En La Dorada, Lara se acurrucaba en los brazos de su esposo. El día siguiente llegaría cargado de desafíos. La conferencia de prensa sería algo difícil ya que estaba muy arraigada la idea de que una mala mujer había separado a esa hermosa niña de su prometido, y para su mala suerte esa mala mujer era ella.La mano traviesa había comenzado por tocar todo lo que encontraba a su paso, quería tener un poco de diversión antes de su nueva batalla. Mimosa comenzó a dar pequeños besitos en la fuerte mandíbula de Viggo que respondió con un gruñido de satisfacción._ Parece que he creado un monstruo lujurioso _ dijo el hombre tomándola de la mandíbula para besar de manera demandante y apasionada a su dulce esposa.Ese beso llevó a otro y en un segundo ya estaban ambos disfrutando de la unión de sus cuerpos. Era sublime y maravilloso, no querían ni podían detenerse, era algo que los sobrepasaba, pero el amor y la lujuria los desbordaba constantemente.En otra de las habitaciones estaban Adriano
Hay momentos en la vida de las personas que son decisivos para su propio futuro. Puede tener que ver con cuestiones laborales, educacionales, familiares o amorosas.Es ese instante en la vida en el que de repente una iluminación inunda al ser y este puede ver más allá, comprender aquello que aún permanecía oculto, tomar la decisión correcta, ese momento es “un darse cuenta”.Lara había atravesado su iniciación con éxito. Ella había partido dejando atrás su vida, y también el amor oculto que sentía por Viggo, un amor que creía imposible, luego se casó con Aarón, pero tras todo lo ocurrido, ella comprendió que nunca dejó de amar a Viggo, se dio cuenta de que intentó ocultar ese amor bajo la alfombra, olvidar aquello que creí imposible, pero ahora, que era un hecho, lucharía con uñas y dientes por estar a su lado, ahora que sabe que no es gay y que la ama con locura ella destruiría al mundo completo si se oponía a que ese amor continuara y se expandiera._ Esa es mi niña _ se escuchó una
Viggo observaba a todos los presentes con un gesto adusto. Estaba estudiándolos uno a uno, quería saber quiénes serían un problema a futuro para él o su familia. Tenía que comprobar cuáles era los que podrían ser comprados por personas amorales como su abuelo._ Son muchos los rumores y comentarios mal intencionados que se han lanzado en mi contra, pero principalmente en contra de mi amada esposa _ comenzó a decir con frialdad en sus ojos y un amenazante tono de voz _ para todos aquellos que han actuado con malicia e inescrupulosamente quiero informarles que han sido vilmente utilizados para hostigar a la mujer que desde que es tan solo una adolescente ha sido el amor de mi vida. Mi esposa no es otra que Lara Kovacs, mujer con la que he estado comprometido desde hace años _ hubo un murmullo creciente en la sala, nadie podía decir que eso era mentira puesto que todos los Kovacs estaban allí para atestiguar la veracidad de esa afirmación._ Es de público conocimiento que mi esposa perma
Todos se miraban entre sí más que sorprendidos. Consideraban que estas personas eran realmente extrañas, pero la verdad es que no habían aclarado nada de todo lo que se había dicho sobre el compromiso, Viggo ahora parecía un descarado que se aprovechaba de las jóvenes enamoradizas, quedando así Ana como una niña ingenua que ha sido usada y burlada.Estaban todos hablando y sacando sus hipótesis cuando, en la pantalla gigante que había en la sala, se comenzó a proyectar un video. Parecía ser una fiesta, se veía a una Ana completamente desinhibida que bailaba de manera muy sensual con un joven que se encontraba a su espalda. La imagen en ese momento no era comprometedora en gran media, pero luego se ve como ella se voltea y comienza a besar a ese hombre muy descaradamente. Luego él la toma de la mano y caminan juntos por un pasillo de lo que parece ser un bar muy concurrido, luego la imagen se centra en ellos caminando por ese lugar, ella acariciando cierta parte del muchacho y él metie
