IAN

M*****a sea, en este momento quería golpearme yo mismo, había cometido un gran error, hace un tiempo estuve con Daria en una fiesta y no tengo la mínima idea de como ocurrió pero amanecí a su lado desnudo y no podía recordar absolutamente nada y al preguntarle a Daria me dijo que habíamos estado juntos y en ese momento me sentí realmente fatal, porque lo menos que yo quería era hacerle daño a Violet, yo la amaba aunque aun no se lo hubiese dicho.

Intentaba recordar como termine en la cama con Daria, porque la verdad yo no quería nada con ella ni siquiera me atraía de esa manera, pero por más que lo intentara mi memoria parecía haber sido borrada, lo cual no entendía muy bien porque no recuerdo haber consumido tanto alcohol, al final no me quedo otra opción que creer en lo que me decia Daria que ocurrió y trate de olvidar ese incidente.

No se lo pensaba decir a Violet por más culpable que me sintiera porque tenia miedo de perderla, pero ahora todo esto me explotaba en la cara, Daria se lo había dicho y Violet había reaccionado de una muy mala manera, aun me costaba creer que ella se atreviera a hacer algo como eso.

Ella podía reclamarme, odiarme o pegarme, lo que sea, pero atentar contra la vida de un pequeño ángel era horrible, yo tampoco esperaba a este bebe, pero ahora que este bebe estaba aquí solo podía aceptarlo y rogar que estuviera bien, que no le hubiese pasado nada debido a esa caída.

— ¿Cómo esta ella doctor? — pregunte ansioso, apenas vi que el doctor salió de la sala de emergencias.

— La señorita se recuperara, pero lamento informarle que no pudimos salvar al bebe. — respondió él y mi corazón se apretó, aunque no sabía de su existencia hasta hace unas horas, me sentía afectado, después de todo este niño se suponía que era mi hijo y lo había perdido de esta forma tan cruel, quería tratar de justificar en mi mente la manera de actuar de Violet porque la amo, pero no podía hacerlo, ella había lastimado al único inocente en lo que sucedió.

— Doctor, ¿puedo verla? — pregunte con voz pesada, me sentía muy triste con todo esto que estaba sucediendo.

— En este momento lo mejor es dejarla descansar, más tarde la puede ver. — dijo él y yo asentí.

— ¿Entonces perdió al bebe? ¿Hermano por que trajiste a una chica tan mala a casa? — preguntó mi inocente e imprudente hermana menor.

— Silvana no quiero hablar de esto. — suspire tomando asiento.

— No me importa si quieres hablarlo o no, le tendremos que dar alguna explicación a los padres de Daria, su papá es un gran amigo mío y cuando se entere de lo que la mujer que llevaste a casa le hizo algo como esto a su hija estará furioso, ¿con que clase de mujer te relacionas para ser capaz de hacer algo así? — preguntó él y ya yo sentía que mi cabeza iba a estallar, no quería preocuparme si esto molestaría al papá de Daria o perjudicaría la amistad de ellos, lo único que esperaba era que Daria estuviera bien y pudiera asimilar esto de la mejor manera posible.

— Papá cuando llegue el momento yo le daré las explicaciones correspondientes a su padre.

— Más te vale, porque no pienso perder una amistad de tantos años por tus tonterías y espero no volver a ver a esa mujer nunca más, incluso debería ir a la cárcel. — declaró furioso y yo me tense, a pesar de que Violet se había equivocado y yo me sentía muy molesto, no quería que ella terminara en prisión por esto.

— Claro que debería, no se que estamos esperando para denunciarla. — dijo Dylan.

— Nadie la va a denunciar, yo arreglare esto, así que por favor guárdense sus opiniones que no ayudan en nada.

— ¿Te atreves a defenderla luego de que mato a tu hijo? — preguntó mi padre mirándome con sus ojos ardiendo por la ira.

Por supuesto que iba defenderla aunque no estaba de acuerdo con su comportamiento yo amaba a Violet y con respecto a este bebe apenas me acababa de enterar de su existencia, además ni siquiera podía recordar la manera en que fue concebido y yo no me veía teniendo hijos con otra persona que no fuera Violet.

— Papá déjenme resolver esto y no se metan, luego de que hable con Daria tomare una decisión.— insistí, esperaba poder convencer a Daria que no denunciara a Violet, pero si ella decidía hacerlo había muy poco que yo pudiera hacer, porque Daria era la persona más dañada en esto y no podía obligarla a hacer algo que no quería por más que quisiera proteger a Violet.

— Daria lo mínimo que merece es que tú mismo metas a esa mujer en prisión. — declaró mi padre y decidí ignorarlo, en mis planes no estaba que Violet estuviera en la cárcel y haría todo lo que estuviera en mis manos para impedirlo.

