La espesa niebla no me dejaba ver hacia donde me dirigía, sin embargo sentía que algo me guiaba. Que estaba yendo en la dirección correcta, esa sensación extraña de que algo me llamaba y mi cuerpo la buscaba sin razonar, como si mi fuerza de voluntad se hubiera ido junto a la cordura, dándole paso a que mi cuerpo haga lo que quiera. Las piernas no me respondían y andaban por sí solas, también la curiosidad de saber que era esa cosa cada vez se hacía más grande.
Aun que algo en mi cabeza me gritaba que me diera media vuelta y me volviera a la fiesta, dejando toda esa curiosidad detrás, no lo podía hacer algo me lo impedía. Así que si, seguí adentrándome en la oscuridad del bosque, tanta tranquilidad, y silencio era abrumadora, casi escalofriante pero eso aun así no me detuve. Llevaba alrededor de treinta minutos caminando entre la oscuridad. Solo pequeños destellos de la luz que brindaba la luna cuando se colaba entre los arboles me permitía ver donde estaba.
– Joder Rebecca, solo a ti se te ocurre hacer esto – definitivamente estaba perdida, eso me sucedía por tomar de más, venia cosas extrañas y en vez de alejarme me acercaba a ellos. Quería llorar de la frustración, quería golpearme la cabeza contra la pared por ser tan estúpida y no pensar bien las cosas. Ahora a causa de ellos me encontraba perdida en medio del bosque, a mitad de la noche.
Un pequeño ruido me hizo sobresaltar venia de entre los arboles pero por la falta de luz se me hacía imposible ver de qué se trataba. El silencio que brindaba el bosque era absoluto por lo cual el más mínimo ruido podría creaba un eco. De uno de los arboles mas grandes aparecieron dos ojos enormes amarillos. La impresión hizo que diera un paso rápidamente hacia atrás. Mis pies re enredaron con una raíz logrando que caiga hacía atrás haciendo así que golpeara mi cabeza contra el suelo.
Esos ojos amarillos – que termine recociendo que se trataba de un búho – fue lo último que pude ver antes de caer en la inconsciencia.
– M****a – sentía como todo me daba vuelta, como pequeñas puntadas y imágenes venia a mi cabeza, pero aun así no lograba saber donde estaba o como había llegado aquí, me termine de sentar colocando mi espalda en uno de los arboles más cercano. Un pequeño murmuro llamo mi atención haciendo que levante mi cabeza de golpe.
No podía creerlo. En uno de los arboles frente a mí se encontraba una persona que no pensaba ver en esta situación. Sus ojos no se despegaban de mi, con sus brazos cruzados y una pierna apoyada sobre el árbol que estaba a su espalda se encontraba nada más ni nada menos que Ethan Morgan, enfundado con una chaqueta de cuero negra y unos jeans gastados.
– ¿Ethan? – pregunte confundida y algo desorientada todavía, no entendía que hacia él aquí.
– Al fin se despierta la bella durmiente – dijo él con una pequeña sonrisa que no reflejaba para nada felicidad. Por el contrario parecía como si se burlara de la situación. No pretendía volver a acercarme o hablar con él después de lo sucedido en clases. Pero acá estamos hablando en el bosque, en medio de la nada, solos. Si, no parecía la mejor ocasión
– ¿Porque estás aquí? ¿Qué hago en el suelo?, y ¿qué hago yo a aquí? – Si lo sé son muchas preguntas pero estoy confundida.
– Okey, hablas mucho – Dijo algo abrumado rodando los ojos. Si, Lisa también dice lo mismo todo el tiempo – Podría contestarte solo a dos de esas preguntas así que ahí te va. Estoy aquí porque quería hablar contigo, pero te vi salir de la fiesta y como vi que te dirigías hasta aquí pues te seguí para que no te pasara nada. Ahora, contestando a tu otra pregunta – Su espalda se despego del árbol dirigiendo sus paso hacía mi, colocándose frente en cuclillas, su cabeza giro como si buscara algo alrededor de nosotros, sus hombros se levantaron un poco algo resignados para terminar negando en mi dirección – Parece que estamos en el bosque pero linda, no tengo idea que estás haciendo aquí yo solo te seguí.
