— ¿Con quién hablabas Rosario? — Le preguntó Júpiter adormitado e ignorando todo lo que ella momento atrás conversó con Melquiades.— ¡Con Melquiades mi vida! Le adelante que nuestro vuelo sale mañana y esperaba que todo se encontrara bien para nuestro regreso, aparte que tengo una sorpresa que darte.— ¿Sorpresa? ¿Por qué tendrías que darme una sorpresa? — Preguntó Júpiter con la duda en su corazón y la intriga que desde siempre permanecía en su interior.— Melquiades dejará su puesto en el centro de modas y se convertirá en nuestro mayordomo, pero aun así no lo retirare del bar, lo necesito en ese lugar si no he de manejarlo como antes.Júpiter se levantó abruptamente de la cama con la “Sorpresa” sin saber exactamente a que se debía ese cambio repentino de Rosario, por lo que abrazándola a su pecho y posteriormente impregnando un beso apasionado en sus labios, Júpiter respondió con la alegría en su rostro.— ¡Esa, si es una enorme sorpresa mi amor! Agradezco que tomaras en considera
Samael utilizo los recursos con los que contaba en ese momento para idear su liberación, a pesar que Júpiter llevaba consigo sus planes para dejar en libertad a sus amigos, pero ignorando lo que Rosario en verdad deseaba hacer al respecto, por lo que el triángulo se encontraba bajo el manto de la traición por mencionar que Júpiter traicionaría Rosario en algún punto de su relación por sus amigos, Rosario por su parte ya traicionaba a Júpiter con haber dado la orden de eliminar a Akane y Melquiades traicionando a Rosario por aceptar el dinero de la liberación, ¡Nadie se quedaba por fuera de ese manto de la desesperante traición!El día transcurría con normalidad y Rosario no volvió a llamar a Melquiades, pero así mismo parecía ser la oportunidad perfecta para llevar a cabo el plan que Melquiades formulo para dejar escapar a Samael y su amiga, ¡Nadie imaginaria que ese día las circunstancias podrían complicarse o llegar a salirse de control!— Se nos ha terminado el sueño de estar lejo
Marlene confronto a Júpiter y específicamente retó a Rosario ante la mirada y los oídos de los periodistas, ¡Si no estaba en sus manos corregir a su hijo, entonces ella al menos trataría la manera de protegerlo!— ¡Madre por favor! No continúes con tus palabras, la última vez que me encontré contigo fui claro y creo que también me dejaste en claro que no te mancharías las manos con la fortuna de mi familia, así que no comprendo que haces aquí realmente ¿Qué pretendes con todo esto?— ¡Seguramente dinero es lo que desea mi amor! — Exclamo Rosario con egocentrismo y desprecio hacia Marlene.— Se equivoca señora, porque a comparación con usted, ¡Si tuve decencia y valor para negar lo que se me ofreció a cambio de mi silencio! Así que no venga a querer ofenderme con su propuesta de dinero. — Respondió Marlene mientras no dejaba de observar a su alrededor.Melquiades buscaba el momento adecuado para actuar y sacar a Rosario principalmente de escena y de esa manera llevarla a cualquier luga
— Pero ¿Cómo sucedió eso? —Le pregunto Rosario a Melquiades en medio de la conferencia a la prensa en la empresa de modas.Júpiter se percató que Rosario tras atender la llamada cambio en cuanto a su manera de actuar, presintió que podría estar sucediendo algo que debía averiguar en cuanto la conferencia del cambio de mandos en la empresa llegara a su final, solo que Rosario desde ese momento se encontraba ideando el plan que debía llevar desde ahora, debido a que, aunque ella decidió eliminar a Akane desde un principio, no era el momento apropiado para llevar a cabo esa acción.— Podría indicarnos ¿Desde cuándo se conocen ustedes? —Le pregunto a Júpiter una de las periodistas que se encontraban invitadas al evento.Hasta el momento era la primera que preguntaba algo relacionado con la relación amorosa entre ellos, pero que causo un enorme silencio en la sala y Rosario tomó de inmediato el micrófono para dar respuesta a la periodista presente.— A pesar que es una pregunta fuera de nu