— Papá no se metan en esto. — espete molesto mientras me levantaba de mi asiento, necesitaba alejarme de ellos, respirar otro aire, sentía que me estaba asfixiando.

Mientras me alejaba podía escuchar sus murmullos detrás de mí, pero decidí ignorarlos y seguir caminando, en ese momento comencé a llamar a Violet pero no obtenía ninguna respuesta y luego de unas cuantas llamadas me rendí, suponiendo que debería estar tan molesta que en este momento no quería hablar conmigo, la llamaría luego tenia mucho que explicarle y ella también tenia cosas que explicarme, tenia que justificarme la horrible reacción que tuvo, porque por más molesta que estuviera nunca debió hacer algo así.

…

— Hola, ¿Cómo estas? — pregunte con suavidad cuando entre a la habitación de Daria, por fin me habían permitido verla.

— Mal, perdí a nuestro bebe, no debí decírselo a ella, lo siento tanto. — sollozo Daria y yo tome su mano.

— Cálmate, lo que sucedió no es tu culpa, no podías adivinar que las cosas sucederían así. — La consolé.

— Debí decírtelo a ti primero y ahora por mi imprudencia perdimos a nuestro bebe, estaba tan emocionada de tenerlo y ahora lo perdí. — dijo ella desconsolada entre sollozos.

— No llores, todo va a estar bien, tranquila, ya paso. — le dije y la envolví en mis brazos para que se calmara.

— Ian ella tiene que pagar por lo que hizo. — susurro y todo mi cuerpo se tenso de inmediato.

— ¿Quieres denunciarla?

— ¿No quieres que lo haga? ¿La amas tanto? — preguntó ella separándose de nuestro abrazo para mirarme a los ojos, se veía bastante lamentable y mi corazón se apretó.

Me sentía como un bastardo egoísta al no querer que Violet enfrentara las consecuencias de sus acciones, sin importar todo el daño que hizo, esto no era nada justo para Daria ni para mi hijo, pero, ¿Qué podía hacer? Violet era la única mujer que había logrado enamorarme de verdad, Cloe también me había gustado mucho en el pasado, pero era la esposa de mi hermano y cuando conocí a Violet entendí que con quien debería estar era con ella, había logrado robar mi corazón de inmediato y más ninguna otra mujer me había hecho sentir como ella lo hacia.

— No te voy a mentir Daria, no quiero que la denuncies, pero si decides hacerlo, aceptaré tu decisión. — respondí sintiéndome un completo idiota al atreverme a decirle a una persona que acababa de perder a su bebe que no quería que denunciara a la culpable, no estaba siendo para nada justo con Daria.

— Ian ella mato a nuestro bebe. — me recordó y mi corazón volvió a apretarse.

— Lo se y por eso te digo que no me opondré a tu decisión si eliges denunciarla.

— Eso no es lo que quiero, me gustaría que tú mismo hubieses decidido denunciarla por lo que hizo, pero la quieres mucho, más de lo que me quieres a mí. — dijo Daria con una sonrisa triste.

Ella tenía razón, yo no me sentía capaz de denunciar a Violet, porque la amaba mucho y si, más de lo que quería a Daria, porque Daria para mi era gran amiga, pero nada más, yo no la veía de la misma manera que veía a Violet.

— No digas eso, es un amor diferente, yo te quiero mucho, hemos vivido muchas cosas de desde que éramos unos niños, pero con Violet las cosas son diferentes. — le dije acariciando su cabello.

Con Violet todo era único, más bonito, en el pasado con las mujeres que me topaba solo sentía deseo, pero a Violet no solo la deseaba si no que había algo más desde que la conocí, además mi deseo por ella no se podía comparar con nada que hubiera sentido por otras mujeres. Violet despertaba en mí cosas que ni siquiera entendía y lo quería todo con ella, tenía claro que no la quería cerca de nadie más, me sentía muy posesivo e incluso celoso si un hombre se le acercaba y esto era algo que nunca había sentido con otra mujer.

— ¿Diferente? ¿Esa es una forma de decir que a ella la amas y que a mí nunca me amaras? — cuestionó ella y me quede en silencio, no le podía dar la respuesta que ella quería, Daria quería que le contestara que si podía amarla de la manera que amo a Violet, pero esto nunca podría ser así, ya nosotros habíamos intentado una relación hace más de un año y nunca me sentí bien en ella, para mí solo era sexo aburrido porque ni siquiera deseo sentía de estar con ella y solo lo estaba intentando por Daria, para no romper su corazón, aunque cuando ya no lo pude soportar más, igual lo hice.