Cuando amas realmente estás dispuesto a sacrificar todo por esa persona especial sin importarte los cambios que tuvieras en ese cambio. Blackthorne lo comprendió, aunque esperaba que no fuera demasiado tarde para comenzar de nuevo. Estaba enamorado de su exesposa, ya no tenía remedio negarlo de seguir haciéndolo, solo la perdería, él deseaba ser parte de su vida, quedarse allí para lo que pudiera ofrecérsele, aunque ella se negara seguiría cuidándola desde las sombras. Descubrió varias cosas al indagar sobre la vida de quien una vez fue esposa; resultaba ser que ella estaba trabajando como maestra en una escuela primaria; donde era apreciada por la gente a su alrededor. Emma tenía un carisma capaz de cautivar a cualquiera que tuviera la oportunidad de conocerla, sintió orgullo al verla siendo respetada; sin duda ella merecía una vida donde se sintiera satisfecha y por lo visto parecía haberlo logrado. Sus miradas se cruzaron por un instante breve en el cual la vio decaer; la estab
A veces a las personas nos cuesta comprender algunas cosas básicas de la vida; Blackthorne lo comprendió a las malas, pero estaba dispuesto a remediar su error en esta ocasión. Luego de los dolorosos días vividos en el hospital donde no podía dormir por vivir constantemente preocupado por la salud de Christian tuvo un respiro cuando este fue dado de alta; él lo abrazó con fuerza; deseoso de verlo crecer sano y alegre, aunque descubrió por las malas que era un padre negligente; sus descuidos a la hora del baño influyeron negativamente en la salud de Christian.Por eso Blackthorne decidió tomar a escondidas clases de paternidad, las cuales eran impartidas a nuevos padres en el hospital local; una de las enfermeras lo ayudó con el proceso de inscripción y el introductorio necesario para ser aceptado en las clases que se impartían cada tres noches en las instalaciones del hospital.Estando en las clases pudo comprender sus fallas y lo difícil que era para su esposa, criar a un niño estan
Blackthorne tenia todo listo para la propuesta matrimonial. Mientras Emms tomaba una ducha caliente él dispuso de un grupo de organizadores de eventos, los cuales se encargaron de decorar el área del comedor para que pudiesen tener una cena romantica e incluso contrató un trío de violinistas preparados para amenizar su noche con suaves melodias de amor. Era tan increible el destino que les unió; todo comenzó con la perdida de sus padres, él de Blackthorne por la muerte y él de Emma por la traicion que realizó en su contra de su hija. A él le era dificil imaginar como un padre podria vender a su hija; él solo recordarlo le daba nauseas, pero hace casi mas de de dos años eso fue lo que sucedió y aún lo recordaba claramente.Estaba distraido mientras se dedicaba a tomar unas copas con sus subordinados en un burdel local, su mirada se percató de la joven de ojos verdes a punto de ser subastada. La deseaba para él y en un principio pensó en pujar por ella para disfrutar de su compañia, pe
Las lagrimas brotaron de sus ojos victimas del dolor y la impotencia miró a su prometida descansando sobre la alfombra felpuda; no podia imaginar lo que haría si su odio ese que él alimentó en el corazon de aquella quien una vez fue su amor; Stephanie lo decepcionaba una vez más, pero ya era tarde no podia seguir perdonándola. Su final llegaría, porque si ella se atrevia a tocar a Emma no podría continuar con su vida, acomodó con cuidado a su amada en el centro de la alfombra cubriéndola con una manta suave de terciopelo. Se permitio observar una vez más sus facciones delicadas, tenía miedo de perderla; sentía dolor de dejarla tambien, perpetuar su recuerdo en la memoria era lo unico que le quedaba en ese momento.—Lo siento Emma—Blackthorne besó su frente con ternura. Le dolía separarse de ella cuando pensó que la había recuperado.Dejo una nota junto a ella sin explicar mucho los detalles de su partida; prometió regresar, aunque no sabia si podria cumplirlo, deseaba hacerlo , pero
