IAN
— ¿Cómo estas? — pregunté sentándome al lado de la cama de Daria luego de haber entrado a su habitación, ella apenas y salía de aquí y a pesar de que yo no quería venir por el percance que había tenido con su padre, lo tenía que hacer, Daria no dejaba de llamarme pidiéndome que viniera.— Me he sentido muy mal Ian, no se como hacer para superar esto. — dijo ella con su voz apagada.— Todo es poco a poco Daria, podrías ir a un psicólogo para que hables de ello y así ir superándolo. — sugerí.— ¿Cómo supero que por culpa de Violet perdí a mi bebe? — preguntó ella con sus ojos cristalizándose.No sabia que decirle, aunque me dolía la perdida de este niño, yo no lo esperaba, no tenia planes de tenerlo en mi vida, fue demasiado inesperado y solo supe de él pocas horas antes de que se fuera, yo no podía saber como Daria se sentía, además que mi amor por Violet era más grande y aunque estaba molesto por lo que sucedió y esperaba que ella pudiera explicarme las cosas, no podía culparla solo a ella, porque lo de Daria y yo nunca debió suceder y ella tampoco tenia porque decirle nada a Violet de la manera en que lo hizo, todos cometimos errores y lamentablemente el costo fue la vida de un inocente.— Daria se que es muy difícil lo que estas sintiendo, pero creo que lo mejor es ir con un psicólogo, te podría ayudar mucho. — insistí y ella negó con la cabeza antes de derrumbarse a llorar metiendo su rostro en sus manos.Me costaba mucho verla así, no me gustaba verla sufrir, yo la quería, después de todo teníamos una amistad de muchos años, pero aun así yo nunca podría darle lo que ella deseaba de mí.— Cálmate por favor, no es bueno que te pongas así. — dije acariciando su cabeza.— Ian, ¿sigues amándola verdad? ¿No importa que sea la responsable de la muerte de nuestro bebe? — preguntó ella levantando su rostro para mirarme a los ojos, con los suyos surcados por las lagrimas.La respuesta era clara en mi mente, si, por supuesto que aun la amaba y si me importaba lo que hizo, pero no podía dejar de amarla por esa razón, lo que sentía por Violet era demasiado fuerte como para desaparecer de la nada, ni si quiera que se negara a verme y que aparentemente estuviera saliendo con alguien más me hacía dejar de amarla, eso si, me estaba volviendo loco de rabia y celos, pero estaba tratando de darle su espacio para que pensara las cosas y que por fin aceptara escucharme.– Daria deja de torturarte con estas cosas, no te va a hacer ningún bien. — aclare y ella me dio una sonrisa triste antes volver a acostarse, dándome la espalda.– Que descanses. — susurre antes de levantarme para irme y ella volvió a voltearse.– No te vayas, quédate conmigo un rato más por favor. — pidió.– Tengo que irme, hay unas cosas que tengo que hacer en la empresa. — me excuse, la verdad es que no tenia ganas de pensar más tiempo con ella, estos últimos días la había tenido que ver demasiado.– Esta bien. — aceptó con ojos tristes, pero yo no iba a detenerme hoy por eso, también tengo otros problemas, también estoy triste porque aun no he podido hablar con Violet.– Adiós, cuídate mucho y piensa lo del psicólogo. — le dije y la vi asentir antes de irme.Cuando voy a bajar las escaleras puedo escuchar la voz molesta del padre de Daria, justamente con quien no quería encontrarme ya esta aquí, pero antes de empezar a bajar los escalones, escucho algo que llama mi interés.— ¿Hiciste lo que te pedí? Quiero que la policía empiece a investigar y arresten a esa mujer cuanto antes. — declaró y algo me dice que se esta refiriendo a Violet, yo no puedo permitir que algo así suceda.— Si señor, ya se hizo la denuncia, ahora hay que esperar. — escuche responder a otra persona, puedo suponer que es su abogado.M*****a sea.Este hombre no escucho a su hija ni a mí, quiere que Violet pague por lo que hizo, pero yo me niego a dejar que la metan en la cárcel, esto de darle tiempo para que se calme ha terminado, tengo que ir a hablar con ella apenas salga de aquí.