Me sentía exhausto y solo físicamente por el vuelto tan largo que había tomado si no también mentalmente, sentir que estaba haciendo lo que jure no hacer me estaba matando por dentro.
Estaba regresando a new York cuando tenía una buena vida en París ¿Por qué? Por imbécil porque estoy tan costumbrado hacer lo que ellos dicen al menos en parte porque los justificó diciendo que son mis padres.
Recojo mi maleta y trato de encontrar a Siwon, el chófer de mí familia desde que tengo uso de razón, hasta que lo veo con un cartel en alto en el que se luce mi nombre entre la multitud, su imagen es graciosa.
¡¡¿Por qué usa eso?!!
¿Se supone que no lo reconocería o que?
— No me diga nada... —le digo levantando mi dedo para apuntar en su dirección cuando iba abrir la boca para justifica a la persona que había solicitado mi presencia en new york — ¿Acaso el señor no tuvo tiempo de venir aunque sea? — Pregunté de mal humor
— ¿Cómo ha estado joven Silva? — me ofrece la mano y yo la acepte.
Yo podía ser todo menos un jodido mal educado.
— Muy bien ¿Y usted Siwon? — siempre me agradó este hombre eso no lo podía negar
— También, por suerte... ¿Qué tal si vamos yendo? Quiero descansar — Le infome
— Lamento decirle que señor que lo de dormir tendrá que ser después . — dice él —. Tengo órdenes de su padre de llevarlo a la empresa ni bien deje sus pertenencias en el departamento.
— ¿Ah sí? ¡Ok... Si el señor lo dice, pues entonces será! — tendré que posponer mis planes.
Llegamos al auto y una vez que acomodo mi equipaje en el maletero salimos rumbo a mi casa.
— ¿Qué tal estuvo el vuelo señor? — Pregunto
— Tranquilo, pero es realmente cansador volar por tantas horas y había perdido la costumbre.
— Tome... — veo que me extiende unas llaves — su madre me pidió que se las entregara. Ella mandó a limpiar el lugar y también hizo algunas refacciones este último tiempo.
— Gracias Siwon... ¿Ella está en la empresa también?
— No señor, dijo que cuando saliera de la galería pasaría por su departamento para verlo.
— Ok... Ellos siempre tan ocupados. —suspiro, creo que mi estadía aquí será patética y no dudo que esto solo empeore
*******Cuarenta minutos más tarde llego a mi antiguo pero renovado departamento.Temía al menos 4 años sin venir, había decidido hacerme cargo de la empresa que mi padre tenía en París y ahí lo estaba formando todo lejos de ellos
Luego de presentarme con el nuevo encargado del edificio subo a dejar mi equipaje y pegarme una ducha rápida mientras Siwon aguarda en el auto.
Al entrar me encuentro con el lugar totalmente modificado y obvio que ya nada tiene mi estilo sino que el de mi madre...
Cierro los ojos y respiro profundo, aún me cuesta manejar mis impulsos cuando nada sale como yo quiero.
No lo pienso más y me dirijo a mi cuarto que también ha corrido con la misma suerte, me meto a la ducha y trato de no pensar mucho más.
No estaré mucho tiempo aquí así que trato de no darle tantas vueltas al asunto.
Un rato más tarde, finalmente, llego a la compañía y luego de identificarme subo al quinto piso donde está la oficina del flamante señor silva mi padre
Después de que su linda secretaria me anuncie al fín me deja pasar...
— ¡Hijo, al fin llegas! — exclama desde su posición —. Te he estado esperando toda la mañana... — los años le han pasado factura sin dudas.
— Hola padre... —finalmente se pone de pie—. He llegado hace un rato, pasé por mi departamento antes de venir aquí...
— Déjame verte, mira nada más cómo has cambiado hijo — agrega palmeando mi hombro izquierdo—, seis años es mucho tiempo...
— Lo es... — pero han sido mis mejores seis años, sin dudas.
— Anda toma asiento — me pide señalando un sillón junto a su escritorio—. ¿Quieres tomar algo? Pide lo que quieras le diré a Angélica que te lo traiga.
— Un café bastará, gracias.
Veo que levanta el teléfono y le pide a su secretaria no uno sino dos cafés. Y como soy ansioso no aguanto más y voy directo al grano.
