“El compromiso es lo que convierte una promesa en realidad”
Abraham Lincoln PV Ellyn El sol recién comenzaba a asomarse, sus rayos eran tenues, pero yo estaba muy emocionada y apenas había podido dormir la noche anterior después de todo. Hoy era “el día” que hace años estaba esperando o mas bien sería la noche que estuve ansiando. Mi buen humor me persiguió en la ducha mientras tarareaba canciones pop de moda y también mientras me vestía para asistir al entrenamiento matutino. Peiné mi cabello lacio de color castaño claro en una cola alta para que no me molestara en el rostro, y me puse mi sostén deportivo y unos leggins cortos, lo usual para estar cómoda durante tres horas de instrucción. - Alguien está de muy humor el día de hoy – sonrió mi madre, Riona, mientras me servía unas tortitas con sirope y un café con leche. Le respondí con otra sonrisa cómplice, después de todo, ella lo sabía todo. - ¡Ya sabemos el porque de su buen humor! – bufó mi hermano menor, Fionn mientras robaba mi taza de café. - ¡Oye! Eso es mío- respondí enojada mientras lo miraba con enfado - Basta ya niños- respondió mi padre, Cahir, pero él también tenía una sonrisa en su rostro y realmente no nos estaba riñendo. El desayuno era un momento especial para nosotros, nos reíamos, hablábamos de las cosas que haríamos en el día y luego nos íbamos cada uno a hacer nuestras actividades. Pero hoy, además del amor que nos teníamos, existía cierta expectativa y cierta ansiedad palpable. - Ellyn, Fionn, se les hará tarde si no se apuran- mencionó mi madre mirando el reloj y me apresure a terminar mi desayuno y lavar mis dientes. Cogí las llaves de mi auto y saqué a rastras a mi hermano de mi casa sin importarme si terminó o no su comida. Si fuera por él, no dedicaría ni una hora a entrenarse al día, pero como yo era la mayor, aunque fuera solo por unos meses y aunque por mi altura de metro sesenta y cinco no lo pareciese, era mi responsabilidad que él asistiera. Saludamos a nuestros padres con abrazos y besos, y nos alejamos rápido por el sendero que nos conducía hacia el campo de entrenamiento, a unos diez minutos en automóvil desde nuestro hogar. Mi mente divagaba, no podía concentrarme en nada el día de hoy y gracias a eso recibí varios golpes en el estomago y en las costillas en la segunda hora de entrenamiento. - ¡Ellyn! -grito el delta Boris llamándome la atención cuando por tercera vez caí al suelo- ¿qué estas haciendo? Tienes que tomarte el entrenamiento en serio – rugió enfadado por mi falta de concentración- eres un Beta, o lo serás en el futuro, ¿quieres decirme donde esta tu mente hoy? - Lo siento Delta Boris, no volverá a suceder – murmure con vergüenza. Odiaba que me regañaran estúpidamente. Desde muy temprana fui educada y entrenada en todos los aspectos de una manada, desde lucha hasta etiqueta y que me amonestaran frente a los demás adolescentes era una mancha en mi impoluto expediente de vida. - Tienes que concentrarte y luchar como si tu vida realmente dependiese de ello, hay niños aquí que siguen tu ejemplo, no nos decepciones- agregó el Delta ahora un poco menos enfadado, pero eso no hacía que mi vergüenza menguara. Así había sido siempre, se me exigía al máximo, todo debía hacerlo bien o mas bien, de forma excelente. Mis padres eran amorosos, pero también exigentes, ellos eran ambos Betas y teníamos un linaje que nos instaba a ser mejores, generación tras generación, para acompañar, cuidar y asesorar a los Alfas. Pero a pesar que yo destacaba en la escuela, era una de las mejores guerreras de la manada y sabía de memoria el protocolo, no me sentía como un futuro beta, y no me sentía así hace muchos años y no era un secreto que ocultase. Como Betas teníamos contacto cercano con el Alfa y su Luna y en consecuencia con su descendencia. Xavi, era su primogénito y solo dos años mayor que yo. Crecimos prácticamente juntos, primero floreció la amistad. El me protegía y cuidaba durante nuestra infancia de aquellos que