VIOLET Mi pierna ya estaba mejorando un poco, pero las cicatrices de mi rostro y corazón seguían ahí, igual de dolorosas y feas, mi corazón nunca dejaba de doler y cada vez que veía mi cara me daban ganas de llorar, había estado usando unas cremas para las cicatrices, pero no habían ayudado en nada.A pesar de todo esto, yo estaba intentando ser menos dependiente, estaba usando las muletas en lugar de la silla de ruedas para andar en casa y ya estaba saliendo un poco más de mi habitación, por mucho que doliera todo, tenia que intentar volver a adaptarme, no podía permanecer eternamente escondida en mi habitación. — Que bueno que saliste mi niña, siéntate, te voy a servir el desayuno. — dijo mi mamá con una pequeña sonrisa cuando me vio entrar a la cocina, ya sus ojos no se cristalizaban al verme, lo cual me hacía sentir mejor, era un avance. — Esta bien. — accedí y deje las muletas a un lado y en ese momento escuchamos tocar la puerta. — Yo voy, tú no te preocupes.La
IAN No se porque, pero hoy me sentía peor que nunca, tenia una fuerte opresión en mi pecho, un mal presentimiento, tenia muchas ganas de ir a ver a Violet, pero trataba de ignorar esto, aunque cada vez se hacía más difícil. — Señor Salvatore, hay una mujer abajo en recepción que dice que necesita verlo urgente. — informó mi secretaria cuando atendí la llamada. No sabía quien era, pero yo no estaba esperando a nadie y no tenía tiempo para esto, tal vez era una persona buscando trabajo y creen que hablando directamente conmigo tendrían más posibilidades de conseguirlo, ya he pasado por estas situaciones o también podían ser mujeres con las que salí antes, buscándome. — No estoy esperando a nadie, no la atenderé. – Colgué la llamada y volví a enfocarme en mis documentos, pero una vez más el teléfono volvió a sonar. — Señor Salvatore, discúlpeme la insistencia, pero ella se ve muy desesperada, dice que es urgente, que le interesa escucharla, su nombre es Clarissa, dice qu
IAN — Lo siento señora Clarissa, pero yo no me voy a ir, yo quiero estar con su hija si ella me lo permite. — asegure y ella no dijo nada más. Cuando llegamos a la estación, baje de prisa de mi auto y conseguí que me dejaran pasar al interior de su celda para verla. Mientras me dirigía hacia ahí sentía mi corazón latiendo a toda maquina, tenia miedo, no sabía cuando con exactitud ha sufrido ella por mi culpa y me aterraba que me odiara. Al llegar a la celda en silencio junto al policía que me acompañaba la vi, pero no podía ver su cara porque ella estaba durmiendo y tenia todo su hermoso cabello rojo sobre su rostro. Estaba ansioso por acercarme a ella y apretarla en mis brazos, para luego sacarla de este horrible lugar, ella no debería estar aquí.El oficial abrió la celda tratando de hacer el menor ruido y así mismo la cerro, dejándome en el interior de esta y yo avance con lentitud hacía Violet, con todo mi cuerpo tembloroso, era realmente extraño, muy pocas cosas me asustab
VioletEscuché lo que me dijo, lo sentí acercarse, pero lo ignore, porque a pesar de que él ya había visto mis cicatrices no estaba segura si las había visto bien y yo no pude ver la expresión que tenia él al verme por la rapidez con la que actúe al taparme, pero estaba aterrada de que me viera completamente y yo de que al ver sus ojos notara repulsión en ellos. Esto me asustaba mucho, ni siquiera las palabras que me dijo podían calmar mis miedos, es que no conseguía creerle, no estaba segura si las podía estar diciendo por lastima, él nunca me había dicho que me amaba antes, ¿Y lo dice ahora de la nada? No tiene sentido. — Violet, ¿estas bien? — preguntó él aparentemente preocupado, intentando darme la vuelta. — Estoy bien, déjame tranquila por favor, solo vete y yo saldré más tarde. — dije en voz baja, tratando de no llorar más. — Violet ya tu fianza esta paga, necesito que salgas de aquí conmigo. — insistió él.Parecía que él no se alejaría y lo mejor era salir de e
