Puedes quedarte para siempre (parte uno)

Ares

León, parecía lo suficiente distraído como para no notar lo que estaba ocurriendo. Con suerte detendría a la loca de su madre, antes de que lo perturbase con sus ideas de huida.

—¿Qué le pasaba a mi mami? —Preguntó León llevándose un enorme bocado de pollo.

—Humm… No estoy seguro, creo que estaba cansada —le respondió mi hermano, cortándole el resto de carne.

—Me gusta mucho el pollo de mi mami —pasó de asuntos estresantes para concentrarse en lo importante. Bien por él, a veces deseaba ser así de relajado.

—Ya me di cuenta, espero nunca tener que llevarte a cenar, amiguito —. Pasé por la cocina y le hice un gesto a mi hermano, para darle a entender que necesitaba que lo mantuviese alejado y distraído. Él lo captó de inmediato. Así que asintió con la cabeza, antes de volverse al vaquero —. ¿Qué tal si después de almorzar, vemos una peli? ¿Te gusta la idea?

—¡Sí! —Lo escuché decir a León y el corazón se me encogió en el pecho. Ese niño ya era un D’ Amico, no volverlo a ver, se
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo