Para algunos de los miembros de la familia López Amor, era la primera vez que salían de los límites de su pueblo. Una de esas era Sara, quien solo había viajado a la capital de su estado cuando tuvo que interponer la demanda junto a sus padres contra sus agresores. A pesar de eso, los paisajes les parecían maravillosos, afortunadamente la niña de la joven durmió gran parte del camino o se entretuvo con algunos de sus juguetes. Aunque el primer destino era la ciudad de Durango, pues iban al Aeropuerto para de ahí viajar a Guadalajara.Está de más decir que ninguno de los López tampoco había viajado en avión, así que estaban nerviosos y también emocionados. Don Leo se preocupaba de que todo esto fuera demasiado exagerado, pero calmaba su ansiedad viendo a su hija feliz, solo esperaba que el joven no la lastimara de ninguna forma.Cuando llegaron, Vicenzo y sus hermanos fueron muy amables con ellos y les explicaron cómo es que se sentirían tanto al despegar como al aterrizaje. También, a
—Ella es Gaby, la enfermera que ayudó a intervenir a Vicenzo, y mi novia.Tal revelación hace que todos los miembros de su familia se giren a verlo, vaya momento para hacérselos saber, lo chistoso fue cuando Gaby también giró a verlo asombrada. Tal parece que la joven tampoco estaba enterada de tal cosa.—¿Y eso tú? —le pregunta por lo bajo.—Ni creas que te presentaré soltera, entretanto soltero aquí, además ya lo habíamos hablado —Le recuerda en el oído a lo que ella solo se ríe.—Fue solo una conversación, tienes que ser más romántico para la próxima vez —dice ella con una sonrisa en su rostro—. Y con eso me refiero a cuando me pidas matrimonio.Ahora es Lalo quien abre los ojos cuál búho en la tiniebla nocturna, haciendo que ahora su novia se burle de él.—Un paso a la vez, mujer ¿Qué no ves que me cago de nervios?Mientras la nueva pareja de enamorados prosigue su presentación, es Vicenzo, Sara y la hija quienes captan la atención de Anna y Giovanni. Ellos no habían tenido la opo
Cuando se pone de pie encuentra a Lita en un sofá dentro de la recámara con Mila en sus brazos.—Roncabas como tronco, agradece que le gustas al muchacho que si no lo espantabas —dice su abuela riendo.—Ay, Lita, necesitaba descansar… —se justifica.—Lo sé mi niña, Mila también, vine desde hace rato a verlas y estaba despierta aún, quiso cenar y en cuanto lo hizo se quedó dormida —añade Lita.—Ven, deja la acuesto, ¿sabes en donde es que vamos a dormir? —pregunta sin saber lo que sigue en el plan.—Tu futuro novio…—¡Lita! —la regaña su nieta mientras toma a su hija en los brazos—. No andes diciendo eso, solo somos amigos y nos estamos conociendo.Recuesta a su hija mientras Lita la sigue.—Como te decía tu “amigovio”—Ay, en serio, que, entre más años, más llevada te vuelves —amonesta divertida a su abuela.—Bueno… él ha dicho que nos quedaremos aquí, mañana temprano saldremos en esos cacharros voladores infernales de nuevo a Cancún —dice haciendo ademanes al aire—. Por momentos me a
Vicenzo teme que una vez que ella sepa ese pedazo de su historia no quiera nada con él, pero, aun así, sabe que debe ser sincero por el bien de una futura relación.—Bueno, no sé por dónde comenzar, pero supongo que por el final para que luego comprendas el inicio —sugiere sin en realidad saber cómo exponer todo sobre la mesa—. Ya serán cuatro años desde que me divorcié, estuve casado por cinco años con una mujer que creí, era el amor de mi vida, pero me engañó.Sara no esperaba que le dijese algo aí como tal, al inicio sintió sorpresa y luego empatía. Ella no sabía lo que era tener un gran amor que te llevara a querer casarte o a estarlo, lo más cercano a eso era cuando tuvo un pequeño enamoramiento en primaria por uno de sus compañeritos, pero este terminó cuando él se comenzó a burlar de ella y a decirle piojosa, que era más referente a su condición social que a que tuviera piojos.—Oh… lamento sinceramente que pasaras por eso —revela con sinceridad—. Me imagino que fue difícil par