Bueno acabamos de descubrir que Ethan tiene un lado sarcástico y bastante cortante, aparte de una voz gruesa que llama bastante la atención. - Lo que aun no logro entender es que haces en el suelo – pregunto confundido y algo divertido. Los recuerdos de los ojos del Búho asustándome saltaron en mi cabeza. Ahora recordaba que hacía en el piso, pero era obvio que no se lo diría. No quería más humillaciones por hoy.
– Pues lo estaba probando para ver si es cómodo para los animalitos del bosque – Y si Ethan podía ser sarcástico pero aun no me conocía. Yo podría ser incluso peor. Para evitar seguir haciendo el ridículo me levante del suelo, apoyándome aún así sobre un árbol pues a causa del golpe seguía un poco mareada – ¿Para qué me buscabas?
– A sí – Se levanto de un salto dando unos pasos hacia atrás, recuperando la distancia entre nosotros, sus manos fueron a sus bolsillos delanteros del Jeans permitiendo ver algunos de los tatuajes que tenía en una de sus manos, aun así no podía descifrar de que se trataba, parecía un águila pero no estaba segura – Quería saber cómo estabas – lo mire confundida, el golpe me había afectada – Digo con respecto a tu pelea con Victoria – joder lo que me faltaba.
– ¿Viste esa pelea? – Si antes estaba avergonzada, ahora podría morir de la vergüenza. Pero algo me tenía confundida, estaba preocupado por cómo estaba yo. Eso era nuevo y algo confuso, no puedo decir que lo conozco para saber que le preocupa o que no. Pero las veces que hemos cruzado miradas solo puedo ver en ella la indiferencia e incluso el aburrimiento y hasta pocas veces el asco que le provocaba todo. Se me hacía imposible creer que se preocupara por alguien, y aun más inexplicable porque se preocupara por mí.
– Si, la vi. Victoria puede ser muy irritante en ocasiones e incluso algo explosiva, pero no es una mala chica, no lo tomes personal – dijo con una pequeña mueca. Podía apostar que ni él creía en lo último que dijo.
– Parece que la conoces bastante bien – dije algo desconfiada, después de todo que el apareciera de la nada aquí podría ser una trampa creada por Victoria. El simple pensamiento me puso en alerta.
– Pues sí, nos conocemos bastante. Nos conocimos durante un viaje hace algunos años. Empezamos a quedar, vivíamos en la misma ciudad por un tiempo hasta que ella se mudo y con el tiempo decidí probar algo diferente así que aquí me ves – Tampoco le pedí que me contara toda la historia con un simple si hubiera bastando. Una sensación negativa me invadió, sin embargo no dije nada, solo asentía con una pequeña sonrisa.
– ¿Entonces son algo así como pareja? – me fue imposible no preguntar, quería sacarme la duda.
– Es algo confuso, es algo que para mi término hace un tiempo pero que Victoria no entiende, aun le sigue diciendo a todo el mundo que somos pareja y realmente no me molesta – Ahí estaba mi respuesta, que siendo sincera no sabía cómo interpretar, no estaban juntos pero ella decía que si y el no lo desmentía, raro.
– Ha, en ese caso bien por ustedes – Si, lo sé quizás soné un poco falsa. Después de todo no me importaba realmente
– Pero bueno. Ven, sé dónde está el camino de salida – Y sin ver si lo seguía o no comenzó a caminar. No sabía si seguirlo o empezar a buscar la salida por mi cuenta, el frio se hacía menos soportable, el canto de los búhos y la extraña sensación de estar siendo observada me dio la valentía de levantarme de un salto y seguirlo. Rápidamente llegue a su lado, él no dijo nada solo me miro de reojo y sonrió un poco.
