Alondra Jiménez, es una mujer joven con veinticinco años, un metro setenta de estatura, de cuerpo atlético, su piel como el caramelo hace juego armoniosamente con unos ojos color miel y el castaño de su cabello. Una chica sencilla que a pesar de haber pasado por las peores situaciones de su vida, entre ellas la muerte, hoy en día se encamina al pináculo de sus éxitos, habiendo logrado cosechar tanto desde su adolescencia, solo necesita alcanzar una meta más. Éxitos, una buena posición social y una lucha interna constante que la hace mantenerse alejada de lo que ella cree será el tropiezo más grande de su actual vida, los miedos de un pasado doloroso la hacen precavida y circunspecta, una atea del amor. Christopher Freites dejará desconcertada a la hermosa Alondra con sus ojos azules y su metro ochenta, un chispazo de energía que se intensificará cuando la atracción entre los dos sea tan evidente que evitarlo sea imposible. ¿Alondra seguirá el camino que construyo ella misma pavimentándolo con sus sueños y deseos o tomara la decisión de no recorrer ese camino sola?
Leer másLa vida me dio tantos regalos, un hombre con pancita, dos voces inocentes que me dicen mami y la felicidad plena y total. Tal vez la vida no inicia como soñamos o deseamos, quizás sus caminos son tormentosos y llenos de obstáculos, sin embargo, jamás es tarde cuando al fin la dicha nos llega, solo hay que saber verla y disfrutarla.AlondraHan pasado dos años desde que nacieron los gemelos, Christopher ha insistido demasiado en tener un nuevo bebe, al principio me aterró la idea de volver a pasar por todo el trauma que viví cuando Cristian y Adeline nacieron. Pero luego pensé que no está bien vivir con miedo toda la vida, ya desperdicié gran parte de la mía por no saber cómo dejar ir los horrores del pasado.Hace tres meses dejé de cuidarme y he estado visitando a mi médico en secreto, solo él sabe sobre mi secreto, necesitaba estar completamente segura de que puedo quedar embarazada sin tener complicaciones durante el parto, por lo que me aseguro que una vez se confirme el positivo m
Así es como luego de tantas tormentas nuestra historia empieza al fin, tú a mi lado y yo al tuyo, amándonos eternamente por sobre todo. Tú me enseñaste tanto y yo me hice más fuerte por ti y para ti.ChristopherEntro al consultorio junto Andrea y tomamos asiento, la enfermera se retira y nos deja a solas con el médico. Intento penetrar en el alma del hombre para descubrir que es lo que tiene que decir, pero es imposible sacar algo de esa mirada grave y neutra que no refleja ninguna emoción.—¿Sucedió algo con mi esposa? —pregunto ya no pudiendo soportar más el silencio.—Su esposa se encuentra en perfecto estado, diría que mejor de que esperaba. —El alivio invade mi alma y sin querer me doy cuenta de que tanto Andrea como yo soltamos el aire retenido y empezamos a respirar de nuevo.—¿Seguro que se encuentra bien, doctor? —pregunta Andrea.—Despertó hace una hora y aunque debe tener ciertos cuidados por la herida de la cesárea ella se encuentra bien, sin embargo, debido a las complic
Escapas de manos del ángel de la muerte y nos llevas a un infinito rodeado de estrellas en el que no canso de jurar que te voy a amar hasta más allá del fin de mis días.ChristopherEntro en silencio, tal como se me indicó, al lado de la cama de mi esposa hay una cuna lo bastante grande como para albergar a dos ocupantes. No habíamos querido saber el sexo de nuestros hijos hasta su nacimiento, es increíble que hayan nacido sanos con treinta y seis semanas, son prematuros, pero según lo que me han dicho, gracias a que no fallamos en los controles y ella tuvo una buena alimentación además de haber tomado todos sus suplementos, ambos bebes están perfectamente desarrollados.No obstaste, los tendrán en cuidados neonatales, ya que al ser un embarazo múltiple el peso de ambos bebes es inferior al de un solo bebe. Pero según me ha dicho la pediatra que mil quinientos gramos y mil seiscientos gramos son un excelente peso, considerando que son mellizos.—Lo dejaré a solas cinco minutos, felici
Es aquí donde nuestros corazones se encuentran y se hacen fuertes al unirse por toda la eternidad. AlondraEstoy asustada, tengo miedo, no quiero hacer esto sola, pero también tengo que pensar en mis hijos. Necesito a mi esposo, quiero que esté a mi lado. Colocan delante de mí una cortina que me impide ver lo que realizan del otro lado, mis lágrimas se desbordan por la desesperación al recordar cómo fue mi primer embarazo y el resultado.—¿Siente esto? —pregunta el médico haciendo que centre toda mi atención en él.—¿Qué?—Bien, procedamos —responde y entiendo que ha empezado.De pronto la puerta se abre y entra Christopher, vestido con el atuendo de las enfermeras.—¿Quién es usted?—Es mi esposo, no lo saquen por favor.Extiendo mi mano hacia él apenas lo veo y de algún modo me siento más fuerte y segura.—Todo va a estar bien mi amor, ya estoy aquí —pronuncia y sus palabras son un bálsamo que calma todas mis angustias—, lo estás haciendo bien, relájate.Asiento sosteniendo su mano