— Esta bien, entonces ya puedes irte. — dijo Howard.— No creo que sea buena idea lo que hizo. — dije mientras bajaba las escaleras y él volteó a mirarme frunciendo el ceño.— ¿Tu padre no te enseño a no escuchar conversaciones ajenas? ¿No tienes modales? — pregunto molesto, mirándome con rabia, antes de que sucediera lo del bebe, él y yo teníamos una relación un poco más cordial, pero nunca fue del todo buena porque Daria estaba enamorada de mí y él quería que me casara con ella para que así Daria pudiera estar feliz, pero eso fue algo que yo nunca iba a aceptar, porque ella podía ser feliz estando conmigo, pero yo no iba a ser feliz estando con una mujer que ni siquiera deseaba de manera sexual, solo podíamos ser amigos y nada más, solo que ellos nunca lo entendieron, ella se aferraba a mí y su padre a complacer a su hija.— Por supuesto que lo hizo, yo solo venía hacia acá y escuche sin querer su conversación, pero eso no es lo importante, lo que en realidad importa es que su hija no quiere denunciar a Violet y usted lo esta haciendo de todos modos. — espete molesto mirándolo con frialdad, a mi no me importaba si él se sentía ofendido o algo, nunca me ha importado como se sientan las personas a mi alrededor con lo que digo o hago.— Mi hija solo esta cegada por su amor por ti y tu por tu amor por esa mujer, los dos están equivocados, ella tiene que pagar. — Sentenció.— Haz lo que quieras, pero tienes que recordar, si haces algo equivocado tú, alguien más te pude hacer pagar de la misma manera. — Advertí, antes de avanzar hacia la puerta.— ¿Eso es una amenaza? — preguntó tensándose, aunque él era amigo de mi padre, yo era su hijo después de todo, así que tendría que estar de mi lado si era necesario que escogiera un lado y sabe que él podría ser aplastado por mí, incluso sin que mi padre me ayude, porque su empresa era un poco más pequeña que la mía, ni que decir nuestra empresa familiar, de la cual él estaba dependiendo en gran medida para mantener la suya a flote, podría hundir su vida al solo eliminar los negocios que tiene con la empresa familiar.Claro que yo no iba a hacer nada aun, Violet se había equivocado y si las cosas se hacían de manera correcta yo no lo tocaría, pero si intentaba sobornar a alguien para que ella fuera a prisión sin que la investigación la inculpe del todo, yo también lo haría pagar a él este error, mientras las cosas se lleven de forma adecuada, con buenos abogados ella no pasaría la cárcel, quizás tendría que hacer algún trabajo comunitario, pagar indemnización o algo así, por eso le advertía a Howard que no hiciera nada erróneo, por ahora aunque quería no lo podía detener, porque mi padre también estaba de acuerdo en denunciar a Violet.— No, es un simple recordatorio. — respondí, antes de salir de ahí, me subí al auto y conduje directamente a casa de Violet, tenía que contarle sobre esto y luego llamar a un abogado o dos, para que ella les contara lo sucedido, para que la defiendan en caso de que se llegue a juicio.Llegue y me baje, un poco ansioso por verla y también nervioso por miedo a que ella se vuelva a negar o que una vez más no este en casa.— ¿Qué haces aquí? No eres bienvenido. — preguntó Steve al abrir la puerta.— Necesito hablar con Violet, es importante, dile que salga.— Ella no quiere verte más, ¿Cuándo lo vas a entender? — pregunta molesto y yo también empiezo a enfurecerme.— Steve, llámala tú o yo mismo voy a pasar. — Advertí, ya estaba harto de esta estupidez, si ella no quería verme más que saliera y me lo dijera en persona, de esa manera me alejaría, no por medio de este hombre.