27

—¡No es posible! –exclamó Gemima cuando Álvaro le contó lo que estaba pasando con Rubén. Hubiese preferido no tener que hacerlo, ocultárselo al menos hasta que se resolviera esto, pero no sabía cuánto tiempo iba a tomar, y él nunca le había ocultado asuntos tan graves a su mujer—. ¡No es posible! –repitió—. ¡Mi hijo jamás haría algo así! ¡No sería capaz! No es un santo, pero sí que estoy segura de que jamás lastimaría a una mujer. Y menos de esa manera. ¡Por Dios!

—Eso lo sabemos tú y yo. Pero incluso él duda.

—Estaba bajo el efecto de esas drogas –dijo

Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP