No crean que me he olvidado de ustedes 💕. Muchas gracias por seguir aquí 🤗.
Jimmy salió de ahí dejando su corazón tras la puerta con ella y las lágrimas empezaron a correr por su cara sin pedir permiso, mientras bajaba las escaleras corriendo.Salió directamente al parqueadero y caminó rápidamente hasta su pequeña poni, limpiándose las lágrimas que no paraban de escurrirle por las mejillas.Se subió al auto y cerró las ventanas antes de soltar un grito desgarrador que le marcó las venas de la garganta. Recostó la frente en el volante y comenzó a sollozar como un niño…Esa había sido la decisión más difícil que había tomado en su vida, y el dolor que sentía no era comparable a ningún otro.La había perdido por decisión propia…Lo que sucedió le hizo caer en cuenta de que ella era más importante de lo que creía. La amaba por como era, por su esencia, por su independencia, por su libertad… Él no iba a ser un obstáculo para que ella cumpliera sus sueños y lograra sus objetivos.La sintió frágil cuando le dijo que se quedaría. Ella no tenía que volverse débil por
Llegó la noche y Jimmy no había probado bocado. Todo le sabía amargo, hasta una barra de chocolate que intentó comer; sin embargo, sabía que no podía dormirse con el estómago vacío y se levantó de la cama para ir a la cocina por algo.Picó un poco de fruta e hizo una pequeña ensalada. Tardó más de una hora en acabarla porque ni siquiera su mandíbula quería hacer su trabajo.Estaba debilitado y quiso echarle la culpa a la falta de alimentación; sin embargo, sabía perfectamente que se debía más a la tristeza que llevaba en el alma.No hacía más que pensar en ella una y otra vez, preguntándose si tal vez había cometido un error, pero no… Ella merecía que él fuera sincero y cada vez que pensaba en eso, se sentía como un idiota valiente, así se definía… Lo primero por haber terminado la relación sin haber intentado primero lo que ella le propuso: una relación a distancia, pero él no quería eso porque no podría soportar tenerla lejos tanto tiempo. Tal vez ella podría enamorarse de alguien m
La noche fue larga para Jimmy; las pesadillas sobre Salomé no lo dejaron tener un sueño placentero, y es que, tenía que ser realista con él mismo, jamás podría volver a tener un sueño ameno, y esperar que así fuera sería en vano.Se duchó rápido y se vistió con una camisa sencilla de mangas cortas, un pantalón oscuro y unos zapatos negros que encontró en el closet. Desayunó sándwich con una taza de chocolate y luego de cepillarse los dientes, encendió el televisor para tratar de distraerse.Era temprano y los programas no eran muy buenos. Se la pasó cambiando de canales por un buen rato hasta que vio de reojo por la ventana, la sombra de algo acercándose a la casa.Se levantó para asomarse a la ventana y en cuanto vio que se trataba del auto de Salomé entrando a la propiedad, su corazón pareció querer salirse de su pecho.Los nervios que sintió le hicieron poner la piel de gallina enseguida, pero al mismo tiempo la felicidad fue tan inmensa que era obvio que el brillo de sus ojos lo d
Quería beber de ese manantial, estaba sediento y no se detuvo a pensar, simplemente contempló esos labios que ella había acabado de humedecer para él y la beso… Juntó su boca a la suya cerrando los ojos para sentirla con más ardor y comenzó a saborear esos labios que lo tenían enloquecido por ella…Sus sentimientos hacia Salomé se manifestaron en toda su inmensidad, mientras la besaba y la apretaba de la cintura, acariciándole el mentón con la otra mano, y ella se aferraba a él con fuerza, rodeándolo con sus brazos, repasando su espalda de arriba a abajo.Intensificó ese beso y le succionó levemente los labios, dándole paso a su propia lengua que deseaba participar con ardor, acariciándole la suya que también anhelaba esos toques húmedos…Ese beso los estaba dejando sin aliento, pero a Jimmy no le importó cuando ella empezó a colar sus manos por debajo de su camisa, acariciándole la piel con sus yemas calientes.Aprovechó para desviarse de su boca hacia el cuello y saborearle la piel,
