CarolDe cualquier forma, tenía que ser yo la que se mantuviera al margen de esta situación, no podía dejar que ahora también Ximena tuviera un colapso.—Estaremos bien, tú misma lo has dicho.—¿Y si algún loco desquiciado llega a matarnos?—Xime no creo que—¿Y si se aprovechan de que Mark se ha ido? —pregunta aún más asustada.—Dudo que—¡Podríamos morir! —y tras aquel grito obtiene algunas miradas de los médicos.—¿Podrías bajar la voz? —susurré —ya te dije que nada nos va a pasar.—Espero que tengas razón.—¿Señora Lancaster? —se acerca una mujer con bata blanca.Asumo que es la doctora. Haré de cuenta que no me ha emocionado escuchar «Señora Lancaster» Yo en realidad no soy su esposa, no imagino porque se dirigen a mí de esa forma.—Fue el señor Lancaster quien la puso como contacto de emergencia recientemente, además de su guardaespaldas, mencionó que era su esposa.Xime me golpeó con su codo para que reaccionara.—Ah, sí, soy su prometida en realidad, pero ¿A quién le importan
CarolSupongo que Mark sabía lidiar con este tipo de situaciones, pero yo no. Se acercó con un poco de algodón y le puso alcohol. Al menos estábamos en un hospital, cualquier cosa que se saliera de control tendríamos a personas capacitadas listas para ayudarme.—Ese tipo de personas no son parte de la MOH, te aseguro que nadie en su sano juicio te hubiera puesto una mano encima sabiendo que eres la mano derecha de Nick —se inclina para limpiar la sangre.—¡Auch!—Es necesario, no tienes ni idea de en dónde ha estado esa navaja ¿Qué te dijo el hombre?—No mucho, prácticamente vino a matarme, dice que le hice perder dinero, armas y drogas.No miente, ahora tenemos todo eso en nuestro poder, al menos Mark me asegura que todo está a salvo en el club, pero ya no sé si es el mejor lugar.—Tranquila, tú misma dijiste una vez que el Golden Garden se volvería una fortaleza para quienes los apoyaran, tienes que empezar a creer en ti.De verdad espero que ese lugar pueda mantenernos a salvo.—Sí
Nick Cuando abro los ojos veo mucha luz, con dificultad me acoplo a ella, me muevo un poco y siento como si todo el cuerpo me pesara, como era de esperarse el lugar apesta a hospital, siento un sabor amargo en la boca ¿Qué diablos me inyectaron?Soy consciente de todo lo que pasa a mi alrededor cuando la veo, no sé si es el dolor, los efectos de la droga o mi cansancio, solo sé que siento algo golpeándome el pecho cuando noto que Carol está durmiendo sentada a mi lado, debió ser una noche pesada si se quedó todo el tiempo ahí, una cicatriz en su cuello se asoma, luce reciente.Puedo recordar sus palabras anoche en el tráiler cuando estaba a punto de perder la consciencia de nuevo «No hables, estoy aquí, no dejaré que nada te pase, vas a estar bien.» Cumplió lo que dijo y me trajo con vida, de no ser por ella, tal vez estaría muerto, en el fondo lo sabía, yo sabía que seguiría con el operativo.Ninguna de las mujeres con las que he estado había hecho tal cosa por mí, Carol siempre ha
NickKlaus sigue diciendo que tiene que contarle la verdad a Ximena, aquello corta el hilo de mis pensamientos.—¿Lo harás? Me refiero a que ¿se lo dirás?—Muchas opciones no me deja, no sé qué es lo que tenemos ahora, Ximena no es la clase de chica que quiere algo serio, tal vez no ahora, lo menos que puedo hacer es ser sincero.—¿Y crees que lo entienda?—Supongo que tendré que averiguarlo.—Muy bien caballeros, todo está en orden, así que con esto se sentirán mucho mejor y podrán ir a casa —menciona una enfermera.Inyección intravenosa, parecía ser la mejor opción que teníamos, dos enfermeras se acercaron para aplicarla y después nos dejaron ir, colocaron nuestra ropa en una silla y nos cambiamos una vez que nos dejaron solos.Lástima, les hubiera alegrado el día verme, con dificultad salimos, cojeamos un poco, pero sé que verlas frente a nosotros es todo lo que necesitamos.Cielos, me estoy convirtiendo en todo un cursi ¿Qué me ha hecho?—¿Estás bien? ¿Qué te hicieron? —la pobre X