—Necesito vender ambas propiedades lo más pronto posible—anunció Emma, dándole los papeles de ambas casas a la mujer de la inmobiliaria.—¿Está segura?—la rubia la miró con suspicacia—. Una venta tan abrupta no le generará ganancias favorables—le advirtió honestamente.—No importa—ella suspiró cansada—, necesito irme pronto, es por motivos de salud.La mujer en respuesta, miro con cuidado y algo de detenimiento el rostro pálido de la joven, viéndola bien si lucía enferma.—Le conseguiré el mejor precio posible—aseguró dándole la mano a Emma.—Gracias, no sabe usted la gran ayuda que me esta dando—admitió Emma con tristeza.Al quedarse sola Emma preparó una maleta con lo indispensable, también equipó la pañalera de Christian, necesitaba irse de inmediato.Tomó los pasaportes falsos que Jace hizo para ella y Christian, no podía ser rastreada por Stephanie o todo acabaría mal. Suspiró con tristeza, le dolía dejar a Blackthorne sin una despedida apropiada, pero era necesario.—Lo siento
La vida pintaba triste y melancólica para Emma, con lágrimas en los ojos abordó el taxi al salir del aeropuerto, tenía miedo de abandonar a su esposo, pero sabía que el estaría bien sin ella, era un hombre fuerte y se repondría de su pérdida. Respiró hondo antes de tocar el timbre.—Emma—susurró Adeline, cuya melena rubia estaba sujetada en un moño alto.—Tía—Emma la abrazó, con cuidado de no lastimar a su bebé en el proceso, la mujer le devolvió el abrazo, notando la tristeza en sus acciones.—Cuéntamelo todo—dijo con astucia sirviéndole una taza de té a su sobrina.Emma respiró profundo, antes de proceder a contarle todo, aunque se guardó algunos detalles para ella, tal y como lo era el hecho de que su matrimonio comenzó siendo una mentira, se limitó a hablar de la ex celosa que haría todo por destruirla.Adeline era una mujer astuta, cuya vida estuvo regida por las ambiciones, se casó tres veces y todas ellas enviudó, viudez que la ayudó a incrementar la fortuna que ahora poseía, m
Stephanie estaba cometiendo un error, ella lo sabía, no podía negárselo, pero estaba dispuesta a tomar el riesgo solo por disfrutar de la compañía de Chris, el hombre que alguna vez abandonó en el altar cegada por la ambición. Ahora era una mujer poderosa aunque sola e incluso tenía un hijo con el que aun no lograba conectarse, había arruinado su vida por buscar estrellas brillantes cuando tenía el sol a sus pies.—Su esposo se recuperará con el tiempo—le recordó el doctor tratando de ser amable.—Lo entiendo, es una fase temporal producida por el fuerte golpe en la cabeza—Stephanie suspiró sin emociones.—Se que es difícil, pero él esta vulnerable ahora y habrá cosas que no entenderá por eso es importante su apoyo—acotó el médico seriamente, pensando que ella planearía zafarse de los cuidados del hombre.—Estaré para él todo el tiempo de ser necesario—ella le sonrió honestamente—. Él es el amor de mi vida y no pienso abandonarlo, no esta vez, yo daré todo de mí para cuidarlo.—Esta v
Esa noche soñó que estaba en sus brazos, la mujer delgada y de curvas sensuales le sonreía con amor, sin tardanza la alcanzó y besó sus labios tiernos, era como sentirse en el paraíso, ella era joven, amable, su tacto tan familiar, deseaba hacerla suya, pero era solo un sueño.La realidad le golpeó de repente, se despertó notando la respiración pausada de Stephanie a su lado, ella era real no como la chica de sus sueños, aun así algo dentro de su ser le hacía creer que en algún lugar del mundo existia esa mujer, capaz de enamorarlo con con una sonrisa.—Christopher—susurró Stephanie levantándose de su sueño.—Todo esta bien—besó su frente con ternura, ella era real, la otra solo un sueño—, duerme un rato—la joven se acomodó sobre su pecho y el le acarició el cabello con ternura.—Ella era su todo y no podía lastimarla de esa maneraHabía cosas que no entendía, sabía que la pérdida de memoria sería temporal, pero a veces se frustraba por no conseguir ayuda que lo ayudase a entender lo q