Katlyn se levanta y grita.. —¡Se desmayó!...—¿Pero qué le pasó?...¡Papá habla di algo!...¡Román! —¡Todo pasó tan rápido!—murmuraban. El asombro abrumó a todos menos a una, que se apartó fluida y fría, ante lo inesperado. Ya Reishel estaba abajo, inmediatamente tomó todas las previsiones conocidas… —¡¡Por favor déjenme hacer mi trabajo!—Reishel se lanza y se interpone. Úrsula todavía fumando; se mantiene retirada para ver todo desde cierta distancia, y observar; sobre todo a Reishel...cómo actúa, cómo se comporta… Mauricio baja hasta donde está Reishel a gachas… —¿Qué hacemos Reishel?... Román muy exaltado... —¡PAPA!...¡Reacciona viejo!...¡Llamen a una ambulancia, América! Reishel lo sigue examinando, le retira todo lo más rápido posible; trata de oír su corazón...y su diagnóstico es muy firme… —¡ES UN INFARTO!...¡Hay que llevárselo de inmediato! Empezó a realizar el RPI pero nada… —¡La ambulancia ya viene en camino!—dice América. Apenas llegó Reishel colaboró con los enf
—¡Papá!...¿Qué dices? La enfermera entra y le habla a Román con serenidad… —¡Llama a la pelirroja! Ella me dijo su nombre Reishel…pero el no se puede alterar, cuando la nombra ¡salta el cardiograma! —¡Papá cálmate,—Román no se contiene—¡Papito te amamos cálmate!... —¡Vamos!—la enfermera lo ayuda a retirarse. Una vez afuera, Román habla con Katlyn… —¡Vamos poco a poco, pero lo que me extraña y mucho, es que está llamando a Reishel! —¿Reishel la asistente de Mauricio? —¡Si! —¡Yo quiero entrar! —¡Pase señorita! Katlyn entra y se acerca, le toca la mano… —¡Papá!..¡Te queremos mucho, cálmate, tienes que tranquilizarte!... —¡Rei…. Shel! —¡Pero papá!, ¿qué estás diciendo?... ¡ella está con Mauricio…tranquilo!—... —Kathlyn se desconcertó aún más. La enfermera le indica que tiene que salir y afuera está esperando su turno Amanda, y Kathlyn sale… —¿Dime Kathlyn que le pasó a mi Pakito? —¡Le dió un infarto en la oficina!... —¡Ay no! ¿Y qué dicen los médicos? —¡Tiene que tranqu
No, no era posible esperar más…sus labios se desplegaron y se desborda la ternura.Vivir lo que estaban sintiendo, era para no querer despertar…Reishel correspondió como lo sentía, y alargó el momento, Mauricio la tenía abrazada con lazos de fuego, atrapada y sin salida, el corazón pujante; el recorrido de una corriente palpitante y el disfrute de sentirse ambos parecía no sólo Ineludible, indetenible, desbocado, no era para ser breve, y lo dejaron alargar…mirarse, sentir el pecho del otro, y suspirar hondo, el olor de su pelo, de su ropa, sentir la suya das de la piel, y estar así en el calor de un abrazo, era conocer la felicidad…El instante parecía un vuelo que hicieron los dos hacía otro lugar, se escaparon con besos y retoques de sus cuerpos,con la fuerza de sus corazones, se elevaron diciendo y contándose todos los secretos…pero cesaron y finalizaron tocando sus cabezas, mirándose a los ojos, y sonriendo…Mauricio le habla muy bajito…—¡No creo que debas subir!Ella le devue
Mauricio se sentía entre las nubes, suspiraba y recordaba cada segundo que había pasado con Reishel, todavía no creía lo que había sucedido, ahora tenía que pensar mucho cómo iba a manejar la situación, era maravilloso ese momento de sinceridad que tuvieron los dos, todo lo que se habían dicho sin palabras…y se repetía en el pensamiento… ***¿Por qué no?...¿Porque no?...¡Tengo derecho a ser feliz!...¿Pero y si la perjudicó?...¿y si Úrsula le hace daño?...Úrsula, qué error, ¡y es capaz de todo!*** Llegó caminando muy sigilosamente, se quitó los zapatos y andaba muy cuidadoso en las puntillas, por nada del mundo quería despertar a Úrsula; que tampoco llegó temprano. Mauricio toma un respiro y abre la puerta con sumo cuidado…¡Para perder el tiempo! Úrsula lo estaba esperando, sentada bajo la penumbra de una lámpara de su mesita de noche, vestida sexy, con algo en mente, y vuelve a lo mismo… Realmente estaba furiosa y tenía ganas de gritarle, de azotarlo, de empujarlo, la voz no lo di
