Me levanto con calma, desplazándome en dirección al baño más cercano, en mi camino veo como en esta zona fluyen mucho las personas repartidas en cada esquina. Con un suspiro me terminó por introducir en el cubículo más cercano para vaciando mi vejiga después de un corto tiempo, después de todo lo único que llevo en mi sistema es una cantidad interminable de coca-cola’s.

Después de hacerlo me dirijo hacia el lavamanos, posicionó mi mirada en el espejo notando las ojeras que se encuentran debajo de estos.

«¿Hasta cuándo voy a seguir con esto? Será que nunca volveré a tener una normalidad, cada vez me cuesta más conciliar el sueño…», me preguntó mientras termino de lavar mis manos para salir del lugar.

Recorro el mismo camino de antes. Cuando estoy por salir del pasillo siento que me toman de la camisa de vestir negra que llevo puesta, por lo que no me queda más que detenerme para posteriormente girarme, lo que me hace encontrarme con una mirada verdosa, como un bosque en primavera.

— ¿Q