Tengo una extraña obsesión sana de dibujar todo lo que veo. Bueno quizás no todo, si no lo que llama mucho mi atención, lo que creo que es necesario plasmar con una hoja y lápiz para no olvidar. Puedo perderme al dibujar, mi mente vuela y no presto atención a lo que sucede a mí alrededor
– ¿Becca me estas escuchando? – A eso me refería estaba tan concentrada viendo los arboles que nos rodeaban que no preste atención a lo que decía Lisa – mi querida hermana mayor –
– Si, perdón ¿Qué decías? – Lisa solo sonrió un poco sin quitar la mirada de la carretera, una que se encontraba vacía, era de esperarse ya que literalmente nos estábamos adentrando a lo que parecía ser un especie de bosque
– Esto va a ser emocionante ya lo veras. Podemos empezar de nuevo en este lugar – Simplemente asentí, quizás en el fondo compartía al menos un poco de su emoción. En realidad era una mezcla de sentimientos, emoción, miedo, entre otras cosas.
Mi mirada fue nuevamente a lo que nos rodeaba, los arboles eran realmente altos, tan altos que incluso podrías marearte de solo ver su altura, mi mano se desplazo rápidamente por el cuaderno plasmando con el lápiz las líneas de los arboles. Al menos aun podría conservar eso, en el momento que a mi hermana le dieron el traslado para el nuevo hospital en el que trabajaría tuvimos que mudarnos, dejando todo atrás. Nueva casa, nueva escuela simplemente nueva vida
Nos estamos mudando a Mysterious Forest – Si, el nombre le queda perfecto – un lugar que no se encuentra en los mapas, créanme lo he buscado. Aun así lo que sabemos del lugar es que se trata de un pueblito no tan chico pero nada comparado a mi antigua ciudad, cuenta con un hospital, algunas tiendas, casas, departamento de policía una pequeña universidad y un instituto. El grandioso instituto History. A mis 18 años voy a volver a experimentar lo que se siente ser la nueva, todavía me queda el último año de instituto y eso es una de las cosas que me aterra.
Nuevamente la voz de Lisa me quito de mis pensamientos.
– Hemos llegado Becca. Hogar dulce hogar – Dijo en un pequeño susurro, junto a un pequeño suspiro de alivio
Frente a la que sería nuestra nueva casa se encontraba un hombre vestido de traje con papeles en la mano. Al ver bajar a Lisa del auto se acerco apresuradamente hacia nosotras
– ¿Señoritas Smith? – Lisa asintió y el hombre le brindo una sonrisa, parecía aliviado – Les doy la bienvenida a su nuevo hogar, mi nombre es Willian James y soy el encargado de confirmar que todo esté en orden y por su puesto de su llegada. Espero que Mysterious Forest sea de su agrado.
– Muchas gracias señor James, mi nombre es Lisa y Ella es Rebeca mi hermana menor – el tal Willian estrecho su mano hacia nosotras, parecía inofensivo, algo avergonzado y quizás algo confundido. Me preguntada si era porque por su cabeza estaba buscando la respuesta al porque mi hermana y yo éramos tan diferentes o quizás solo se preguntaba si la belleza de Lisa era de este planeta. Me inclinaba más por la segunda al ver como se quedaba mirando a Lisa más de la cuenta
Mi atención fue hacia la casa, era bonita, contaba con dos pisos y un lindo jardín al frente.
– Bueno no les quito mas su tiempo, entren y disfruten de su nuevo hogar, espero que su estancia aquí sea grata y cualquier cosa que necesiten en los papales de la casa está mi numero de celular – eso ultimo creo que fue más para cualquier necesidad de Lisa que para otra cosa. El hombre se subió a su auto y salió como un rayo hacia la carretera
– Creo que lo hipnotizaste. Pobre hombre – los ojos de Lisa se abrieron con una graciosa expresión de sorpresa, claramente fingida o quizás no. Después de todo Lisa era algo ingenua para algunas cosas
– Deja de decir tonterías y entremos – algo avergonzada se apresuro a entrar a la casa ignorándome por completo.