Doy un paso al frente en el que mi paraíso se llena de nuevas esperanzas, las ilusiones recién brotadas despliegan sus pétalos y perfuman el aire con su toque de vida, llenando la mía de inmensa felicidad.AlondraEs increíble como basto con que me hiciera una prueba de farmacia para que yo me inflara como un pez globo, ya estoy de ocho meses y casi ni puedo caminar, porque para el colmo no es solo un bebe el que viene en camino, sino dos. No entiendo cómo es posible que una persona pueda darle refugio a dos personitas dentro de sí misma, pero aquí estoy recibiendo todos los cuidados y mismos posibles de mi esposo.Hace casi un año solo soñaba con algún día poder tener una familia, aprovecharme de mi posición económica para adoptar porque estaba completamente segura que jamás podría estar con un hombre, no obstante, la vida me demostró que no todo está escrito ni que hay que dar las cosas por hecho.Todos, Andrea, Christopher y el señor Santiago se la pasan dándome de comer como si fu
Tu mano me libero del infierno, fuiste ese dios que se hizo inmortal al entregar su alma por la mía cuando nadando contra la corriente me trajo de vuelta. Alondra Su boca devora mi cuerpo sin piedad, se desliza por mi piel desnuda dejando un camino plateado de saliva a su paso, arranca gemidos y jadeos de mi garganta con cada una de sus íntimas caricias. Intento detenerlo tomándolo del pelo cuando su boca se dirige a mi feminidad, sin embargo, me toma de las muñecas y las alejas, a pesar de que sus manos se cierran con fuerza no me causa ningún tipo daño. —Déjame beber de ti para entender que esto no es un sueño, que lo que sucede entre los dos en este momento es real, por favor —pide derrumbando mis barreras. Su boca se sumerge en mi encharcado centro y obra con destreza, provocando que mis caderas se elevan por sí solas para ir a su encuentro, a medida que su lengua me tortura, mis manos libres de su agarre se aferran a las sabanas al tiempo que siento como la presión y el calor
La determinación con la que me liberaste de los demonios que consumían mi vida me convierten en devota de tus sentimientos, me hacen esclava de tus deseos y señora de tu amor. Alondra Christopher ha decidido darme un poco de espacio yendo a dormir en la sala, pese a que le dije que podía quedarme sola, no quiso irse, supongo que se siente mucho más tranquilo estando a un paso de mí. Ya sabe que lo recuerdo todo y se siente avergonzado por como actuó, pero dentro de mí hay algo que me susurra, que no me aleje de él, que no lo saque de mi vida porque él consiguió dominar las pesadillas y calmar los dolores. Cada vez que me planteo la posibilidad de continuar mi vida sin Christopher a mi lado, volver a lo que era antes de él, la perdida, la ausencia y el vacío se sienten tan inmensos, como si fuesen parte del infinito y nunca tuviera fin. Es cierto que se aprovechó de una circunstancia para que lo dejara entrar en mi intimidad, para que le invitara a formar parte de mis días, sin embar
Cada horror vivido se extingue junto al autor de mis pesadillas, el fuego liberador destruye las cadenas que me mantienen atada a un pasado que me atormentaba, dejando en mis manos solo un libro vacío que pretendo llenar con tu nombre escrito en cada página. Alondra Todos los horrores de mi infancia están de vuelta en mi vida, el dolor físico y emocional que experimente, el trauma con el que he vivido durante toda mi visa, el miedo que no me ha dejado vivir a plenitud, todo vuelve y se transforma en mi presente, se aleja de esa distancia marcada por los años y se hace palpable ante mi vista. Pero a pesar de que mis pesadillas se materializan ante mí, lo único que ocupa mi mente es el amor con el que Christopher ha logrado alejar los demonios que me rodeaban, no justifico que se haya aprovechado de mi amnesia, pero tampoco puedo condenarlo, me demostró que si pude ser feliz aunque haya sido una efímera utopía anclada a la triste existencia de mi alma en este mundo. —¿Estás lista par
Haré que el mundo se arrodille delante de ti hasta que entiendan que con la mujer de un hombre que está dispuesto a dar su vida no se deben meter.ChristopherMe quedo mirando hacia el grupo de personas semi ocultas por las sombras, imagino que esperan a que sea yo quien rompa el silencio por lo que me aclaro la garganta y me preparo para hablar.—No es necesario ocultar sus rostros, yo iré con ustedes —alego al ver el aura de misterio con el que se presentan—. Quiero ver muerto con mis propios ojos al malnacido que se llevó a mi mujer —agrego con convicción.—No hemos aceptado el trabajo aún, el hecho de que estemos acá no significa nada, ahora danos toda la información que tienes sobre el objetivo —responde cortante.Les muestro una foto de Alondra en mi teléfono y les cuento todo lo que sé, incluyendo las sospechas del detective sobre el imbécil que la dañó. Reafirmo mi postura de pagar por su servicio y de darle un diez por ciento más si me llevan con ellos, aclarando que es vital