Al verla salir del auto bañada en lágrimas, las gemelas corrieron hacia ella para abrazarla.Estaban esperándola para matarla porque se les había hecho tarde y seguramente habían perdido el vuelo ya, pero terminaron consolándola y dándole cariño, queriendo aliviar su dolor.—¡No quierooo! —gritaba mojando el hombro de Saray con sus lágrimas—. ¡No quiero dejarlo!—Shsh, tranquila amiga, todo estará bien… —la consolaba Saray mientras Sayda le acariciaba la espalda entre lágrimas también.Estaban llorando las tres abrazadas, y a pesar de que las dos hermanas también habían tenido que dejar a sus amores, el motivo del llanto en ese momento era más por la separación de Salomé con Jimmy que por ellas mismas.Paul lo había entendido perfectamente. Él y Saray todavía no formalizaban la relación, aunque estaban muy enamorados ya…, pero él ya estaba acostumbrado porque ya le había pasado antes y por alguna razón, con Saray no sentía ese miedo de perder a su chica y ella tampoco, a pesar de que
El día del primer evento llegó, y Jimmy tenía que presentarse al medio día en C.M.L. para asistir con su padre al desfile.El trabajo lo distraía muchísimo y no había vuelto a deprimirse; sin embargo, Salomé no se iba de su mente ni un minuto. Todo el tiempo estaba ahí, metida dando vueltas en su cabeza y su corazón la llamaba con cada latido.Era viernes y también su cumpleaños. Tenía pensado salir en la noche con Paul cuando el evento terminara, y emborracharse hasta no recordar su propio nombre, aunque el de ella permaneciera tatuado allí dónde siempre, porque sabía que ni aunque se bebiera el bar entero iba a olvidarse de ella, pero al menos sabía que iba a olvidar que no estaba ahí con él…Llegó a la empresa y jamás imaginó lo que encontraría allí… Silencio absoluto y nadie presente.Ni siquiera el portero estaba custodiando la entrada. Las puertas estaban cerradas, y adentro parecía estar todo en tinieblas.Miró a través del vidrio oscuro, pero no vio nada ni nadie adentro. Se e
La información que le dio la maestra le hizo acelerar el corazón, y caminó directamente hacia las gemelas para ponerlas al tanto:—Chicas, debo ir al hospital, ¿me acompañan?—¿Qué Salo? —cuestionó Sayda desconcertada—. ¿Por qué?—Parece que algo no salió bien en mis exámenes y la doctora quiere hablar conmigo.—¡Ay, no! —exclamó Saray tapándose la boca con la palma—. ¿Qué podría ser?—No lo sé, hay que averiguarlo.—¿Ya mismo? —preguntó Sayda.—Ya mismo.—Entonces vámonos —dijo Saray bebiéndose el vaso de jugo de naranja rápidamente en varios tragos.—Listo… vámonos —masculló Sayda con la boca llena de croissant.Las tres pidieron permiso para irse y la profesora no puso problema en que las gemelas la acompañaran.Llegaron al hospital y en la recepción le entregaron una tirilla a Salomé para que pasara a la consulta.Tuvieron que esperar al menos media hora comiéndose las uñas y arrancándose la horquilla inexistente del cabello, las tres por igual, hasta que por fin, una doctora de m
—¿Jimmy?, ¿Jim? —lo llamó varias veces por el teléfono, pero no escuchó nada más y tuvo que colgar.«¿Y si le dio un infarto?»No quería pensar lo peor, pero es que fue muy extraño ese ruido que oyó como si él hubiera dejado caer el celular, y luego simplemente no se escuchó nada más…Volvió a marcarle varias veces, pero solo pitaba y pitaba hasta que escuchaba el correo de voz. Pensó en llamar a Frank, pero tendría que darle explicaciones, así que mejor le marcó a Paul.El chico tardó en responderle, pero luego de varios intentos le contestó con voz de ebrio soñoliento:—Diga.—Paul, hola soy Salomé.—Salomé, ¿qué necesitas?Era obvio que estaba fastidiado por la interrupción del sueño; sin embargo, parecía querer levantarse de la cama con toda la disposición de ayudarle.—Es que… es que… le di una noticia a Jimmy y creo que se desmayó.Hubo un instante de pausa al otro lado de la línea.—¿Qué noticia le diste, Salomé?—Estoy embarazada.—¡¿Qué?! —Se levantó de golpe de la cama y al