Al entrar a la casa pude confirmar que era igual de bonita que lo que era por fuera. Contaba con una cocina, sala, comedor y un baño en el primer piso. Había una escalera de una linda madera que dirigía al segundo piso, supuse que ahí se encontrarían las habitaciones, la subí rápidamente quería elegir la mejor habitación para mí. Y no me equivoque al subir en el pasillo se encontraban tres puertas. Luego de revisar las tres habitaciones decidí quedarme con la última, la más alejada de las demás, la vista era realmente increíble detrás de la casa se encontraba parte del bosque, así que mi ventada daba hacia allí
Lo que más me fascinaba era que cada habitación contaba con un baño privado, no mas peleas con Lisa en la mañana por ver quien se duchaba primero. Estaba terminar de desempacar algunas de las pocas cosas que trajimos en el auto ya que la mayoría de las cosa llegaría casi al final del día junto al camión de mudanza. Lisa se encontraba viéndome desde el marco de la puerta
– Cariño, ¿Qué te parece la nueva casa? – Aun sin que yo se lo dijera paso a la habitación para sentarse en la punta de la cama
– Es linda, espero que podamos adaptarnos aquí – Es lo que me inquieta un poco, el no encajar. Lisa al ver mi miedo o frustración me abraza. Los abrazos de lisa siempre terminaban siendo reconfortantes
– Ay beca tranquila sabremos cómo adaptarnos, será fácil y cualquier cosa siempre estaré yo para ti, siempre estaré a tu lado hermanita – al oír decir eso de Lisa me dejo más tranquila. Quizás estaba exagerando un poco, solo que todo fue como muy deprisa. Pero por suerte mi hermana sabía que decir o hacer para hacerme sentir segura – Ahora arriba ese ánimo y baja a comer hice tu comida favorita – Sonrío al escuchar eso, aun no había superado mi obsesión por la pizza – Y después de comer a dormir señorita que mañana tiene su primer día de instituto – y adiós sonrisa. Lisa se rio con fuerza a ver mi cambio de expresión, joder mi humor había saltado por la ventana. Luego de arrojarle una camisera que tenía en la mano ella salió de la habitación aun riéndose
Mi hermana mayor era tan distinta a mí, somos dos polos completamente opuestos, dos personas diferentes desde lo físico ya que ella es rubia y de ojos claros mientras que mi cabello es negro y mis ojos son bastante oscuros, que rozan ser casi negros. Algo que realmente me encantaba. Incluso la personalidad, Lisa era súper sociable, alegre, extrovertida y yo era mas realista y estar con muchas personas me resulta sofocante.
La diferencia que hay entre ambas es algo que desde niña siempre tuve la duda, y al morir nuestros padres lisa me contó porque somos tan diferentes. Pues si resulta que soy adoptada. La familia de lisa me adopto cuando apenas tenía unos meses de nacida, Lisa en ese momento tenía 5 años y pues sus padres no podían tener más hijos entonces decidieron adoptar, llegaron al orfanato MADRES DE LA VIDA y se quedaron conmigo. Más nunca supe que fue de mis verdaderos padres.
Al bajar e ir hacia la cocina Lisa estaba terminado de preparar la mesa, la pizza se encontraba en la mesa como ella había dicho. Comimos platicando de lo que sería nuestras vidas de ahora en adelante.
Al terminar de cenar cada una se fue a sus habitaciones con la intención de dormir. Al otro día yo tendría instituto y ella su primer día en el nuevo hospital. Al llegar a la habitación me termine de abrumar al ver desordenadas muchas de las cosas que habían llegado durante la cena. Luego de pensarlo bien decidí intentar ordenar un poco antes de ir a dormir, pero antes una ducha relájate para quitar el estrés de la mudanza.