Durante todo el recorrido ninguno decía nada. Simplemente se escuchaban el canto de los grillos y de vez en cuando el ruido de una rama partirse. Estar tan cerca de Ethan me ponía nerviosa pero no podría descifrar de qué forma, no entendía si de una forma positiva o negativa. Fuera la forma que fuera no estaba bien, no me podía dejar envolver en su falsa preocupación o en lo bien que le quedaba esa chaqueta de cuero, ni tampoco en lo misteriosamente sexy que era – BASTA – mi estúpida consciencia me llevo a un lugar más intimo haciéndome delirar con él. De repente las ganas de acercarme crecieron. Quería pegarme a su brazo y no dejarlo nunca. Al volverá al verlo su sonrisa se había ensanchando y su mirada había cambiado, había algo aun más oscuro en él, algo mas intimidante, me miraba diferente. Como si supiera lo que pasaba por mi cabeza. Esquive su mirada colocándola en el suelo, y así me quede.
Alrededor de 20 minutos pudimos salir del bosque. Parecía que nadie se había percatado de nosotros, la fiesta seguía igual, como si no hubiera pasado nada de tiempo desde que nos fuimos de aquí. La música seguía incluso más alto y las personas no dejaban de entrar y salir, algunos por el efecto del alcohol terminaban en el suelo.
– ¿Ethan puedo hacerte una pregunta? – Lo iba a dejar ir sin preguntarle nada más, o al menos eso planeaba, pero sabía que quizás no volviera a hablar con él o al menos eso esperaba y antes de que se vaya necesitaba sacarme esa duda de la cabeza. Él detuvo su andaba quedándose unos pasos por delante de mí, se voltio para quedar de frente su mirada me inspecciono por unos minutos, función el ceño y con algo de desconfianza asintió lentamente. Aunque algo me decía que no realmente no quería hacerlo – ¿Como sabías mi nombre? – pregunte antes de arrepentirme.
No se sorprendió por la pregunta, ni se altero de alguna manera. Quizás el sabia que en algún momento se lo preguntaría, sus ojos no se despegaban de mi, aun sin decir nada dio unos pasos en mi dirección quedando peligrosamente cerca. Nuestra distancia se reducía a casi nada era tan minina que podía sentir su respiración en mi cara. Después de unos minutos mirándonos con una pequeña sonrisa se acerca a mi oído.
– Se muchas cosas de ti Becca mas de la que te imaginas. Te conozco mejor que nadie muñeca – inconscientemente ese susurro produjo muchas cosas en mi, enojo, miedo, pequeños calambres en el estomago que nunca antes había sentido y hasta incluso algo mínimo de fascinación.
Al ver que no obtenía una respuesta de mi parte, lentamente dejo un pequeño beso en mi meguilla y comenzó a caminar hacia la casa. No lo sabía pero podía apostar que tenía su típica sonrisa que prometía problemas. Tras sentir una corriente de aire me recompuse, no lo podía dejar con la última palabra
– Mantén a tu novia lejos de mí – le pedí antes de que entrara en la casa, una pequeña carcajada salió de él sorprendiéndome al instante
– No te preocupes por ella, yo te protegeré si es necesario. Nos vemos al rato pequeña Becca – y tras un giño de su parte termino por entrar en la casa, dejándome helada y con escalofríos que comenzaban en mis pies y terminaban en mi cabeza.