quisieran molestarme por mi tamaño. Su lado Alfa lo instaba a ser un protector a toda costa y yo era su protegida. Pero cuando llegamos a la adolescencia, la amistad se transformó en una atracción innegable y nos llevó a prometernos la eternidad juntos, y hoy después de dos años de no verlo, volvería a casa después de su arduo entrenamiento Alfa para tomar posición como tal. Para sorpresa de toda la manada, él fue aceptado en la academia del Rey mucho antes de su transformación, por lo que era considerado un gran honor, pero para nuestra mala suerte, eso significó no estar allí cuando su lobo llego a él y consecuentemente no sabíamos si éramos realmente una pareja destinada. Pero eso no importaba, ambos hicimos una promesa, nos amábamos más allá del vínculo invisible que la Diosa de la Luna podría otorgarnos; nos amábamos con el corazón y era tan real y verídico que nadie dudaba que también la Diosa nos uniría. Oraba por eso, noche a noche mientras seguía estudiando, entrenando y haciendo todo lo posible para que, cuando me tocase ser Luna, fuera igual de buena que la madre de Xavi, Luna Sophia. Tanto el Alfa Jared, como su pareja destinada, Luna Sophia, manejaban nuestra manada con justicia y amor. Sabia que en otras manadas el manejo no era el mismo, pero aquí se trataba con respeto a cada integrante, desde el eslabón más pequeño hasta el principal, todos teníamos una función que era considerada relevante en el funcionamiento de nuestro mundo, y por ello éramos considerados una de las grandes manadas y bendecidas por la gracia del Rey; y yo no aspiraba a ser menos. Quería que nuestra manada siguiera prosperando y creciendo bajo los mismos preceptos. Mi mente divago otra vez hacia mi novio, Xavi. Lo había extrañado muchísimo más allá que nos escribíamos y hablábamos por video-llamada todos los días, pero no era lo mismo. Vi su cambio corporal a lo largo de estos 730 días de ausencia. Si bien siempre fue un chico grande, ahora se había transformado en un hombre enorme, con músculos fuertes en cada resquicio de su corporeidad, se había cambiado el corte de cabello y hace mucho tiempo atrás su melena rubia ceniza se había reducido, luciendo algo muy moderno rebajado hacia los costados y ligeramente mas largo en la parte superior. Pero lo que no cambiaba era su forma dulce de tratarme como si fuera una princesa y su sentido del honor y la justicia. Mi ansiedad creció a niveles inimaginables cuando vi una caja en medio de mi cama al llegar del entrenamiento. Una pequeña esquela enunciaba con su fuerte caligrafía solo tres palabras “Para mi amor” y mi corazón parecía querer salir de mi pecho. Xavi, ya estaba en la manada. Mi primer instinto fue dejar todo e ir corriendo a la casa de la manada para arrojarme a sus brazos, pero me contuve. Habíamos acordado vernos en la fiesta de asunción que se realizaría esta noche, la misma noche en que me declararía su Luna ante toda la manada, la misma noche que nos comprometeríamos. Mis manos sudaban por lo que cogí una toalla y me sequé las palmas. Cuando abrí la caja el mas exquisito y bello vestido color gris se hallaba en su interior, el escote en forma de corazón poseía un encaje de cuentas brillantes, cuyo corpiño transparente estaba adornado para que no se vislumbrara nada de lo que di debiese y tenia apliques de encaje con cuentas a juego que fluía desde el corte hasta las caderas, y luego una falda larga que se abría en una abertura lateral. La tela era brillante, de seda, y se ajustaría a mi cuerpo de manera maravillosa. “Gracias por tan hermoso regalo” – le envié un rápido mensaje, lo amaba. “Nada puede ser mas hermoso que tu”- respondió Xavi rápidamente haciéndome sonrojar por sus maravillosas palabras. No podía esperar a que nos volviésemos a encontrar. Quería volver a sentir sus abrazos y también besarlo por primera vez. La emoción de estar a su lado y empezar a escribir nuestra historia juntos era tal que no podía concebir algo mejor"Siempre existe