Al salir me puse un pijama que consistía de unos short cortos y una blusa de tirantes y comencé con las primeras cajas, en eso se me fue parte de la noche. Alrededor de la una de la mañana pude terminar con la mayoría de las cajas, faltaban unas pocas pero me di por vencida por hoy, mucho deporte por un día, sin mas me tire a la cama y deje que el sueñe me reclamara.
Desperté sobresaltada, esperaba ver lo que a partir de ayer seria el techo de mi nuevo cuarto pero no fue así. Desperté en lo que parecía ser un bosque, lo cual me parecía raro ya que no recordaba ser sonámbula ni tenía ningún recuerdo haber caminado hasta aquí, estaba confundida y algo desorientada. Empecé a caminar tratando de encontrar una salida. El vestido blanco que tenía se enredaba con las raíces de los árboles y podía sentir el lodo en mis pies descalzos.
Llevaba un rato caminando, comenzada a agobiarme por no poder encontrar la salida solo tenía esa sensación de estar caminando en círculo ya que he estado en el mismo lugar una y otra vez. No fue después de un rato que llegue a una parte donde no había estando antes, no había arboles solamente una linda laguna y frente a esa laguna se encontraba un chico con las piernas flexionadas medio sentado dándome la espaldas. Aun en esa posición se notaba que era alto, delgado y el color de su cabello era castaño, mas no pude ver su rostro.
Al acercarme a él comencé a tener un revuelo de sentimientos. Mi corazón latía con desenfreno, sentimientos de tristeza, añoranza, dolor comenzaban a surgir de mí. Un profundo dolor en el corazón me dejaba realmente confundida, tenía la necesidad de correr hacia él y abrazarlo fuerte y no volver a soltarlo nunca más, con pasos lentos y algunas lagrimas en mis ojos camine hacia él. Sin querer termine por pisar una pequeña rama logrando que esta se parta a la mitad haciendo un ligero ruido que corto con el silencio del lugar, al oírlo el cuerpo de él se tenso de inmediato lentamente se levanto y si podría confirma que era bastante alto, aun así en ningún momento se dio la vuelta. Mi mano fue a su hombro y una pequeña descarga de corriente recorrió mi cuerpo entero. Como si estuviera en cámara lenta el comenzó a girar, sin embargo todo comenzó a distorsionarse, poco a poco comenzaba a, poco a poco comenzaba a sentir el calor de mi habitación despertándome de ese extraño sueño.
Algunas lágrimas caían de mis ojos y sin saber el porqué mi mirada fue hacia la ventana, las cortinas estaban levantadas por lo cual me daba el perfecto panorama de la luna y el bosque, aun tenía el sueño presente, aun así intentaba no darle tanta vuelta y volver a dormir. Pero se me hacía imposible, daba vueltas en la cama intentando volver a concebir el sueño, pero el extraño sentimiento de ser observada no se iba
– Joder – me sentía frustrada y nada mejor que dibujar, me levante yendo hacia el escritorio donde estaban las carpetas me senté y empecé a dibujar, sin quererlo realmente termine por dibujar el bosque, el lago y a aquel desconocido de espaldas termine por agregarle la fecha y el horario, tenía una costumbre por colocar esos pequeños detalles
Ya eran más de las 3:30 de la madrugada necesitaba dormir al menos un poco, no quería llegar con tan mala cara mi primer día de instituto, no necesitaba que nadie me mire más de la cuenta ya tenía suficiente sabiendo que iba a ser observada por a ser la chica nueva en un curso que ya había comenzado hace algunas semanas. Para mi suerte luego de cerrar completamente las cortinas y de acostarme y apagar la luz de noche que tenía en mi mesita logre que el sueño volviera de apoco, esta vez sin lagos, bosques sin salidas ni chicos misteriosos.
