OBSTACULOS

Asombrosamente, y aunque un poco escéptica y desconfiada por mi fracaso matrimonial, la convivencia con Hugo fue fácil, encajamos a la perfección nuestros dos mundos. Tengo que reconocer que el mérito fue todo de Hugo, en una semana de convivencia me di cuenta de lo bien que había llegado a conocerme durante esos años atrás. Era capaz de detectar mi estado de ánimo, incluso mis sentimientos, con solo mirarme, y a mi me encantaba que lo hiciera, porque mientras me miraba me sonreía con esa media sonrisa a un lado, con el tiempo comprendí que cada gesto suyo era una bomba de relojería que hacía estallar en mi interior, como el simple gesto de peinarse el pelo con los dedos hacia el lado cuando le caía hacia la cara, me encantaba ese remolino, tanto que fue el detonante de nuestra primera pelea.

-en serio que te vas a enfadar si me corto el pelo?

-Deja que yo te lo corte, venga, dame la máquina

-Esto es ridiculo Mía, pero que te ha dado con mi pelo?- claudiqué, le pase la máquina, me
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo