—fíjate por donde caminas inútil— la señala Sara, Anastasia cierra sus ojos con fuerza, y luego se colocó de pié —¿Por qué llora la disque señora Parrow?— Sara se ríe en todo el rostro de Anastasia, pero la chica tensiona su mandíbula y luego sigue corriendo —¡Eres espantosa!— se burla SaraMientras, Sebastián al oír cerrarse la puerta, no sigue teniendo relaciones sexuales con María.—¿Mi amor qué pasa?Él no le responde, si no que se hace a un lado, luego se sienta en todo el orillo de la cama.—¿Sebas?— lo nombra melodiosamente María —dejame solo— pidió él—¿Qué? ¡No puedes dejarme así! Si la estamos pasando rico, por favor, te necesito— la chica se acerca a Parrow y coloca sus manos en su ancha espaldaPero Sebastián se pone de pié.—¡Me explicas ya tu actitud!— gritó María colocándose de pié —¿Es por ella verdad? ¿Acaso te gusta esa muerta de hambre?—¡Basta María! Deja de gritar— hace gestos Parrow con sus manos —¿Qué quieres que piense al respecto? Todo estaba perfecto, esa
Leandro abrió los ojos par en par, eso sí que fue una confesión bastante fuerte.—¿Pretendes qué te crea?— con el ceño fruncido, se acerca Sebastián a Anastasia—olvide lo que le dije señor— susurra ella, bajando su mirada —los dejo solos— Leandro se marchaAnastasia se puso aún más nerviosa, ella retrocede al ver el acercamiento de Parrow.—de verdad olvide lo que le dije señor— vuelve a decir ella, no le gusta cuando él se enoja tanto, porque es más cruel aún, tan solo un golpe con la punta de su bordón, hace sobresaltar a Anastasia, ella se agita—¿Acaso quieres qué yo me coma ese cuento?—señor ¿Por qué no puede olvidar lo hablado? Aun así, usted no se fijaría en una mujer como yo, se que prometí servirle, y aún sigo firme con mi promesa, pero... No puedo permitir que me sigan maltratando—¿A qué te refieres?— Sebastián está impaciente—quizas usted no me crea, pero la empleada Sara me maltrata, y me insulta, ella derramo el café aquella vez, y su... La mujer que usted ama, ella
—¡No te tengo miedo insolente!— Vocifero María, la cual está atenta a cada movimiento de Anastasia—y eso me alegra, porque así será más divertido— sonríe Anastasia—somos dos contra una, así que eres una insignificante, lo que vayas hacer ¡hazlo ya!— la reta MaríaAnastasia se acerca dispuesta a cortarle el cabello a María, porque ni tan siquiera su cabello rubio es natural, es tan falso como ella.—¡Sara, detenerla!— ordena María, y Sara se coloca como un escudo protector—ustedes dos dan es lástima— su burla Anastasia —Sara está enamorada del señor Parrow, y María quiere tener el lugar que yo tengo, pero eso no va a suceder, porque yo soy la esposa, y eso ustedes no lo pueden cambiar—¡Sabes lo que haré y te atreves a desafiarme!— la amenaza María, está demasiado molesta al saber que Sara también gusta de Sebastián Anastasia se acerca a pasos firmes hacia Sara, la cual saco pecho para estar preparada.—¡Un paso más y no quedará nada se ti!— sentencia SaraAnastasia alza su mano pa
—¿Eres mía Anastasia?— la pregunta de Sebastián la dejó perpleja—yo... Yo a usted lo amo— confiesa ella causando inquietud en el corazón frío de Sebastián Parrow—¿Amarme?— Sebastián sonríe perfectamente y eso la puso a ella más nerviosa, y más al sentir como aquellos largos dedos se acercaron a lo que ella tanto ha guardado como un tesoro —dices que me amas, entonces, entrégate en cuerpo y alma está nocheAnastasia pasa saliva y mira detenidamente a Sebastián, tenerlo así de cerca y con ese toque tan fenomenal y sutil de Parrow, la hace estremecer.—pare por favor— súplica Ana, su rostro está sonrojado, además, ella se siente incómoda, piensa en que los están observando—solo actúa normal— sugiere él con una gran sonrisa que la desarma por completo, no comprende ¿Cómo puede amarlo? Anastasia busca los labios de Parrow y obtiene un beso delicado y pasionalPero Sebastián siente que su pantalón le estorba, deja de besarla porque si no, seguirá perdiendo el control, aunque este jueguit
