Mi corazón latía desenfrenado por los acontecimientos que estaban sucediendo a mí alrededor.Todo era tan extraño y confuso.Una vez más me pregunté qué estaba haciendo aquí olvidándome de la historia que Acheron me había contado.Apreté a Nicholas contra mi pecho tratando que su calor me calmara ¿En qué había estado pensando?Ya era tiempo que le pidiera a Acheron que acelerara la fiesta de presentación de Nicholas para finalmente podernos ir, este mundo era demasiado peligroso para un niño por más que mi hijo fuera uno de ellos.De pronto la puerta se abrió cortando todos mis pensamientos abruptamente, mis ojos se digirieron a la persona que entró como si fuera la dueña del lugar, nuestras pupilas se encontraron en un silencio incómodo que se rompió con las pisadas de sus tacones sobre el suelo mientras ella se dirigía a mi dirección.Su mirada cambió a una divertida que por alguna razón me molestó de sobremanera pero ni siquiera hice una mueca, esa mujer no me gustaba nada.—Volvem
Tuvo que respirar profundo para no quitar la puerta de su camino y estrecharla entre sus brazos, llevarla a la fuerza a su habitación y tomarla como le gustaría, hacerla suya una vez más.Su compañera, maldición, ella era suya y nada podría separarlos por demasiado tiempo.Ni siquiera las intrigas de Katrina o el inminente peligro que constantemente lo asechaba.Acheron apoyó su frente contra la puerta inhalando una vez más su aroma dulzón.—Katrina mintió, lo que sea que haya dicho no es real Verónica.Para su sorpresa ella abrió la puerta conectado sus ojos con los suyos y ambos se quedaron en silencio.—Mira Acheron…Acheron estuvo a punto de saltar para besarla como deseaba hacer.—Realmente no quiero hablar de eso, será mejor que te vayas.—Verónica…—No Acheron, entiende algo, yo solo estoy aquí por Nicholas.Él apretó su mandíbula dolido.Cada vez que su compañera lo rechazaba esto causaba un dolor profundo en su alma y su lobo se debilitaba. Por suerte él era un Alfa y podría
Iba a bañarme pero no podía dejar a Nicki solo aunque tampoco quería buscar a Acheron para que lo cuidara, Agnessa no me daba para nada buena vibra y ni hablar de Katrina, en mi mente solo había alguien en este loco lugar a quien le dejaría cuidar de mi hijo y ese era Nicholas.Aún no creía cuanto se parecía a Acheron.Ambos lucían como gemelos pese a que eran padre e hijo, otra vez me pregunté si de esta forma luciría mi niño cuando creciera, si tendría su cara.Tomando en brazos a Nicholas bebé listo, me encaminé en busca del abuelo de mi hijo con quien compartía nombre por casualidades del destino.Nicki solía distraerse con todo a su alrededor así que no sería difícil distraerlo.Caminé hacia afuera porque no tenía idea de dónde buscarlo pero una melodía hizo que detuviera mis pasos y curiosa busqué el sitio de dónde provenía el sonido del piano y lo encontré en una habitación llena de instrumentos.De espaldas a mí, Nicholas tocaba, tan sumido en sus pensamientos que no me pareci
—Nunca —aclaró él tan rápido como pudo—. Los lobos no nos casamos, o por lo menos no es común hacerlo, a algunas hembras si les gusta todo eso de la boda humana pero a las demás les da igual o no están lo suficientemente convencida de hacerlo —gruñó por lo bajo él—. Para nosotros basta… la marca —añadió mirando el mordisco que Acheron me había dado en el cuello y supe que se trataba de eso así que enrojecí sin remedio. —Y esta ‘’marca’’ ¿De qué va? —Normalmente los machos queremos mantener el control sobre las hembras, nuestra hembra, quiero decir, así que la única forma es marcarla. Cuando lo hacemos nuestro olor está en su cuerpo esto hace ver a los demás machos a quien pertenece esa hembra, cuando otro lobo percibe el aroma no puede acercarse, de no ser así presenta un desafío para el lobo que la marcó. El tema de la marca empezó a dar vueltas en mi cabeza, tanto que casi terminé mareada ¿Acheron quería alejarme del resto de hombres?¿Fue así como terminó peleando con Drey ese dí