en el mundo una persona que espera a otra, ya sea en medio del desierto o en medio de una gran ciudad. Y cuando estas personas se cruzan y sus ojos se encuentran, todo el pasado y todo el futuro pierden completamente su importancia y solo existe aquel momento”. Paulo CoelhoPV EllynObligué a mi cuerpo a hacer todas las tareas que tenia por delante. Como era sábado no teníamos escuela, pero eso no implicaba que no tuviese deberes que hacer, por lo que después de dejar mi vestimenta y zapatos preparados, hice mis deberes, ayude a mi madre a limpiar mi casa, almorcé y finalmente me tumbe en la cama con la esperanza de poder dormir y que así se me pasara el tiempo más rápido.Para mi mala fortuna el sueño no vino en mi auxilio y me quede rodando en mi cama con miles de pensamientos que se arremolinan en mi mente. Pensaba en qué tipo de relación tendríamos, si bien crecimos juntos, cuando el estaba rozando los dieciocho se fue y yo solo era una cría de quince años, teníam
“Luchar contra nuestro destino sería un combate como el del manojo de espigas que quisiera resistirse a la hoz”Lord ByronPV EllynCuando me apeé del automóvil pude sentir que cada célula de mi cuerpo se llenaba de ansiedad y de nerviosismo. Muchas personas ya se encontraban en el lugar y otras tantas estaban como nosotros, recién arribando al lugar. La Luna Sophia y el Alfa Jared estaban saludando a los miembros de la manada agradeciéndoles por asistir a tal evento. Ellos estaban dando un paso al costado después de años de mandato, pero seguirían ayudando a su primogénito a llevar adelante a la manada hasta que finalmente él estuviera apuntalado y seguro, con una Luna a su lado para la prosperidad de todos. Mi corazón martillaba dentro de mi pecho cuando mi familia y yo presentamos nuestros respetos a nuestros lideres. -Amigos nuestros, gracias por venir- Saludó el Alfa mientras estrechaba su mano a mi padre, su beta y su amigo desde que tenían uso de razón. -Luna Sophia, esta
“Y al partir serán estas mis últimas palabras: Me voy, dejo mi amor detrás”Rabindranath TagorePV EllynSi, él no era mí pareja destinada pero no por eso dejaba de doler. Habíamos prometido que estaríamos juntos, no esperábamos que uno de nosotros encontrara su supuesta alma gemela. Más bien confiábamos que cuando llegase este momento, la Diosa nos habría bendecido. ¡qué equivocados que estábamos! Pero, aun así, ¿Hubiese cambiado algo el hecho de saberlo? Tal vez sí. Tal vez no me hubiera esforzado tanto, tal vez habría salido a fiestas, me hubiese divertido como cualquier otro adolescente, tal vez no habría dado mí corazón ni mí alma en una causa pérdida. Pero los “tal vez” y los “y si” eran irrelevantes. Era todo en vano porque lo pasado no era modificable. - ¿Qué sucede? -Fionn se sentó a mí lado y me miró con el ceño fruncido, sus ojos parecían querer escudriñar mí alma y sabía que él podía leerme con facilidad si le mentía. Más allá de mi dolor y mí autocompasión pude hablar se
«Los nuevos comienzos a menudo se disfrazan de finales dolorosos». -Lao-Tse-Pv EllynNo se cuánto tiempo maneje, creo que durante mucho tiempo hasta que obligatoriamente tuve que detenerme para cargar gasolina y seguí mi viaje. No me importaba el cansancio por las horas arriba de la moto, ni el dolor que parecía vivir en mi interior. Cuando creí que la distancia era suficiente hice lo único que me faltó por hacer antes. Me desvié, una vez mas de mi camino original y seguí por un camino mejorado de tierra serpenteante hacia una montaña de no tanta altura. Si fuera en otro momento capaz me hubiese deleitado con la vista, el bosque oscuro pero lleno de vida, y más allá un mar cuyas olas chocaban contra la playa dorada. “Yo, Ellyn Marion Starweaver, corto todo lazo que me unía a la manada “Medianoche eterna” y por ello me declaro como un lobo solitario” – emití y ese sentido de pertenencia que tenemos cada lobo que vive en una manada y habita en nuestro interior, se cortó. Si antes me
