sí, es ella —otro chico apareció en el aula, a él si lo podía reconocer porque estuvo en mi clase de ayer—. No sabes todo el drama que te perdiste Bastián, tu prima casi mato al nuevo novio de Bonnie.—¿El nuevo novio de Bonnie? —el tal Bastian miró al chico—. ¿De qué mierda estás hablando Natsuki? ¡Solo falte dos días!El chico empieza contarle los sucesos superficialmente, yo me sentía un poco intimidada, el chico asiático estaba sentado enfrente de nosotros y el tal Bastián escuchaba su relato sentado a mi lado.
—Ten cuidado —Liam me guiaba sujetando mi mano, mientras caminaba sobre piedras altas—. Es lindo que aún te guste jugar así.—Literalmente no he crecido nada —sonreí mientras intentaba concentrarme para no caer—. Además, se que me atraparías si caigo.—Siempre.Estábamos jugando en el bosque, ya era fin de semana y habían pasado varios días desde que Gabriela convenciera a los demás para usarme en su plan. Liam se había puesto en contra al comienzo, pero yo lo convencí de hacerlo, no es que me animara engañar al hechicero hombre lobo más poderoso del reino, pero quería ganarme al círculo de Liam y no sabía por qué.Último capítulo