La cita con Remy continuó, por lo que Areliz intentó no seguir pensando en sus nervios por la situación con los Cobain. Areliz decidió que sería una buena idea traer un postre para culminar la cena. Fue a la cocina y regresó con dos rebanadas de pastel de chocolate que había comprado ayer (más bien por un antojo que le dio debido al estrés del juicio), dispuestas en platos individuales. La conversación había girado hacia temas más livianos, como el trabajo en el hospital y sus compañeros y pacientes, pero de repente, Remy comenzó a abrazarla, pasando su brazo por sus hombros, y luego empezó a darle besitos tiernos en la mejilla. Ella se sintió incómoda, su mente todavía luchando contra las emociones confusas que la invadían, pero los besitos de Remy no eran pervertidos ni trataban de llevar a más, simple mente eran tiernas muestras de afecto ¿cómo podría apartar lo cuando estaba siendo tan tierno? Aun que se sentía un poco incómoda, pero… él era su novio, no debería sentirse así.R
Remy, sin ningún respeto al hecho de que esa casa era la propiedad de Areliz y no la suya, y que por lo tanto era ella la que mandaba en ese lugar, se había tomado el atrevimiento de cerrarle la puerta en la cara a Noah a pesar de que Areliz había tomado la decisión de abrirle y dejarlo contarle lo que acababa de pasar con su padre el señor Nelson Cobain que había estado estacionado fuera de su casa causándole pánico. Ella quería saber qué era lo que Noah tenía para decirle, ¡y a Remy no le interesó respetar su decisión ni en lo más mínimo!—Remy… —Lo siguió con la boca abierta, antes de fruncir el ceño—. ¿Acaso te has olvidado que esta es mi casa? —gruñó entre dientes, casi temblando por la indignación. Él volteó a verla con los ojos muy abiertos, como si recién se diera cuenta de lo irrespetuoso que acababa de ser con ella. —¿Mami? —Su hijo la miró preocupado y ella se mordió el labio para contener la ira. —Todo está bien, mi amor, no te preocupes —le dijo con cariño, y luego vol
Areliz pudo escapar exitosa mente de la pregunta de Remy, los días pasaron y su relación volvió más o menos a la normalidad con ellos teniendo citas y ambos evitando el tema de los Cobain, lo que mantenía la paz y les permitía relajarse y divertirse juntos. Sin embargo, lo que sí interrumpía su paz al tener citas fuera de la casa eran los periodistas. En la televisión la prensa se volvió más agresiva que nunca contra ella, probable mente por la influencia de Nelson Cobain que seguía en el país y ya había dado un par de entrevistas hablando maravillas de Nia y diciendo cosas horribles de Areliz, puras mentiras, pero que debido a su poder e influencia mucha gente escuchaba y muchos también le creían. Por lo tanto, la prensa la estaba atacando más que nunca, lo cual preocupaba a los abogados de que tantos ataques pudieran influenciar a los jurados, por lo que Noah empezó a ir a varios programas de televisión para desmentir a su padre, ya que no quería que ella tuviera que soportar l
Areliz tenía ante ella la desagradable visita de su ex suegro, el mismísimo señor Nelson Cobain, quien hace no mucho había estado incluso acosandola en su trabajo, y ahora tenía el descaro de presentarse a su puerta y pedirle entrar como si tuviera todo el derecho del mundo, como si ella no fuera capaz de notar el desagrado con el que la miraba y sus obvios aires de superioridad, sus obvios deseos de intimidarla y destruirla. Noah ya le había dicho, a través de una llamada telefónica, que su padre el otro día se presentó en su casa por que había querido hablar con ella “Sobre Nia” y que estaba muy decidido a lograr su objetivo de hablar. Así que al diablo, hablaría con él y luego trataría de dejarle muy en claro que le importaba muy poco su opinión. Estaba decidida a enfrentar a este hombre ella misma, sin dejarse intimidar. Ni siquiera se molestó en ofrecerle algo de beber, simple mente se sentó frente a él y lo miró fija mente, esperando a que empezara a hablar. —¿Ni siquiera me