— Padre, ¿Me dirás ahora para qué querías verme?
— Si por supuesto, para algo te he hecho volar desde París ¿no?
— Pues soy todo oídos... — me acomodo mejor en mi asiento y lo miro atentamente.
— Verás, necesito que te hagas cargo de la compañía por un tiempo y no sólo de la de Paris necesito que te encargues de esta de la principal. —seguramente es broma... ¿Yo al frente de todo esto?
— Padre, creo que...
— Déjame terminar Alejandro por favor. —interrumpe él—. En un mes aproximadamente me iré a china a realizar un tratamiento médico, estaré allí por un tiempo y necesito que te hagas cargo de todo esto. Te has graduado con honores en París y sé perfectamente que estás capacitado para llevar al frente está empresa porque lo has hecho más que bien en la de allá.
No puedo negar que esa noticia me había caído fuerte
— Yo no puedo, tengo mi vida en París y estoy conforme con ella, perdóname pero no lo haré — me niego a instalarme aquí nuevamente.
— Mira Alejandro la empresa está pasando por unos de sus peores momentos y yo no tengo las fuerzas para sacarla adelante, la empresa está casi en quiebra ¿Entiendes eso? — me aclara él—. Si la compañía cae tu vida en París caerá con ella. Hasta he tenido que asociarme con la competencia para lograr sacarla adelante
Eso sí me preocupaba había vivido todo este tiempo muy despreocupado y solo vivía de mi sueldo y de los beneficios de la empresa no tenía nada más con que un día pudiera sustentar me
— Dile a mi hermano, él sabrá que hacer, le va muy bien aquí ¿no?
— Tu hermano ya tiene suficiente con su propia compañía, está casado y a punto de ser padre. — ni me lo recuerden —. En cambio tú, sigues sin poner los pies en la tierra y ya es hora de que tomes responsabilidades más grandes
Y por esto me fui por su m*****a manía en compararme
¿Porque tenía que compararme con el?
¡¡No quería esa m****a para!!!
¡¡No quería más de eso, una boda una casa y una familia feliz!!
¡¡quería ser viviendo mi m*****a vida a mi gusto!!
— Pues no lo haré —trato de sonar firme para que no insista, me levanto de la silla en donde estoy — no dejaré mi vida solo porque a tí se te ocurre. Ya no soy un niño al que puedas dominar como tú quieras padre, toda mi vida está en París y no voy hacer tú santa voluntad no soy una de tus malditos empleados
— ¿A qué le llamas vida? —pregunta alterado —. ¿A esa mujer con la que convives?!! — Admito que eso me sorprendió no sabía que el ataba tan actualizado de mi vida — ¿El andar de fiesta en fiesta? Alcoholizado y quién sabe qué más o quizás sea por la chica con la que te encuentras de vez en cuando... Lo se todo Alejandro
¡¡Maldito infeliz!!
— ¿Me has mandado a investigar? —pregunto sobrepasado por la sorpresa —. ¡No lo puedo creer! — agrego ante la falta de respuesta — ¿Con qué derecho? Y en todo caso es mi m*****a vida y yo decidí que hacer con ella — Golpeé la mesa ya alterando me
— Eres mi hijo, esa es razón suficiente. ¡¡Hace exactamente seis años que tu madre y yo no sabíamos nada de tu vida!!! ¿Tú qué crees? — menciona poniéndose de pie —. Tu vida privada no es de mi incumbencia pero tendrás que hacerte cargo de esto hasta que yo pueda volver
Tengo que pensar con la cabeza fría lo puedo perder absolutamente todo
— Tú nunca juegas limpio. — lo haré pero tengo mi condición —. La quiero a ella aquí — Le digo el ríe
¿Que es lo que le da gracia?
— Lo lamento pero eso no podrá ser, tengo otros planes para ti... — de pronto se quiere adueñar de mí vida —. Además de que esa mujer no es buena influencia para tí, sé muchas cosas Alejandro de las cuales no quiero ni hablar
— Pues no hay trato entonces... —¿también va a manipular mi vida amorosa? —. Lo que haga o deje de hacer con ella es mi problema.
— Te casarás la semana entrante con la de nuestro nuevo socio.
