Lauren
Una de las cosas que más duelen es recordar un amor que dejó huella y recuerdos bonitos, esa sensación de ahogo suele ser duro, tan duro que cuesta respirar y solo deseas llorar al traer de regreso esas imágenes e incluso esa voz que jamás olvidaras.
—No es difícil, hob, pero si no quieres contestarme no pasa nada.
—Amir lo que preguntas es imposible, un muerto no puede regresar de la muerte.
—Lo pongo en duda, mírate eres el claro ejemplo, Lauren.
—Lo mío fue diferente.
—Vale, si me dices que es imposible es porque ser&aacu
AmirVer el rostro de mi mujer al oír el porqué Dina vino a buscarme era lo más divertido que vería a lo largo del día, me encantaba su reacción y sobre todo su ataque de celos que intentaba disimular.—¿Estás bromeando?—No estoy bromeando, habibati.—¿Qué mierda estás diciendo, Amir?Y es que no podía parar de reírme. —Ven entremos.—¿Te lo estás pensando no?Por supuesto que no, no se me pasaría por la cabeza, hoy en d&iac
LaurenSoy de las personas que sienten celos por cualquier tontería y más amando con tanta intensidad, detesto a esa mujer que se le ofreció a mi esposo, como si fuera fácil competir con Lauren, no me conocen y por Amir sacaré las garras y les mostraré la fiera que esconde mi interior aunque pensándolo y viendo las circunstancias no creo que Amir vuelva a darme celos.—En serio que estás enfermo, no bromees con eso, Amir— dije al verlo en la cama y bien arropado.—Tranquila que se me quedó claro que no debo jugar contigo— me eché a reír.—Lo siento— entre bajo el edredón y él me arropó con su cuerpo.—Quien diría que acabaría echado a la calle por mi mujer.Solté una carcajada.—Eso para que aprendas a no jugar con mis celos, creo que es lo peor qu
AmirVer el dolor en la mirada de Lauren era como verme a mí mismo el día que me enteré de que no había muerto, el día que la vi en la habitación de hotel sin ni un solo rasguño y como me sentí engañado, ahora mismo lo ve reflejado en sus ojos y es algo que me destrozaba, porque me di cuenta y no hoy, sino hace días que ella era una víctima más y no solo yo.Lauren lleva siendo la víctima de Laura desde hace años incluso antes de darse por muerto este desgraciado.—Buenos días— saludo al abogado el cual ya sabía que era el ex amor de mi esposa y que nunca murió.¿Y cómo lo supe?Después de enterarme del engaño de Lauren y su hermana, mande a que investigaran tanto la vida de mi esposa como la de su difunta hermana y muchas sorpresas fueron destapadas ante mí y una de e
LaurenPor muy complicado se nos vuelve todo sé que no hay mal que por bien no venga, el golpe de ver a Iván frente a mí ha sido lo peor que podía pasarme, pero también sé que su amor fue inexistente, nunca me quiso y eso se notó por todos estos años que pensaba que era mi ángel, por recordarlo y en realidad no se merecía nada que viniera de mí.—Amir— me acerqué a él al verlo sentado en el sofá.—Hola, mi amor. ¿Te sientes mejor?Negué y este se alzó para abrazarme. — Solo quiero llorar, solo quiero cerrar los ojos y al abrirlos todo esto fuera solo una pesadilla.Su mano acaricia mi cabello mientras aún me retenía entre sus brazos.—¿Vale la pena, hob?Volví a negar.—Así es, no vale la pena pensar en lo que no se merece n
AmirDicen que hay que diferenciar entre los que te sonríen con maldad y los que te felicitan de corazón, también suelen decir que no existe malicia en nuestros actos, que estos se dieron porque así lo deseábamos, pero quiero corregir eso, nuestros actos nos llevaban a dejar de pensar en los demás para pensar en nuestra felicidad, total puro egoísmo, pero cuando esa persona que lastimas nos dio todo y lo único que recibe de nosotros es un engaño de tal calibre entonces esos actos están llenos de crueldad, inmoralidad y sobre todo mucho descaro y aún siendo conscientes de ello.—Entonces, ¿me perdonaste porque supiste que mi hermana me había engañado como lo hice yo contigo?— cuestionó Lauren después de una noche movida y una mañana igual y llena de placer.—En parte eso me ayudó a darme cuenta de que fui
LaurenQuisiera pensar que todo mal ha llegado su fin, que ahora toca ser feliz, pero siento que algo se avecina, no sé qué tal malo será, pero esa corazonada me tiene en silencio y solo quiero que pase todo para sentirme liberada.—No estés nerviosa, estoy seguro de que Amir pensó bien las cosas sino que no hubiera dejado que Adil se acercara a la casa— intenté calmar a Sarah.Hoy era su pedida de mano y estaba que se mordía las uñas, y la comprendo aunque no pase por la misma situación, pero una muy similar me tenía igual que ella.—Hermana ¿pudo pasar?— escuchamos a Amir detrás de la puerta.—Sí, pasa, Amir.La figura tan bella de mi esposo entra dentro y las ganas de comerlo a besos se apodera de mí, y sí, definitivamente las hormonas me tienen revolucionadas, solo es él y é
AmirPara mí, Lauren es pura magia, la cual desprende de su mirada, sus labios e incluso de sus palabras, no existe una igual o mejor que ella, no se necesita tener un pasado impecable cuando no se sabe si el presente será igual.Dicen que a veces se debe vivir en silencio cuando se está enamorado, cuando se ama con el corazón y no solo con la mente, y el odio entre dos amores no debe existir y en el caso de que ese esté presente es porque nunca fue amor, solo fue un te quiero pasajero que acabo de la peor manera.Después de una pedida de mano llena de tensión por mi parte, Adil es oficialmente mi cuñado, cosa que no sé si llegaré aceptar y si ahora mismo no me opuse fue sobre todo por Sarah. Mis hermanas son sagradas para mí y por muy que no esté de acuerdo no puede privarlas de amar a quien crean que es conveniente para ellas, ya que la vida es cuestión
LaurenEra duro, muy duro ver cómo Amir cambió la lápida y puso el nombre de Laura, era difícil para mí estar frente a ese pedazo de tierra y no ver más que un mármol, pero ella tomó una decisión que solo le incumbía a ella, aunque se llevó mis decisiones de por medio.Y lo malo es que no nos damos cuenta de que todo se ha acabado cuando ya no queda nada de nosotros, ¿y entonces para qué arrepentirse al final de todo? ¿De qué serviría?—¿Estás bien?— pregunta Sarah mientras aún estaba frente a la tumba de Laura.No decía nada, solo observaba las palabras sobraban en este caso.—Lo estoy— sonreí y después nos fuimos.Estaba a punto de seguir el camino de Laura, estaba al borde de ahogarme en nada por querer escucharla, pero agarré al toro por l