Sentía la molestia de los rayos de sol dándome directo en la cara. Me senté en la cama algo confundida, juraba haber cerrado las cortinas antes de acostarme. Unos golpes a la puerta me terminaron de despertar– Pase – Lisa se adentro a la habitación ya preparada para salir a trabajar. Apenas podía abrir bien los ojos estaba demasiado cansada. Me volví a acostar tapándome con las mantas hasta la cabeza, yo solo quería dormir. Estúpido sueño que no me dejo dormir parte de la noche.– Te venia a despertar pero te me adelantaste. ¿Y ese milagro a que se debe? – odiaba despertarme tan temprano para cualquier cosa, por eso Lisa siempre es la encargada que hacer que me levante de mi cama, aunque tenga que arrastrarme de la cama. Sin contestar mis ojos se iban cerrando nuevamente – Becca, Becca despierta - las manos de Lisa intentaron quitarme las mantas– Cinco minutos más Liz – me negaba a levantarme – Rebecca Smith te quiero ver fuera de esta cama en dos minutos– No – refunfuñe– Perfe
En las siguientes clases se me fue imposible prestar atención a algo de lo que decían los profesores, no podía sacarme de la cabeza esos ojos dorados, su voz tan profunda, como tampoco de cómo había prenunciado mi nombre. No entendía esa sensación extraña que tuve al tenerlo cerca, fue una sensación rara. Por un momento ese pequeño sentimiento de conocerlo también rondaba en mi cabeza, pero no sabía bien de dondePara mi suerte la semana volvió a transcurrir tranquila y bastante rápida, el tal Ethan no se me había vuelto a acercar el en instituto. Aun que siempre lo encontraba viéndome a lo lejos, fuera donde fuera siempre estaba él detrás de mí. Pero preferí no tomarle tanta importancia, después de todo no se me había acercado o molestado.Estaba en la última clase del día, a nada de quedarme dormida sobre el escritorio. Solo quería llegar a casa y dormir todo el fin de semana ese simple pensamiento me hacia feliz. Para mi suerte – y para el resto de la clase – la campana sonó dando
La espesa niebla no me dejaba ver hacia donde me dirigía, sin embargo sentía que algo me guiaba. Que estaba yendo en la dirección correcta, esa sensación extraña de que algo me llamaba y mi cuerpo la buscaba sin razonar, como si mi fuerza de voluntad se hubiera ido junto a la cordura, dándole paso a que mi cuerpo haga lo que quiera. Las piernas no me respondían y andaban por sí solas, también la curiosidad de saber que era esa cosa cada vez se hacía más grande.Aun que algo en mi cabeza me gritaba que me diera media vuelta y me volviera a la fiesta, dejando toda esa curiosidad detrás, no lo podía hacer algo me lo impedía. Así que si, seguí adentrándome en la oscuridad del bosque, tanta tranquilidad, y silencio era abrumadora, casi escalofriante pero eso aun así no me detuve. Llevaba alrededor de treinta minutos caminando entre la oscuridad. Solo pequeños destellos de la luz que brindaba la luna cuando se colaba entre los arboles me permitía ver donde estaba.– Joder Rebecca, solo a
Seguí buscando a Ethan con la tonta ilusión de que aun se encontraba en esa fiesta, escondido en algún rincón. Pero no, definitivamente ya se había ido. Me sentía cansada y confundida, por suerte los efectos del alcohol ya se había ido por completo. Solo quería irme de aquí, acostarme y darle vueltas a lo que Ethan había dicho hasta encontrarle alguna lógica, aunque eso se me hiciera imposible. Decía conocerme, pues yo estaba segura de que no era así, nunca antes lo había visto ni siquiera de lejos A causa de la música fuerte sentía como si mis pensamientos salieran de mi cabeza quedando suspendido en el aire, mis ideas no estaban claras. Decidí ya irme a mi casa, necesitaba encontrar a Lili y salir de ese lugar. Pero al igual que Ethan, Lili no se encontraba en la planta baja.Termine saliendo al jardín nuevamente a causa de la frustración, para mi suerte ahí se encontraba Lili junto a Josh. La cara de Lili era de poema, sus mejillas se encontraban completamente rojas al igual que s