— ¿Qué? — ¿Así como así?
Escucho eso y comienzo a reírme, es mucha estupidez junta...
— ¡¡Esto es una jodida broma!! — tiene que serlo —. ¿Me estás hablando en serio? No puede ser.
— Muy en serio —agrega tranquilamente—. Firmaremos un contrato matrimonial por un año y medio. Al efectuarse el divorcio dividiremos legalmente los frutos de esta sociedad al 50%. Con esta unión planeamos juntar fuerzas para sacar adelante el negocio y expandirnos por el mercado mundial, sé que harás un gran trabajo.
— ¡No hables como si hubiese aceptado esa m****a! — Grité fuera de mi ¿Como podía estarme haciendo eso? Esa m****a es otro límite incluso para el — ¡Esto es una locura! ¡¡¿Casarme?!! No, eso sí que no lo haré, no me casaré con alguien que ni siquiera conozco.
— Lo siento pero tendrás que hacerlo, luego de un año y medio podrás continuar tu vida como quieras, pero ahora te necesito aquí y que lleves adelante el plan que te he mencionado.
— Están locos, tú y mamá no pueden obligarme a hacer esto. —¡No lo puedo creer!
— Tu madre no estaba de acuerdo... —por fin una persona cuerda en todo esto—. Pero luego de conversar mucho con ella, logré hacer que vea el lado positivo... —¿hay lado positivo?—. Habrá una cena mañana por la noche en casa de los Martínez irás con nosotros y conocerás esa hermosa chica
— Me imagino que ella estará en total desacuerdo con esto también, no te preocupes, hablaré con ella y
— Es un buena chica, tiene diecinueve años apenas y hará lo que sus padres le pidan... — es un niña ¿Como m****a voy a casarme con una niña de 19 años —. Quizás deberías aprender un poco ¿no?
Me pongo de pié para salir de ahí de una buena vez, incrédulo de toda esta situación.
— No me digas... pues yo no puedo creer que ella con esa edad haya aceptado ser parte de esta farsa... —debe de ser tan codiciosa como sus padres, debe ser eso.
— Puede ser ¿Por qué no? Todos saldremos beneficiados de esto si las cosas salen como planeamos con el señor Martínez
— Mejor me voy, necesito estar lejos de todo este loquero... —esto es un circo del cual no quiero ser parte.
— Piénsalo bien, sólo será un año y medio y luego tú decidirás qué hacer con tu vida, tal cual lo vienes haciendo y tendrás tu vida lejos de nosotros si deseas, tendrás el manejo de la empresa allá incluso te daré esa cede para ti así que tendrás dinero y no dependerás de la cede si así lo deseas.
Era algo bueno muy bueno, podría tener la empresa
—¿Qué pasa si no acepto? — que es lo más probable.
— Pues lamentablemente tendré que vender el departamento en París y el auto también ya que es parte de la empresa, a eso súmale mi tratamiento y mi estadía en Norteamérica. — quita su vista del gran ventanal y camina hacia donde estoy—. Creo que llegó el momento de que dejes de vivir con tantos privilegios y te pongas la empresa al hombro, ya ha sido bastante libertinaje.
— Acepto quedarme y ayudarte con la compañía, pero no me casaré con esa chica — es totalmente loco e injusto —. No cargaré con eso.
— Es el combo... tómalo o déjalo. Quiero que lo pienses bien, te necesito frente a la compañía y que lleves adelante todo esto ¡¡deja de ser tan egoísta por una vez y piensa en lo que te pido!! — Grito lo último
— Necesito aire, ya he tenido suficiente por el día de hoy y eso que llevo un par de horas aquí... — camino hacia la puerta y cuando la abro me encuentro a su secretaria con lo que le había ordenado anteriormente—. Hablaré con mi madre luego, adiós.
Sin pensarlo dos veces salgo de aquel edificio que parece ahogarme.
Esto no tiene lógica... ¿Casarme?Yo no me ato a nadie y mucho menos con una niña... Debo hablar con ella y convencerlo que esto no nos conviene a ninguno de los dos.— Si eso haré... —me digo a mi mismo y mañana será la oportunidad perfecta...