Anastasia retrocede por el miedo, pero al ver a Sebastián bajar del auto, su corazón empieza a latir con rapidez.—¡Sube al auto!— ordena Sebastián, sabe que ella está ahí de pie, porque Leandro le informo—No— esa fue la respuesta de Anastasia, y suficiente para provocarle cólera a SebastiánÉl empieza a caminar, mientras se guía de su bordón, al sentir el perfume a rosas, sabe que está a tan solo un paso de Anastasia.—¿¡Por qué te fuiste!?— preguntó con furor Sebastián—estabas en muy buena compañía, no quería ser un obstáculoSebastian dio dos golpes al suelo con su bordón, por su disgustó, Anastasia siente algo de nervios.—¡Tu maldito deber era estar a mi lado! ¡Te espere como un imbécil! y luego me informan ¡que te marchaste en el auto de un desconocido!—¿Esperabas por mi? Si cuando regrese del baño, estabas a gusto con María, ¡No es justo!—¡Sube al auto!— ordena Sebastián con voz de mando —bajen la voz— interviene Leandro—¡No te metas Leandro!— gruño Sebastián—no, no quie
—¡Madre!— el clamor de Anastasia, no es suficiente, la enferma la retira la de la habitación y ella llora de manera desconsolada —¡Dios no te lleves a mi madre, la necesito conmigo por favor!— se desliza Anastasia por la fría pared del pasillo, quedando acurrucada, se aferra a sus pies hundiendo su cabeza en su rodillas y llora, llora con todas las fuerzas de su corazón mientras mentalmente le súplica a Dios por la vida de su madre Tan solo pasaron 3 minutos, para que la enferma que la sacó de la habitación, saliera tocando el hombro de Ana.Anastasia alzó su mentón, y al mirar a la doctora a los ojos, entendió perfectamente, ni siquiera necesito decirle con palabras de que su madre había fallecido.—lo siento mucho señora— se lamenta la enfermera. Sabe que la pérdida de un ser querido duele, y más de la mujer que te dio la vidaAnastasia siente un leve mareo, quizás por el impacto de todas sus emociones dolientes, ella se pone de pie y corre hacia su amada madre.—¡Por favor mamá, so
Siendo las 2 Am, Anastasia se encuentra sentada sobre una banca que adorna el solitario parque. Mirando al cielo, con su corazón hecho añicos le hace muchas pero, muchas preguntas a Dios, el único que ser que está con ella en estos momento, ¿El por qué su madre murió? Dejándola sola en este mundo cruel.El frío eriza su cuerpo, aún está con aquel vestido de gala, no la protege del todo, pero es tanto el dolor que está habitando en su corazón, que hace caso omiso a lo que está a su alrededor.Mirando al cielo, una gota de agua cae en todo el centro de su frente, y luego por el resplandor de las luces, contempla las gotas una tras otra, cayendo sobre su cuerpo y mezclado con sus lágrimas de dolor.Luego el viento acechando sobre ella, baja su mirada, está destruida... y vacía.Ella no tiene casa propia, debido que donde habitaba su madre es arrendado, aunque la fecha sigue vigente, ella toma la desición de ir allá, pasar la noche, y recoger lo poco que tiene, para poder tomar una decis
Sebastián suspira, se le dificulta un poco, el decirle a Anastasia, lo que él desea.—¿Dime por favor?— ella fija su mirada en él, necesita con urgencia saber lo que esté le dirá Parrow apoya sus codos sobre la mesa y luego une sus manos, con una firme postura.—se perfectamente que en tus planes está dejarme, pero te pido que no lo hagas... Anastasia—eso... Es lo mejor, usted es consciente de que es así, por favor, no me pida algo de lo que yo estoy decidida—aun no, entiendo que hay una gran rivalidad entre María y tú...—es por parte de ella, porque yo sé mi posición, pero presiento que ella teme que le arrebate su amor y atención hacia ella, lo cual es absurdo, usted no se fijaría en mi—¿Y por qué no?— la pregunta de Parrow, la puso muy nerviosa El café está listo.—vamos a tomar café, siento que las cosas se están... Poniendo tensas— cambia ella el tema y Sebastián tensiona su mandíbula, él presta atención y luego escucha como Ana coloca las tazas de café sobre la mesa, y cua