-tendrás que hacerlo sin mi - susurró Hugo antes de salir por la puerta. Mía miró a Gina, dispuesta a protestar y decirle todo lo que pensaba de aquel asunto, pero Michael se adelantó.

-Yo iré contigo! - exclamo decidido clavando su mirada en Gina.

-Como dices?

-Deja que te explique …. no es lo que piensas Gina, Mía, estás decidida hacerlo?

-Por supuesto que si

-Lo haremos a mi manera, y seguirás mis instrucciones, cien por cien.

-Esta bien.

-Esta claro que no me vais a pedir mi opinión? -dijo una Gina enfurecida, que aunque desea largarse de allí, no dudó en quedarse y escuchar el descabellado plan de Michael.

Aunque sabía que en ese momento el alcohol no iba a solucionar sus problemas, Hugo se dejó caer sobre el sofá de su salón con una botella de whisky en la mano. El alcohol hizo que se quedara dormido después de vaciar la botella. Era la primera vez que se sentía impotente ante una situación que no podía manejar, su vida privada no estaba en venta, y le dolía el alm