Narra Nicol MartínezOdio la imagen que me devuelve el cristal frente a mí, pero es mi único aliado al momento en que practico una y otra vez la coreografía que el profesor de danza nos encargó para esta semana. Trato de perfeccionar mis movimientos pero no hay caso, fallo una y otra vez en el mismo giro. Suspiró con frustración Tomo la toalla para secar el sudor que corre por mí rostro y me convenzo que es suficiente por hoy. Estoy agotada y decido tomar un largo baño en recompensa por mí esfuerzo. Hoy es domingo y quedé con mi amiga Talía en ir al cine a ver una de esas películas sentimentales que a ella tanto le gusta, mientras se atora comiendo palomitas y kilos de dulces para matar la angustia... Simplemente la envidio por eso, no sé cómo puede comer tanto y no engordar un gramo. ¡Maldita Talía! Salgo de mi relajante baño y busco qué ponerme. Después de un rato termino ataviada en lo mismo de siempre. No soy tan fanática de los vestidos aún así es lo que más hay en mi clóse
Narra Alejandro Silva. Son las ocho en punto cuando llegamos junto a mis padres a la residencia de los Martínez No voy a mentir me siento algo nervioso, pero estoy decidido a hablar con esa niña y evitar esta locura. Ese es mí objetivo principal esta noche. No pienso casarme... Acepté hacerme cargo de la compañía y trabajar para sacarla adelante pero no de esa parte del trato. Una vez que ingresamos a la casa somos recibidos por su ama de llaves quién nos guía hacia la gran sala de estar. — Tomen asiento. Iré a avisarle a los señores que ya han llegado. Con su permiso. — veo a la señora realizar una reverencia y perderse por el pasillo. Tomo asiento y observo el lugar. — ¿Qué te parece la casa? — se acerca mi madre y toma asiento a mi lado. — Bonita decoración... — digo sin importancia. — Alejando hijo recuerda lo que te dije. — insiste mí padre —. La señora Martínez es algo intensa así que te pido calma... — me recuerda por tercera vez. — Tranquilo padre, trataré de ma
Narra Nicol MartínezSalí de ese baño despavorida. Incrédula de lo que acababa de suceder. Aún siento el corazón palpitar en mi garganta. ¿Qué rayos fue todo eso?¡¡Es un maldito loco!!Camino lentamente por el pasillo tratando de serenarme antes de entrar nuevamente al comedor. Ese chico me da miedo, siento que es capaz de hacer cualquier cosa para lograr su objetivo y la verdad no me interesa mientras no me perjudique.Respiro hondo y tomo valor para enfrentar lo que queda de la noche... Pero al parecer Dios no me iluminó con los dotes de la actuación, porque no puedo disimular mí malestar.— Nicol, ¿Todo bien? — pregunta mi padre.— Si padre. Todo está bien. — respondo y tomo asiento en mi lugar. No pasan ni cinco minutos que él vuelve a ingresar a la sala y aunque no levanto la mirada siento la suya quemándome en la piel.Esto es incómodo. ¿Por qué es tan intenso?— ¿Qué tal si pasamos a la sala? —menciona mi madre luego de un momento —. Aún hay algunas cuestiones que debemo
Narra Alejandro Silva El sábado por la mañana me encuentra preparando mi maleta. Estoy decidido a dejar estados unidos y volver a París, de dónde nunca tendría que haber salido. Fue un error volver... Están completamente locos si piensan que me casaré con esa niña y además tener que compartir el mismo techo con ella Me niego rotundamente. A mí no me engaña... Podrá hacerlo con mis padres pero conmigo no.Esa chica es tan arpía como su madre, o quizás peor, oculta bajo ese manto de inocencia un buen plan. Estoy casi seguro de ello... Perdido entre mis pensamientos y contradicciones escucho cuando tocan a la puerta de mi departamento... Genial no estoy para visitas, mi humor es pésimo en este momento. Al abrir la puerta me encuentro con mis amigos José y Pedro del otro lado. — ¡Buen día! —me dice Pedro mostrándome un pack de café. — ¿Llegamos en mal momento? —pregunta al ver mi cara y todo mi departamento. — La verdad de bueno no tienen nada. —digo sin entusiasmo —. Estoy ar