"Felices son aquellos que se atreven con coraje a defender lo que aman"OvidioPv XaviPor fin había vuelto de mi entrenamiento como Alfa dado por la academia del Rey después de dos años de lejanía. En parte, y en su momento me sentí muy orgulloso por tener tal honor, porque no cualquier Alfa era aceptado para ser capacitado allí; pero también significó dos años de ausencia y lejanía en la vida de mi novia, Ellyn. Si bien la tecnología era nuestra aliada, podíamos hablarnos y vernos por video-llamadas, no era lo mismo. Mi transformación se dio una vez que cumplí los 18 años, pero estaba lejos de ella y mi lobo obviamente no pudo saber si éramos parejas destinadas, pero él y yo, la extrañábamos y amábamos. Sabía que se estaba esforzando al máximo en todas sus actividades, tanto escolares como aquellas que implicaban entrenamiento físico y aprender cómo ser una Luna, porque a todos los efectos ella sería eso para mi y para mi manada.Mi teléfono vibro en el bolsillo de mi pantalón y lo
"La amaba contra toda razón, contra toda promesa, contra toda paz y esperanza y contra la felicidad y el desencanto que pudiera haber en ello.Charles Dickens"Pv XaviMi lobo estaba enfadado conmigo por haber perdido tanto tiempo en vez de ir detrás de Ellyn inmediatamente cuando fue al sanitario. Un enlace mental de mi Delta, Viggo, enuncio que tenía información sobre mi pareja. La realidad es que no había mucho que investigar, Vanessa Taylor es una omega de casi veinte años. Sus padres se dedican a la agricultura. Nació y creció en la manada, fue una alumna promedio y en los entrenamientos no destaca. No ha tenido pareja y eso es todo.Nunca juzgue a nadie por su estatus jerárquico ni por otras cosas, pero ¿La Diosa se había equivocado en emparentarme con alguien así? Pensé en Ellyn y en todas sus maravillosas cualidades y no solo eso, el esfuerzo que ponía cada vez que no sabía hacer algo y el entusiasmo por siempre aprender. ¿era una broma retorcida que mi pareja fuera alguien qu
“Los seres humanos hacen su propia historia, aunque bajo circunstancias influidas por el pasado. Karl Marx” Pv Ellyn El interior de la cabaña era acogedor y rustico. Aquí, en los terrenos del Reino, parecía estar más fresco, quizás por la cercanía de tanta cadena montañosa, y un fuego crepitaba en la chimenea, dando al lugar mayor calidez. Sé que mi tía no lo necesitaba, pero yo aun era humana y mi lobo interno, si bien estaba dando inicios de despertarse como algunos sentidos más agudos, como el del olfato y la vista, no me otorgaba aun otros beneficios, como el calor que ayudaría en climas más fríos. Sobre la chimenea había algunos portarretratos con fotos antiguas, algunas de mi padre y de ella en distintos momentos de su vida, otras de mis abuelos, y algunas un poco más actuales, como unas de mi cuando era bebe. – Toma– me dijo mi tía, Eyra, extendiéndome una taza de chocolate humeante que invadía mis fosas nasales y hacía que se me hiciera agua la boca. – Gracias– respondí
“El sufrimiento, las decepciones y la melancolía no están para molestarnos, ni para aburrirnos, ni para privarnos de nuestra dignidad, sino para madurar y transfigurarnos. Hermann Hesse" Pv Ellyn Por lo visto, mi tía no consideró que debía despertarme para nada, y cuando lo hice por mis propios medios, ya la tarde estaba muriendo y el crepúsculo comenzaba a nacer. Afuera los animales nocturnos comenzaban su jornada de cacería protegidos por el manto de las sombras. El cielo tenía esos tonos anaranjados producto del ocaso y lentamente las estrellas comenzaban a visualizar. Mi mente divagaba. Esperaba que mis padres no estuviesen muy preocupados, tendría que encontrar una forma de comunicarme con ellos sin que pudiesen rastrearme. Mamá era muy buena en todo aquello que tenía que ver con la tecnología y ciertamente no me veía volviendo a casa tan pronto, o quizás nunca. –Hasta que te despiertas, bella durmiente – comentó mi tía mientras me ponía en frente un plato con hamburgues