No lograba entender aun nada de lo sucedido, cuando pude salir de mi asombro entre apresurada a la casa con la intensión de buscarlo para que me aclare todo eso. Lo busque en toda la planta baja, hasta en cada habitación de la segunda planta, había visto demasiadas cosas en esas habitaciones, estaba segura que no se me iban a borrar ni de la cabeza ni de la retina en mucho tiempo, pero no había ni una pista sobre Ethan, se había ido dejándome aun mas confundida de lo que ya estaba
Seguí buscando a Ethan con la tonta ilusión de que aun se encontraba en esa fiesta, escondido en algún rincón. Pero no, definitivamente ya se había ido. Me sentía cansada y confundida, por suerte los efectos del alcohol ya se había ido por completo. Solo quería irme de aquí, acostarme y darle vueltas a lo que Ethan había dicho hasta encontrarle alguna lógica, aunque eso se me hiciera imposible. Decía conocerme, pues yo estaba segura de que no era así, nunca antes lo había visto ni siquiera de lejos A causa de la música fuerte sentía como si mis pensamientos salieran de mi cabeza quedando suspendido en el aire, mis ideas no estaban claras. Decidí ya irme a mi casa, necesitaba encontrar a Lili y salir de ese lugar. Pero al igual que Ethan, Lili no se encontraba en la planta baja.Termine saliendo al jardín nuevamente a causa de la frustración, para mi suerte ahí se encontraba Lili junto a Josh. La cara de Lili era de poema, sus mejillas se encontraban completamente rojas al igual que s
Ese lunes por la mañana se sentía incluso más raro de lo normal. La casa estaba con mucho silencio algo que terminaba siendo raro, después de todo Lisa se encargaba de llenar cada silencioso espacio de la casa con música o incluso cantando ella misma.– ¿Lisa? – su cuarto estaba vacío y impecablemente ordenado. Nada comparado con el mío, baje trotando las escaleras esperando encontrar a mi hermana en el comedor, pero tampoco esa allí sin embargo el desayuno estaba servido en la mesa junto a una notaMe llamaron del hospital era urgente. Te dejo el desayunoLamento no poder llevarte, pero tranquila que el instituto no esta tan lejosTe quiero. Probablemente nos veamos para la hora de la cena, pediré pizza.– Ahora entiendo porque el silencio hermanita – el desayuno fue aburrido, estaba acostumbrada a que Lisa estuviera la mayor parte del tiempo fuera de la casa pero para el desayuno siempre estábamos juntas, solo deseaba que no se volviera un habito.Desayune a las apuradas. El que tuv
Aun con los nervios a flote corrí hacia la puerta del instituto sin mirar hacia atrás, corrí sin un punto fijo solo quería alejarme lo más posible de ese lugar. A causa de eso termine cruzando la calle sin ver que un auto venia a toda velocidad, el fuerte impacto del auto hizo que mi cuerpo saliera disparado, el asfalto lastimo con demasiada fuerza mi piel, incluso logro romper partes de mi vestido.Sentía como incluso el respirar dolía, todo mi cuerpo ardía, el sabor metálico de la sangre salía de mi boca, los ojos poco a poco me pesaban, la gente a mi alrededor gritaba, a pesar de no poder moverme, podía sentir el alboroto que estaba ocurriendo a mi alrededor. Sabía que de alguna manera estaba dando los últimos respiros de mi vida.El dolor era agonizante, así que sin esperar más solo cerré mis ojos dejándome ir. Solo lamentaba no haber podido despedirme de las personas que queríaEl fuerte ruido de una bocina hizo que abriera rápidamente mis ojos. ¿Qué carajos estaba pasando? ¿Porq
– Entonces… – Me sentía incomoda con la tensión que se había creado, necesitaba cambiar eso si quería que Ethan siga hablando – ¿Has hablado con Lili sobre mi? – Después de todo era una de las personas que me conocía bien, obvio aparte de Lisa. Pero aun así se me hacía difícil imaginar a Lili hablando con Ethan. Incluso podía llegar a crear que le daba un poco de miedo después de todas las cosas que se dicen de él en el Instituto. Pero era la única opción – Emm, si fue la pelirroja – El que dudara me confirma aun más que muchas de las cosas que decía Ethan guardaban un secreto, y que no podía creerle del todo. Aun tenía que ver con que intensión hacia todo esto. Pero lo sucedido en el instituto no dejaba de dar vueltas aun en mi cabeza, se me complicaba buscarle lógica a ambas cosas o intentar encajaras.El toque de Ethan en mi brazo me quito de mis pensamientos, una corriente hizo que nos alejáramos del toque del otro. Al mirando, su vista estaba en mi brazo y por un momento parecía