NickEso me aterraba, perderla por haberla involucrado en la mafia.—Nick sabes que pude habérmelas a—No —la corté —sé que eres capaz de muchas cosas y sabes que nunca te he subestimado, pero no conoces a quienes trabajamos para la MOH, no imaginas cuán agresivos pueden ser los que son enviados para torturar, si el hombre con el que te encontraste hubiera querido, te mata antes de que puedas defenderte, por eso todos le temen a nuestra organización, las personas se aferran a que somos solo un mito, pero en el fondo saben la verdad, podemos caminar entre ellos y no lo sabrían, somos letales, somos destructivos y conseguimos lo que queremos al costo que sea.»Yo soy una de esas personas, Carol, sé justo lo que harían si te atraparan y no podía ni siquiera imaginar que alguien te lastimara, me daba igual si estaba al borde la muerte, yo necesitaba que Mark volviera para cuidarte, él sabe cómo actuar ante casos como estos y confío en él, sabía que estarías a salvo.—Me pediste que siguie
Ximena—Ximena, solo te pido que confíes una vez en mí, quizá es demasiado, pero creo que vale la pena el riesgo.Enarca una ceja esperando mi respuesta.—De acuerdo, solo esta vez.—Descuida solo necesito una oportunidad.Voy tras de él y se presenta con la membresía Black, el guardia nos deja pasar sin decir nada, Carol tenía razón, este lugar es más elegante y al menos aquí se bebe para pasar un buen rato no para terminar ebrios como varias de las chicas y chicos de arriba.—El cuarto rojo tiene más ventajas de las que uno cree —aseguraCruzamos una puerta que da con unos jacuzzis, la barra y del otro lado una piscina. Veo que se quita la camisa, deja visible una cicatriz en su espalda, permanece solo en bóxer y entra a la piscina y mientras más se adentra, más profunda parece; es la primera vez que no sé qué hacer, quiero decir, sé que tengo que entrar, pero no me responden las piernas.—La distracción de esta noche consiste en entrar a la piscina por si no lo notaste —bromea y se
XimenaAprovecho que mi horario para entrar al trabajo es hasta tarde y paso a casa de mis abuelos, ellos están bien, pero quien más me interesa es el pequeño que viene corriendo para abrazarme.—¡Ximena!—Hola, mi vida —me hinco para poder abrazarlo mejor —¿Cómo has estado?—Muy bien ¿La abuela ya te enseñó mi tarea? Tienes que verla, me ha quedado genial.Su cabello negro me recuerda al de su padre, los chinos a los de su madre, ni hablar de los ojos, son los de Camille y en cuanto actitud, es como ver a una mini yo, pero en hombre. Santi regresa con su libreta y me muestra lo que ha hecho.—Es un dibujo.Contengo las ganas de llorar cuando veo que soy yo, el título dice “Mi heroína” estoy tomando la mano de Santi, me ha dibujado con todo y capa.—Es un dibujo precioso, corazón.—Es que eres mi heroína, haces muchas cosas.—¿De verdad crees eso? —asiente feliz.—Me das comida, juguetes y te enfrentas a los villanos por la noche.Ojalá que nunca crezca, así no sabrá que me acuesto co
CarolAbro los ojos y a veces me cuesta creer que esto es real, Nick está a mi lado durmiendo plácidamente.—¿Me estás observando mientras duermo? —abre solo un ojo para mirarme —¿Nada que decir en tu defensa, cariño?—Creí que en verdad estabas dormido.Vuelve a cerrar el ojo y coloca su mano detrás de su cabeza.—No pude dormir muy bien.Entiendo el motivo, si hoy fuera un día como cualquier otro le diría que podemos quedarnos todo el día en la cama, que no hay necesidad de ir al club porque seguro que se están encargando de mantener el orden, pero no es tan sencillo, comienza la campaña y ahora hay muchas cosas en juego.Ganar o morir, tal vez no haya otra opción.—Es por la campaña ¿Cierto? —asiente con tranquilidad —¿Cómo te sientes?Finalmente se incorpora recargando su espalda en la cabecera.—No tengo miedo si es lo que te estás preguntando.—Vamos, Nick, todos hemos tenido miedo alguna vez.Frunció el ceño y parecía que miraba un punto en la nada.—Una vez tuve miedo, casi te