Noah había pedido una orden de arresto contra Nia, pero debido al papeleo, una excusa ridícula en opinión de Areliz, todavía no podía ser efectiva, así que no podrían hacer nada contra Nia por el momento. Nada más que ganarle en la corte de una vez y para siempre. El juicio comenzó. Presentaron muchas pruebas y llamaron a varios testigos, entre ellos Remy, claro. Y Remy, fiel a su palabra, defendió a capa y espada la reputación de Areliz y su prestigio como doctora, siendo bastante contundente al acusar a Nia de haber matado a Emma ella misma, sin importarle que luego quisieran acusarlo de algo. —La llenó de drogas para aparentar un ataque que la hiciera ver frágil y vulnerable frente a Noah —aseguró Remy sin pelos en la lengua—. Y apuesto que ni siquiera sabían las consecuencias de darle tantos medicamentos a alguien tan débil y anémica, ¡Nia Cobain mató a Emma! —aseguró, haciendo jadear a varios por su franqueza. Areliz estaba muy orgullosa de él, y se decidió a que después de
La decisión del jurado ya estaba hecha, impactante, cruel y sin sentido alguno, pero estaba hecha... Areliz fue declarada culpable de asesinato en primer grado respecto a la muerte de Emma. Y, al oír eso, ella se quedó completa mente helada, sintiéndose como si todo su mundo se cayera a pedazos a su alrededor. —¡¿QUÉ DICE?! —Noah estrelló las manos en la mesa frente a él con furia—. ¡Esto es una locura, ellos solo han traído periodistas y mentirosos como su mejor prueba, nosotros hemos traído médicos y personas cercanas al caso! ¡Esto es inaceptable! —Debe respetar al jurado, señor Cobain. —Dos policías se acercaron a Noah para calmarlo. —¡No respeto nada! ¡Quiero apelar esta locura ahora mismo! —Señor, debe calmarse, claro que podremos apelar, pero no haga una escena ahora —le pidió el abogado hombre del matrimonio de abogados que contrató. Noah se quedó gruñendo de furia, mientras que Areliz siguió congelada, escuchando al juez estrellar su martillo contra su escritorio, dicta
Teo condujo a Areliz por un angosto camino de tierra rodeado de árboles altos. A medida que avanzaban, la ciudad quedaba atrás y la civilización parecía desvanecerse en un horizonte lejano. Finalmente, llegaron a un claro en medio del bosque, donde una cabaña de madera bastante grande se alzaba majestuosa.La cabaña tenía un aspecto rústico y encantador, con detalles de madera tallada y una gran terraza en la parte delantera. Junto a la cabaña, una pequeña huerta florecía con una variedad de colores y fragancias. Más allá, un establo algo pequeño albergaba a varios caballos. Areliz quedó asombrada por la belleza del lugar y la paz que irradiaba.A pesar de la tranquilidad del entorno, Areliz no podía evitar sentir una angustia constante por su situación. Sabía que, por ahora, su vida y la de su hijo dependían de mantenerse escondidos en este lugar remoto. Era un refugio, sí, pero también era una prisión de su propia creación, donde la normalidad y la libertad parecían un sueño inalcanz
Luego de que Arelizn le expresara a Teo su deseo de agradecerle a Noah por todo lo que había hecho, se sorprendió de que Teo le pidiera que mejor no le agradeciera, debido a que eso podía darle falsas esperanzas a Noah, que aún la amaba y estaba dolido por la relación que ella tenía ahora por Remy. Aun que, irónicamente, Teo sonaba muy parecido a Remy mientras le decía que Noah no merecía recibir su gratitud, aun que estaba segura de que Teo lo decía por pura consideración a su mejor amigo. Decidió mejor no pensar en eso y esperar a la llegada de Dylan y su hijo. Teo le hizo un café, que ella agradeció mucho y se sintió algo más relajada, pero siguió ansiosa de ver a su hijo, preguntándose si real mente iba a llegar, si la policía iba a interceptarlos, si alguna vez podrían recuperar sus vidas normales. Final mente, llegó a escuchar el sonido de un auto acercarse y rápida mente bajó al primer piso. Dylan llegó a la cabaña junto a su hijo Nick, su niño de dos años que tenía una so