Ese lunes por la mañana se sentía incluso más raro de lo normal. La casa estaba con mucho silencio algo que terminaba siendo raro, después de todo Lisa se encargaba de llenar cada silencioso espacio de la casa con música o incluso cantando ella misma.– ¿Lisa? – su cuarto estaba vacío y impecablemente ordenado. Nada comparado con el mío, baje trotando las escaleras esperando encontrar a mi hermana en el comedor, pero tampoco esa allí sin embargo el desayuno estaba servido en la mesa junto a una notaMe llamaron del hospital era urgente. Te dejo el desayunoLamento no poder llevarte, pero tranquila que el instituto no esta tan lejosTe quiero. Probablemente nos veamos para la hora de la cena, pediré pizza.– Ahora entiendo porque el silencio hermanita – el desayuno fue aburrido, estaba acostumbrada a que Lisa estuviera la mayor parte del tiempo fuera de la casa pero para el desayuno siempre estábamos juntas, solo deseaba que no se volviera un habito.Desayune a las apuradas. El que tuv
Aun con los nervios a flote corrí hacia la puerta del instituto sin mirar hacia atrás, corrí sin un punto fijo solo quería alejarme lo más posible de ese lugar. A causa de eso termine cruzando la calle sin ver que un auto venia a toda velocidad, el fuerte impacto del auto hizo que mi cuerpo saliera disparado, el asfalto lastimo con demasiada fuerza mi piel, incluso logro romper partes de mi vestido.Sentía como incluso el respirar dolía, todo mi cuerpo ardía, el sabor metálico de la sangre salía de mi boca, los ojos poco a poco me pesaban, la gente a mi alrededor gritaba, a pesar de no poder moverme, podía sentir el alboroto que estaba ocurriendo a mi alrededor. Sabía que de alguna manera estaba dando los últimos respiros de mi vida.El dolor era agonizante, así que sin esperar más solo cerré mis ojos dejándome ir. Solo lamentaba no haber podido despedirme de las personas que queríaEl fuerte ruido de una bocina hizo que abriera rápidamente mis ojos. ¿Qué carajos estaba pasando? ¿Porq
– Entonces… – Me sentía incomoda con la tensión que se había creado, necesitaba cambiar eso si quería que Ethan siga hablando – ¿Has hablado con Lili sobre mi? – Después de todo era una de las personas que me conocía bien, obvio aparte de Lisa. Pero aun así se me hacía difícil imaginar a Lili hablando con Ethan. Incluso podía llegar a crear que le daba un poco de miedo después de todas las cosas que se dicen de él en el Instituto. Pero era la única opción – Emm, si fue la pelirroja – El que dudara me confirma aun más que muchas de las cosas que decía Ethan guardaban un secreto, y que no podía creerle del todo. Aun tenía que ver con que intensión hacia todo esto. Pero lo sucedido en el instituto no dejaba de dar vueltas aun en mi cabeza, se me complicaba buscarle lógica a ambas cosas o intentar encajaras.El toque de Ethan en mi brazo me quito de mis pensamientos, una corriente hizo que nos alejáramos del toque del otro. Al mirando, su vista estaba en mi brazo y por un momento parecía
Era la última clase del día y podría irme a casa, lo cual agradecía. Mi semana en el instituto con respecto a lo que se trataba de Ethan fue rara, ese chico lograba confundirme. Hubo días en los que él se acercaba y hablábamos demasiado incluso de cosas insignificantes. Pero había otras veces en las que él solamente pasaba por mi lado y ni siquiera me miraba, sus ojos iban pegados al suelo y su paso era apresurado. Se sentía como si quisiera ignorarme de alguna manera. Sin embargo, en todo este tiempo ya había aprendido a entender un poco el comportamiento de Ethan, al menos un poco. Sin embargo eso no significaba que sus cambios de humor constantes no me dieran dolores de cabeza. Era difícil a veces seguirle el ritmo. Una de las cosas que me tenía un poco confundida era que durante el tiempo que llevábamos hablando y conociéndonos podría decir que conocía un poco más sobre él, sin embargo al preguntar algo sobre su familia o su pasado su comportamiento cambiaba, huyendo rápidament