Franco Miller era un hombre de 25 años, al igual que su hermana melliza era sumamente arrogante, déspota y clasista. Él se consideraba un dios ya que todas las mujeres se rendían a sus pies, y los hombres también. Hacía y deshacía a su antojo y poco le importaban las demás personas a su alrededor. Él no había viajado con todos porque tenía sus propios asuntos que resolver. Era malicioso y estaba metido en asuntos un tanto turbios que lo catalogaban como uno de los hombres del bajo mundo de Ciudad A. Sus contactos eran bastante fuertes en ese ambiente y eso lo hacía aún más ambicioso y tiránico con todas las personas que él consideraba inferior y eso era, prácticamente, todo el mundo.Él había viajado en cuanto vio que las cosas se les estaban complicando a los miembros de su familia. Tendría que buscar la manera de ayudarlos, era de público conocimiento que ese matrimonio sería sumamente beneficioso y, a él lo catapultaría a la sima en sus negocios espurios. Ser parte de la familia Ho
Honorato se sentía completamente complacido con la evidente aceptación de esa niña, que pronto se convertiría en su flamante esposa. Su nuevo plan era sumamente tentador. Era momento de llamar a su abogado, debía de preparar todos los papeles, lo primero sería quitar a Viggo de la presidencia de las compañías Holt, esperaba que con eso ese nieto desnaturalizado comprendiera que con él no se juega y viera que no podría vivir como estaba acostumbrado. Los dejaría en la calle a todos, tanto su hijo como su nieto tendrían que pagar el precio de aliarse a esa mujer.Ana seguía, como perro fiel a su lado. Ella esperaba las nuevas órdenes de su futuro marido. Si lo consideraba un poco su condición, en cierta manera había mejorado. No se casaba con un hombre apuesto, pero sí lo hacía con el dueño real de todo, que dejaría en manos de su futuro hijo toda la fortuna, y lo mejor es que el viejo en cualquier momento podría morir y ella quedaría libre para buscar un nuevo acompañante. Sería una viu
Ese día había sido para todos uno lleno de emociones nuevas y algunas sumamente difíciles de procesar.La noche había llegado y ya todos estaban en sus camas, sus mentes los llevaban una y otra vez por las distintas experiencias de ese día. Para todos ellos había sido algo satisfactorio pero por razones diametralmente opuestas.Por un lado Honorato sonreía feliz considerando que en unos días esa hermosa carne fresca dormiría en su cama y que muy pronto le daría un hijo. Uno que formaría a su imagen y semejanza y que sería el encargado de llevar su patrimonio y su legado a los cielos. Ese hijo no sería un débil sentimental, por el contrario sería todo un hombre, tal y como él lo era.Ana, estaba feliz, esa sería una buena manera de vengarse de esa mujer por quitarle a su hombre, sí ella pensaba que Viggo le pertenecía, pero ahora todo lo que él poseía sería suyo y ellos se quedarían en la calle. Poco sabía Ana de la fortuna de los Kovacs y de que ellos jamás dejan a su familia de lado.
En el puesto central de la mesa se encontraba ya sentado Honorato. A su derecha estaba Aarón Miller. Pero lo más sorprendente de todo es que de pie, pero junto al anciano y tomando su mano se encontraba nada más, y nada menos que Ana Miller.Ahora sí que Viggo se sentía confundido en extremo. Esta es una situación que nunca se vio venir. Su aura fría se enfrió aún más. Sentía una incipiente repulsión por esas personas que estaban en ese lugar. La ambición desmedida se dejaba notar en cada gesto de ambos._ Siéntate _ fueron las palabras de Honorato hacia su nieto.Viggo le dio la mirada más desprovista de emociones que pudiera haber existido y obedeció al anciano. El mayor comprendió que su nieto era aún más destacable de lo que hubiera podido sospechar. Era una pena que se dejará dominar por inútiles sentimientos, más aún, que se uniera a esa mujer._ Lo que tengo que decir es breve. Te relevo de tu cargo en esta empresa, ya no tienes permitido siquiera poner un pie en este lugar, ni