— ¿Te crees muy superior por tener dinero no es así? Pero te diré algo a Violet no le importa eso y no te quiere más en su vida. — dijo él e intento cerrar la puerta en mi cara, pero yo metí mi pie para detenerlo.VIOLET Creí escuchar la voz de Ian y de inmediato me puse nerviosa, así como pude me levante de la cama, era difícil con mi pierna como estaba, pero afortunadamente mi habitación era bastante pequeña, por lo que la cama estaba bastante cerca de la puerta, así que al llegar ahí, lo primero que hice fue pasar el cerrojo para que no se pudiera abrir y pegue mi oreja a la puerta para intentar escuchar con claridad lo que decían.— Quiero que eso me lo diga ella, no tú, si no quiere verme más espero escucharlo de su boca. — escuche a Ian con mucha claridad, por lo que debería estar gritando, así que mis nervios se dispararon, yo no quería que él me viera como era ahora, me avergonzaba bastante mi nuevo aspecto, ya no estaba la belleza que antes Ian admiraba, era mejor dejar que él se quedara con la imagen de lo fui. — Ella no quiere decírtelo, no quiere verte, vete de una vez. — replicó Steve con clara molestia en su voz y luego escuche como un golpe y el grito de Steve.— Imbécil, ella
IANElla lo había decidido, no podía hacer nada más despues de escuchar esas palabras de su boca, por más que quisiera insistirle para no perderla, no podía seguir humillándome así, ella ni siquiera quiso darme la cara, así que todo estaba perdido, ahora lo único que podía hacer por ella era ayudarla a conseguir un buen abogado si decidía llamar a mi asistente, porque ya yo no podía seguir intentando acercarme a Violet solo para que me rechazara, tenía que olvidarla. En este momento sentía un enorme dolor en mi pecho, ya no sabía que hacer, nunca había amado a ninguna mujer de esta manera y ahora tenia que dejarla ir, era demasiado para mí. No sabía que hacer, me sentía perdido y vació, antes pensaba que aun había una salida, que Violet y yo podíamos arreglar las cosas, pero no era así y eso me estaba matando. — ¿Qué sucede? — dije cuando conteste la llamada de Dylan. — Hermano, ven a casa, papá esta furioso, Howard dijo que lo amenazaste, quiere que vengas ya. — Ya
VIOLET Estos días ya empezaba a tener un poco más de movilidad en mi pierna, pero ahora tenía que empezar a ir a terapia para que vuelva a tener la misma movilidad, eso me había dicho el doctor ayer cuando fui a mi cita, pero la verdad es que yo no quería ir, no quería seguir gastando el dinero de mi familia y tampoco quería que las personas vieran mi cara, yo no soportaba verme en el espejo y me imagino que la gente tampoco lo haría.Bueno es que ni mi madre podía hacerlo, siempre que me miraba a la cara podía ver como sus ojos se cristalizaban a pesar de que ella siempre lo intentaba disimular, mi padrastro no era mucho mejor en esto, él fruncía el ceño e intentaba no verme mucho a la cara, el único que actuaba medianamente normal en cuanto a mis cicatrices era Steve, pero se había vuelto un poco diferente conmigo en este tiempo, mucho más protector e intentaba estar más cerca de mí todo el tiempo. Nada podría ser igual que antes, mi familia ya no era la misma, yo no era la misma,
IANAunque hoy no tenia ganas de hacer nada y mucho menos tener que ver a mi padre, lo haría, mi mamá me había llamado para invitarme a una cena, Matthew, Cloe y el pequeño Michael irían a cenar, mis padres intentaban desesperadamente que Matthew se sintiera bien estando con nosotros. Para mí era raro enterarme de que tenia un medio hermano mayor que yo a esta edad, pero no me desagradaba la idea, de hecho incluso conociéndolo me agradaba un poco, ni que decir de su esposa, ella me había gustado antes, pero eso ya esta en el pasado y su pequeño hijo era un encanto, era bueno tener a un niño corriendo por ahí, asistiría a esta cena más que todo por ellos y mamá, sabía que ver al pequeño Michael corriendo por ahí podría ayudarme a levantar un poco mi ánimo. Todavía me sentía demasiado vacío debido a la ausencia de Violet y a veces sentía que ya no aguantaba más y la tenia que ir a buscar, incluso hace dos noches llegue a su casa, pero antes de bajar me contuve y solo permanecí por un