— ¡¿Cómo puedes decir eso Rosario!? Esto tiene que ser una maldita broma, prometiste liberarlos en cuanto me casara contigo, espere y no fui insistente para darte espacio para que respetaras tu palabra y cumplieras y ahora ¿Me sales con esto?— En verdad lo siento Júpiter, pero no fue mi culpa y puedes corroborar con Melquiades que le di la autorización para que los liberara mañana, pero nunca imagine que esto llegara a suceder.— Preguntarle a Melquiades es como hacerle la misma pregunta a tu espejo, ¡Jamás mencionara algo que este en tu contra! Vamos a regresar a la mansión y las cámaras de seguridad nos dirán la verdad de todo esto. —Exclamo Júpiter mientras soltaba a Rosario y le daba la espalda.— Con toda certeza puedo hacerte saber que no existen cámaras en esa parte de la mansión, las elimine desde hace un buen tiempo, así que supongo que tendrías que confiar en mi palabra y en la de Melquiades. —Respondió Rosario arreglándose el vestido y tomando el aliento de nuevo.—¿Confia
Júpiter contaba con poco tiempo para sacar la información que necesitaba para corroborar lo que su presentimiento le hacía sentir respecto a la muerte de Akane, por lo que esperando a que la sirvienta le diera a conocer la condición que deseaba para entregar la evidencia que ella grabo y capturo al momento de los hechos en la mansión, no dudo en volver a preguntar.— ¿Qué es lo que necesita para que me entregue la evidencia y confiese? —Le pregunto Júpiter agitado y desesperado.— El suficiente dinero como para marcharme de este país y no ser atrapada por la señorita Rosario y lo quiero hoy. —Respondió la sirvienta con exigencias, sabiendo que su información era valiosa y comprometedora.— No hay problema, solo necesito una cuenta bancaria y nombre para el boleto de avión, ahora entrégueme las evidencias y su declaración, ¡Pero rápido que ella me espera en la habitación!La sirvienta saco su celular y enseño las evidencias que se encontraban en el dispositivo, por lo que la reacción d
— Espera por lo menos que acabe de vestir decentemente, bajare en quince minutos. —Respondió Júpiter a Melquiades que se observaba más que curioso por la conversación que escucho de parte de Júpiter.Contaba con quince minutos para arreglarse y enviar los códigos de amigos a Samael, era muy importante para Júpiter estar en comunicación con su único amigo, esperando que Samael no rechazara la comunicación, aunque Júpiter consideraba el hecho que Samael se encontraba en todo su derecho de ignorar y rechazar la comunicación, aun así, lo intento una última vez.— Vamos Melquiades, debo resolver este asunto de inmediato. —Exclamo Júpiter muy seguro de lo que debía hacer al momento de encontrarse con los oficiales.— Antes de marcharnos, debo advertirle joven Júpiter, que por nada que se le parezca que tiene el poder o la oportunidad para voltear la situación a su favor, debo hacer de su conocimiento que Rosario sabrá de inmediato si usted abrió la boca para entregar evidencias de lo que se
A Samael no le importo en ese momento a donde es que debía dirigirse para mantenerse a salvo, por lo que queriendo aun conservar la esperanza que todo lo que Júpiter provoco e hizo, fue por una razón ¡A su manera! Pero que después de todo fue su única manera de hacer que todo sucediera.Reviso cada una de las contraseñas y ubicaciones que Júpiter le envió en ese correo, así como el lugar a donde aparentemente Rosario llevaría a Júpiter fuera del país nuevamente, tras enterarse del alboroto de las investigaciones en su contra, pero que al parecer ahora no era tan necesario viajar ¡A menos que la situación lo ameritara!Samael observo las fotografías donde Melquiades sacaba a Akane de la mansión con ayuda de los guardias, lo que también provoco un serio dolor en su corazón al observar a su amada Akane envuelta entre sabanas sin vida.— Pero ¿En quién puedo confiar ahora? —Se preguntó Samael tras darse cuenta que la justicia no se encontraba de su lado, por lo que la única alternativa en