El médico de cuidados especiales hablaba con Román y Katlyn, sobre las indicaciones que tenían que seguir acerca del estado de salud del señor Rubén Santillano. —¡Tenga, aquí tiene!..todos los récipes, déjelo, hoy todo el día y mañana por la tarde se lo puede llevar!, en este momento lo están trasladando a una habitación del segundo piso, para cuidarlo hasta mañana. ¡Y ya pueden conversar con él, pero ya saben nada de emociones fuertes, mucha paz y tranquilidad! —¡Muchísimas gracias doctor!—admitió Román. Luego Román y Katlyn se retiraron y se encontraron con el resto de las personas que estaban preocupados por la salud de Rubén. Amanda se levanta… —¡Katlyn dime!...¿Cómo está mi Pakito? Kathlyn les da las indicaciones… —¡Ya lo podemos ir a ver, pero tú, por favor, te tienes que comportar, no lo sobresaltes, vas a estar tranquila, serena, lo saludas natural, nada de brinquitos, ni de escándalos, ¡¿Estamos claros Amanda?! Contesta porque si no, te quedas afuera—Katlyn le dice c
Luisa Camacho vivía en el barrio cerca de Reishel, tenía muchos problemas, uno de sus hijos estaba enfermo de Sida, y el tratamiento era bastante costoso, homosexual, promiscuo,y muy querido, contaba con una familia que lo amaba y luchaban todos para comprar lo necesario y salvar su vida, el alcalde a veces ayudaba, pero no era suficiente, tenía que buscar otras entradas. Luisa era muy buena vecina, trabajaba en casa de familia, y sus otros hijos también tenían compromisos se habían estabilizado y también tenían sus hijos, además de esto , Luisa tenia una hija de dieciocho años,Paula, que era muy bonita, la menor, y Luisa su mamá, vive aterrada, porque Paula ahora es en una chica muy llamativa,ella sale va al liceo, pero todos alerta, porque también la tienen que cuidar de los maleantes del barrio. El tuerto tiene chantajeada a Luisa, y ella no tiene para pagar los intereses.Luisa veía a Reishel entrar y salir, sabía que ella tenía un corazón de oro pero no sé atrevía a molestarla
Mauricio mira a Reishel a los ojos y ella en los de el, encuentra una dulzura que le amilana el corazón… —¿Estás segura, que es eso lo que quieres? El corazón de Reishel da un gran pálpito; una sensación que nunca había experimentado antes; un vértigo inusual que no era propio de su carácter, pero era necesario, no dejarse llevar por los sentimientos, y abrirse paso con frialdad. Es cierto, ese hombre que está frente a ella, es el ser que en muy poco tiempo ha logrado lo que nadie; meterse muy hondo en el alma, deseaba muchas cosas con el, deseaba "todo", con él; ¡y quería!…si quería… llevarlo todo hasta el final,> pero también sería estrechar más sus lazos amorosos, sufrir, y padecer sabrá Dios, qué consecuencia...Reishel…pensaba y pensaba… —¿Entonces?...¡¿No me dices nada?! Ella le responde… —¡Vamos a tomar distancia por un tiempo, creo que debemos ser prudentes, mi madre, tu familia, nosotros, ya sé
La clínica estaba llena de gente, ya había pasado el mediodía y todos se sentían extrañados, porque Mauricio no había retornado; Kathlyn sobretodo, se quejaba…—¡Pero que solidario Mauricio, Úrsula… ¡Y la pelirroja esa!, después de tantas atenciones, se esfumó!Román replica…—¡Aquí lo más importante es mi papá, y es cuestión de horas, que esté con nosotros en nuestra casa!—¡Eso es lo más importante!Intervino Amanda…—¡Ya mi Pakito estará de nuevo conmigo!En familia estaban haciendo muchos comentarios, y de forma misteriosa, se acerca un individuo, un hombre, con lentes oscuros; luciendo un sweater que cubría su cabeza con un gran capuchón y se termina de acercar a Kathlyn…—¡Buenas tardes!...¿Cómo sigue el señor Santillano?—¿Disculpa?...usted, ¿Quien es?... pregunta Kathlyn.—¡A pues!...me vine así…para evitar al público…¡Soy Nemesio Lanz!—¡Ay hermano bienvenido!—Salta Román y le da la mano—¡Gracias por venir amigo!—¡Estoy muy preocupado, y no me pude contener!