IANNo podía aguantar más mi rabia y empecé a caminar de prisa hacía el interior de la casa, en este momento sentía que quería golpear a mi hermano, me costaba creer como había sido capaz de atreverse a hacerle algo así a Violet.— Ian espera. — escuche a Matthew llamar, pero lo ignore y seguí avanzando y cuando vi a mi hermano menor sonriendo alegremente mientras hablaba con Daria, mi furia creció y me acerque a él para levantarlo por el cuello de la camisa. — Hermano, ¿Qué haces? — preguntó Dylan sorprendido y confundido.— Ian suelta a tu hermano ya. — ordenó mi padre, pero definitivamente no le haría caso. — ¿Quién te crees? ¿Con que derecho echaste a Violet de aquí? — cuestioné furioso y él abrió los ojos sorprendido por mi pregunta. — Hermano ella hizo que Daria perdiera a su bebe, no merecía estar aquí. — Masculló Dylan molesto y yo estrelle mi puño contra él. Él no tenia ningún derecho a hacer algo así, yo la había traído aquí, antes de hacer cualquier
VIOLET Mi pierna ya estaba mejorando un poco, pero las cicatrices de mi rostro y corazón seguían ahí, igual de dolorosas y feas, mi corazón nunca dejaba de doler y cada vez que veía mi cara me daban ganas de llorar, había estado usando unas cremas para las cicatrices, pero no habían ayudado en nada.A pesar de todo esto, yo estaba intentando ser menos dependiente, estaba usando las muletas en lugar de la silla de ruedas para andar en casa y ya estaba saliendo un poco más de mi habitación, por mucho que doliera todo, tenia que intentar volver a adaptarme, no podía permanecer eternamente escondida en mi habitación. — Que bueno que saliste mi niña, siéntate, te voy a servir el desayuno. — dijo mi mamá con una pequeña sonrisa cuando me vio entrar a la cocina, ya sus ojos no se cristalizaban al verme, lo cual me hacía sentir mejor, era un avance. — Esta bien. — accedí y deje las muletas a un lado y en ese momento escuchamos tocar la puerta. — Yo voy, tú no te preocupes.La
IAN No se porque, pero hoy me sentía peor que nunca, tenia una fuerte opresión en mi pecho, un mal presentimiento, tenia muchas ganas de ir a ver a Violet, pero trataba de ignorar esto, aunque cada vez se hacía más difícil. — Señor Salvatore, hay una mujer abajo en recepción que dice que necesita verlo urgente. — informó mi secretaria cuando atendí la llamada. No sabía quien era, pero yo no estaba esperando a nadie y no tenía tiempo para esto, tal vez era una persona buscando trabajo y creen que hablando directamente conmigo tendrían más posibilidades de conseguirlo, ya he pasado por estas situaciones o también podían ser mujeres con las que salí antes, buscándome. — No estoy esperando a nadie, no la atenderé. – Colgué la llamada y volví a enfocarme en mis documentos, pero una vez más el teléfono volvió a sonar. — Señor Salvatore, discúlpeme la insistencia, pero ella se ve muy desesperada, dice que es urgente, que le interesa escucharla, su nombre es Clarissa, dice qu
IAN — Lo siento señora Clarissa, pero yo no me voy a ir, yo quiero estar con su hija si ella me lo permite. — asegure y ella no dijo nada más. Cuando llegamos a la estación, baje de prisa de mi auto y conseguí que me dejaran pasar al interior de su celda para verla. Mientras me dirigía hacia ahí sentía mi corazón latiendo a toda maquina, tenia miedo, no sabía cuando con exactitud ha sufrido ella por mi culpa y me aterraba que me odiara. Al llegar a la celda en silencio junto al policía que me acompañaba la vi, pero no podía ver su cara porque ella estaba durmiendo y tenia todo su hermoso cabello rojo sobre su rostro. Estaba ansioso por acercarme a ella y apretarla en mis brazos, para luego sacarla de este horrible lugar, ella no debería estar aquí.El oficial abrió la celda tratando de hacer el menor ruido y así mismo la cerro, dejándome en el interior de esta y yo avance con lentitud hacía Violet, con todo mi cuerpo tembloroso, era realmente extraño, muy pocas cosas me asustab