Era la última clase del día y podría irme a casa, lo cual agradecía. Mi semana en el instituto con respecto a lo que se trataba de Ethan fue rara, ese chico lograba confundirme. Hubo días en los que él se acercaba y hablábamos demasiado incluso de cosas insignificantes. Pero había otras veces en las que él solamente pasaba por mi lado y ni siquiera me miraba, sus ojos iban pegados al suelo y su paso era apresurado. Se sentía como si quisiera ignorarme de alguna manera. Sin embargo, en todo este tiempo ya había aprendido a entender un poco el comportamiento de Ethan, al menos un poco. Sin embargo eso no significaba que sus cambios de humor constantes no me dieran dolores de cabeza. Era difícil a veces seguirle el ritmo. Una de las cosas que me tenía un poco confundida era que durante el tiempo que llevábamos hablando y conociéndonos podría decir que conocía un poco más sobre él, sin embargo al preguntar algo sobre su familia o su pasado su comportamiento cambiaba, huyendo rápidament
¿Vieron cuando dije que qué podría salir mal teniendo a Ethan como compañero? Bueno, definitivamente Ethan era el peor compañero de trabajo del mundo.– No, no. Suelta eso – Ya me estaba cansando de repetirle siempre lo mismo, cada que le decía que suelte algo terminaba agarrando otra cosa y yo estaba detrás de él para quitársela de las manos, era como cuidar aun nene chiquito. Ya me estaba molestando, sin embargo a él parecía darle gracia mi molestia. Seguía revisando cada cosa en mi habitación, como si hasta el más mínimo detalle podría ser importante o interesante – ¿Podrías dejar de revisar mis cosas y concentrarte en lo que estamos haciendo? – si, nos encontrábamos haciendo el trabajo de Biología, bueno yo me encontraba haciéndolo, ya que su atención estaba más en mis cajones que en el trabajo. Bufando despacio se termino sentando en la punta de mi cama.– Tienes una linda habitación – dijo aun mirando todas mis cosas, al menos esta vez no estaba tocándolas– Si, me sorprende que
La noche había caído. A través de la ventana de la pequeña cabaña se podía apreciar la enorme luna llena, desde este punto de la cabaña el bosque se veía asombroso, la laguna, la luz de la luna y la pequeña cascada hacia que el paisaje fue maravilloso.Eran alrededor de las nueve de la noche, y en todo este tiempo Ethan estuvo intentado distraerme de lo sucedido esa tarde y para ser sincera algo había servido, gracias a su atención me encontraba más tranquila, aun así eso no significaba que había olvidado lo sucedido. Por suerte Lisa no había llegado a casa, ni lo haría en lo que queda la noche. Me tranquilizo el saber que no estaba en peligro.– Ethan agradezco lo que hiciste por mí, aunque aun no lo entiendo. Pero ya es hora de volver a casa – si quizás tenía un poco de miedo de volver y encontrarme nuevamente a ese hombre, pero tenía que volver. No podía simplemente quedarme a vivir para siempre con Ethan.– Está bien, vamos ya no hay problemas con ir – él se notaba bastante segur
No sabía que pensar con respecto al sueño, o porque sentía que no era del todo un sueño. Tenía una mezcla de sentimientos enormes. Ni tenía idea cuánto de todo eso era real, ni porque el mensaje de Ethan no me parecía casualidad. Sentía que todo estaba conectado y todo eso tenía un común denominador y ese era nada más ni nada menos que Ethan Morgan. Tendría que hablar con él con urgencia y esta vez intentar obtener todas las respuestas que necesitaba. Aun sin saber si lo que me diría me gustaran o no.Aun así sabía que nada eran delirios míos y que Ethan tenía mucho que ver.Para mi desgracia desafortunadamente Ethan no había ido al instituto en toda la semana siguiente. Ni siquiera contestaba mis mensajes. Había pensado ir hacia la cabaña pero no sabía con que me iba a encontrar, ni recordaba del todo el cómo llegar. Quizás también inconscientemente retrasaba la charla que yo sentía que nos debíamos.Esa misma semana teníamos que entregar el trabajo y tampoco se presento, así que tuv