Narra Nicol Martínez. Creo que hay algunas cosas en este mundo que están marcadas en nuestro camino. El destino está absolutamente fuera de nuestro control. Y aquí estoy afrontando mi propio destino... Ese que ya estaba escrito para mí y del cual espero me lleve a cosas buenas en el futuro. Esa mañana de sábado mi madre me sacó temprano de la cama de mi Nana... Sí, había dormido con ella la noche anterior, ya que en el medio de la noche se desató una terrible tormenta sobre la ciudad. Hasta el cielo estaba de acuerdo conmigo ese día y desató su furia. Como le tengo pánico a las benditos relámpago y sobre todo a los rayos, corro escaleras abajo para meterme en la cama de mi Nana... Ella me da seguridad. Desde que llegué a esa casa siempre hice lo mismo, ya que mi madre jamás me abrió la puerta cuando pedía su consuelo. El plan del día era ir de compras, pasar por algún salón donde me arreglaran el cabello y por la tarde teníamos cita con una diseñadora ara elegir que usaría en
Narra Alejandro Silva Esto es muy gracioso... Trato de no reírme pero me es imposible. No creí que fuera tan divertido, en verdad. Es increíble como esta niña entra en pánico cuando me tiene cerca, lo que me confirma que será muy fácil persuadirla una vez que lo tenga en mis manos... Esto es pan comido. Entramos a la sastrería del hombre que por años ha vestido a mi familia, para elegir el modelo que usaremos el día de la dichosa boda junto a él está un diseñador de vestidos de novia Mientras nuestras respectivas madres no dejan de hablar ni un segundo yo apoyo mi mano sobre la nuca de Nicol y la guío a mi lado... Está tensa, dura como una roca puedo sentirlo, y me encanta que así sea. Lo disfruto demasiado. — ¿Podrías soltarme? — me pregunta despacito para que nadie lo escuche. — No. Estoy en papel de futuro marido protector y cariñoso... Así que no te soltaré. Deberías relajarte... cualquiera diría que estás aterrada. — Sé caminar sola así que Sueltame ... —me dice quit
Narra Nicol Martínez Era una tarde soleada de domingo y aquí estábamos mirando con Tati la caja blanca que se encontraba arriba de mi cama... A la cual recién la había dejado un repartidor. Ninguno de las dos se animaba a abrirla.Lo que había dentro de esa elegante caja dictaminaba mi sentencia, esa que yo mismo había firmado unas noches atrás. — ¡Ya! Si tú no me lo quieres mostrar entonces lo veré yo mismo. — Tati se levanta de la cama y comienza a abrir la caja donde descansa mi traje. — Es horrible — digo mostrando mi poco entusiasmo. — No te creo. Con lo caro que cuestan los diseños ahí no puede ser feo... — me dice lleno de incredulidad. — Pues para mí es el traje más feo del mundo -— le digo encaprichada. — ¡Ooohhh! — grita de pronto cuando abre la bendita caja — ¡Nicol, por Dios! ¡Es increíble! ¿Cómo puede disgustarte esto? — Para mí no significa nada, es solo un capricho más de él y de mí madre. Si hasta parece que se han puesto de acuerdo los dos. — La verdad te
La impaciencia se reflejaba en mi rostro...Habíamos llegado una hora antes al hotel donde se haría la conferencia para anunciar la boda. Estaba aburrido sentado esperando que mi querido futuro esposo me deleitara con su presencia, y exactamente quince minutos después lo veo entrar por la puerta de acceso... sólaAl verla inevitablemente me hago la misma pregunta que me vengo haciendo últimamente ¿Conseguiría vivir con ese chica un año entero? Era totalmente incierto.Me coloco de pie acomodando mi chaqueta y me acerco a ellal... Es hora de divertirme un rato.— Debo decirte que tienes muy malos modales, cariño. ¿No piensas saludarme?Me quedo esperando su reacción, pero no llega nada. Ni un "Hola", ni una mirada.— Buenos días a ti también, Nicol — le digo suavemente.— Buenos días... — me contesta cortante.Al verla de cerca noto que está algo maquillada y debo reconocer que tiene unos labios tentadores.— ¿Has venido más dispuesta hoy mi amor? — mi pregunta atrae su mirada.— ¿Di