IAN— Callate. — rugí al darme cuenta de que sus estúpidas palabras habían afectado a Violet, no me importaba lo que él me dijera a mí ni como me insultara, porque me merecía eso y más, pero que él se atreviera a reclamarle algo a ella recordándole lo que pasó me hacía querer matarlo. — No vuelvas a hablarle así. — Lo… lo siento Violet. — Tartamudeo un poco arrepentido al ver la cara de Violet. — Voy a salir de aquí, no quise ofenderte. Después de haber dicho esto él salió casi huyendo, dejándonos confundidos y yo me acerque a Violet y me acuclille a su lado, ver la carita que tenia en este momento hacía que mi pecho se oprimiera, no podía respirar bien y mi corazón dolía. — Violet no le hagas caso a lo que dijo, él solo estaba molesto. — dije luego de tomar sus manos y llevarlas a mi boca para besarlas. — Voy a volver a mi habitación. — Pronunció con voz apagada. — Esta bien, te llevare ahí. — le dije y la cargue, aunque frunció el ceño no dijo nada, parecía
IAN— Que bueno que viniste a verme por fin. — dijo Daria con una sonrisa cuando apenas me vio entrar a su habitación. Esa sonrisa se borraría luego de que le dijera la razón por la cual vine. — Daria necesito hablar algo muy serio contigo y espero que seas sincera. — dije caminando hacia ella, tratando de mantenerme tranquilo y no explotar contra ella antes de tiempo.— Esta bien, ¿de que se trata? — preguntó confundida. — ¿Tú fuiste quien ataco a Violet no es así? — cuestione apretando los dientes, porque por su mentira Violet había salido muy lastimada, gracias a esa mentira se habían desencadenado muchas cosas malas para Violet y era algo que yo no podía soportar.— No, por supuesto que no, ¿Por qué preguntas algo así? Yo fui quien se lastimo. — respondió ella afligida como si estuviers a punto de llorar, pero esta vez no logro conmoverme, no le creía. Ya Matthew me había dicho que debería tener cuidado con ella, que no debería creerle todo, que no debería
IAN — Que bueno que viniste, estaba por llamarte, ¿Cómo te atreves a hacer lo que hiciste? — preguntó mi padre apenas me vio entrar a su casa.— ¿Dónde esta Dylan? — cuestioné al no verlo en la sala. — Te hice una pregunta. — Masculló mi padre furioso. — Te diré porque lo hice, porque él se atrevió a desafiarme, se metió con Violet a pesar de que le había dicho que no lo hiciera y le pedí que retirara la denuncia y se negó. — explique tratando de mantenerme calmado, a pesar de que él y yo no estábamos en un buen momento, no quería faltarle el respeto. — Esa maldita mujer de nuevo, ella…— No te atrevas a maldecirla una vez más. — lo interrumpí furioso, si tan solo no fuera mi padre ya me hubiese lanzado hacia él para golpearlo. — ¿O que? ¿Me vas a pegar también a mí? — cuestionó desafiante. — Es hora de que se calmen, ya dejen de pelear. — dijo mi madre nerviosa acercándose a nosotros. — No, pero oficialmente me perderás como hijo, después d
VIOLET— Violet, ¿en serio piensas permitir que ese hombre siga viniendo aquí luego de lo que te hizo? — preguntó Steve mirándome molesto. — Se que dije cosas incorrectas el otro día y lo siento por eso, pero estoy muy molesto por la presencia de Ian aquí, por eso dije esas cosas. Yo podía entender su molestia y no lo culpaba por eso, pero aun me dolía, ahora me costaba mucho más mirarme al espejo y como él me había dicho que seguía siendo hermosa al igual que Ian, luego de sus palabras se me hacía mucho más difícil conseguir creerle a cualquiera de los dos. Steve con eso que dijo me había demostrado que él en realidad no pensaba que me siguiera viendo hermosa, que solo me lo había dicho para que no me sintiera mal y supongo que Ian hizo lo mismo que él.— Steve deja a Violet tranquila, él nos esta ayudando con los abogados. — intervino mi madre y él la miro frunciendo el ceño.— Yo se que la esta ayudando y es lo mínimo que puede hacer y no por eso hay que soportar que venga a mole