Después de una armoniosa cena entre preguntas sencillas, sobre cosas que para muchos pueden parecer irrelevantes, pero para dos seres que se atraen son piezas claves en el proceso del cortejo.— ¿Te gustaría ir a dar un pequeño paseo por una plazuela aquí cerca? —pregunta Vicenzo a la chica que de a poco se ha ido convirtiendo en una persona importante.Ella asiente con la cabeza mientras él paga la cuenta del restaurante. Él le toma de la mano y salen de aquel lugar a paso lento. Vicenzo no se ha recuperado del todo. Después de las radiografías, el doctor le dijo que lo del pie no era nada grave, pero por precaución le dejaría la bota un par de días. Él en su desespero por querer caminar mejor se la quitó y solo se ha puesto un calzado cómodo.Las costillas afortunadamente no ha sido una rotura, sino una contusión que ha provocado hinchazón y un fuerte moretón. Cuando supo esto lamentó que en la clínica donde lo atendieron no hubiese mejores aparatos, prácticamente lo diagnosticaron
Un beso puede no significar nada para quienes tienen el corazón y la mente enfocados en otras cosas, pero para quienes tienen puesto todo en alguien, un beso significa que puedes conquistar el mundo.Vicenzo, quien ya contaba con experiencia en el arte de la conquista y seducción, sintió que no sabía nada a comparación de lo que sus emociones le embargaban en ese momento. Para Sara, quien era la primera vez que besaba todo era mágico, nuevo y lleno de energías que se acumulaban en sus sentidos. Es como siendo atraído a algo más poderoso, que no se puede comprender y ni explicar al intentar ser racional.Ambos son consumidos por el momento, todo a su alrededor se desvanece tras la cortina de lo intangible, de los espirales aromáticos que se desprenden del calor de los cuerpos. Vicenzo pasa suavemente su lengua por los labios de ella logrando que se estremezca, le gusta lo que siente y lo hace de nuevo. Sara que creyéndose inexperta, se deja llevar entregando lo mejor de sí, sin saber q
A la mañana siguiente, después de un típico desayuno jalisciense en donde la familia degustó una carne en su jugo, huevos estrellados y café. Desde temprano, mientras unos ayudaban con su elaboración, otros cargaban en las camionetas todo el equipaje.Tal como Vicenzo dijo a las nueve de la mañana salieron de casa de los Della Rovere Mariani, rumbo al aeropuerto. Dejando las camionetas en el estacionamiento a la espera de su regreso, llegaron a la terminal que les correspondía y documentaron sus maletas, así como boletos. Una hora después estaban llamándoles para abordar y cuarenta minutos después de eso estaban despegando.Los López estaban fascinados y maravillados. Patricia y Lita habían hecho migas con Rosa, entre las conversaciones triviales de la familia, los hijos y los nietos, las matriarcas entrelazaron una sincera amistad. Con mayor animosidad Lita, que se burlaba de las otras más jóvenes por no ver el mundo como ella lo veía.Por su parte, Leonardo había hecho amistad con e
Las familias se habían reunido en el comedor en punto de las dos de la tarde, tal como acordaron. Algunos hasta se habían dado una ducha y otros solo se cambiaron de ropa. Sara decidió cambiarse de ropa por un vestido con volantes de color azul claro, con un cárdigan largo blanco que su Lita le había bordado, especialmente para días no tan fríos.Llevaba a su pequeña de la mano vestida también con un vestido del mismo color que ella y un cárdigan igual pero más pequeño. Tanto Patricia como Lita eran expertas costureras, ellas cosían muchas de las prendas de la familia. A Sara le gustaba que de vez en cuando le hicieran algunas prendas a juego, algunas blusas o bien unos vestidos.Vicenzo las esperaba junto a su hermano Alessio mientras conversaban sobre los planes para la cena. Vio como la chica que le removía cada fibra de su ser con tan solo verla salía del ascensor. Todos se dieron cuenta cómo el mundo se detuvo para Vicenzo, no había nada ni nadie que llamase más su atención que l