Ahora debía ir a dónde estaba Acheron, iba a gritarle por "marcarme" yo definitivamente no quiero ni necesito que ningún hombre se aleje de mí porque Acheron se creía mi dueño, él no tiene derechos sobre mí y es mejor que se vaya enterando.En silencio me deslicé por los pasillos hasta llegar al lugar donde yo debía dormir según Acheron, a unos centímetros de distancia de él y no entiendo por qué mi corazón de pronto comenzó a latir desbocado.Toqué la puerta esperando oír su voz pero mi respuesta fue un sepulcral silencio. Luego de un par de segundos yo tomé la manilla y la giré buscando abrir la puerta y así lo hice.Entré en la habitación esperando verlo pero ahí no estaba.— ¡Acheron! —Llamé pero no hubo respuesta alguna.Pronto repetí el proceso pero obtuve el mismo resultado.Enseguida me vi abriendo la puerta del baño para gritarle sus cuatro verdades.Al entrar no podía ver más que el vapor del baño lo que me indicaba que efectivamente Acheron estaba ahí.Mi respiración de rep
Pero en este momento no estoy dispuesta a protestar.No cuando sus dedos se apoderaron de mi pezón acariciándolo como un maestro de la seducción.Con curiosidad abrí mis ojos para echarle un vistazo a su glorioso cuerpo, no obstante, su mirada ardiente me paralizó.Ya no siento el suelo porque me ha cargado ocasionando que amarre mis piernas a su cintura, no hay nada en mis pensamientos cuando me está besando con tal alevosía.Mis manos se dirigen hacia su cuello aferrándome a este como si mi vida dependiera de ello.Acheron salvaje y ardiente.No sé en qué momento se deshizo de mi ropa pero ésta está sobre el suelo del baño a la vez que una de sus manos se colaba entre mis pliegues húmedos y su otro brazo me sostenía como si yo no pasará nada.Nuestras lenguas se encontraban en un frenético y ardiente beso.—Jodidamente mal me gusta tu boca sucia Verónica —gruñó antes de tomar mi pelo en un puño para volver a besarme sin lastimarme—. Toda tú lo hace.Un rayo de cordura me golpeó de m
Estaba tan sumida al placer que mis acciones no me pertenecían, yo movía mis caderas como si mi vida dependiera de ello, lo necesitaba más fuerte, más profundo.Lo busqué con mi mirada y lo encontré arrodillado detrás de mí, mientras me hacía sentir tan extasiada que comenzaba a cuestionar si esto no se trataba de un sueño.Nuestras pupilas se conectaron mientras él seguía dándome un placer sin precedentes y yo gemía su nombre una y otra vez.—Acheron...—Dilo —gruñó él con la voz cargada de pasión y demanda.Él era jodidamente caliente y mandón.—Solo dilo amor mío —recitó en perfecto griego aquellas palabras cariñosas que después entendería—, dilo y es tuyo.Entonces no pude resistirlo más.Lo quería a él.Dentro de mí.Sobre mí.Follándome.Dándome todo lo que pudiera darme.Haciéndome suya.Acto seguido una sonrisa lobuna se mostró en sus labios pues él había leído mis pensamientos y sabía lo que yo estaba a punto de decir.—Levántate y hazme el amor ahora mismo.—Tus deseos son m
Nunca me ha gustado las multitudes y no empezarán a gustarme hoy, aún con Nicki en mis brazos yo sentía como temblaba ante la multitud quienes no apartaban sus ojos de mí, por Nicholas supe que ellos no eran ni la cuarta parte de las personas que nos verían cuando Acheron presentará a Nicki como su hijo, ahí sí se encontraría toda la manada y esto me hacía temblar.Nicholas pareció darse cuenta de esto pues apoyo su mano en mi hombro en señal de apoyo.Mis ojos se dijeron a él y le sonreí levemente.—Todo estará bien.— ¿A dónde vas? —pregunté alerta.No quería que me dejarás sola ahí no donde todos me miraban.¿Dónde estaba Acheron?¿Por qué tardaba tanto?—Espera un segundo aquí.Asentí un poco incómoda acunando a mi hijo a mi pecho.Nicki comenzaba a pedir que lo bajara pero me rehúso a hacerlo, si ocurría algo... Cualquier cosa, entonces podía correr y llevarlo conmigo.Era precaución simplemente.—Eres la mamá del cachorro del Alfa ¿No? —preguntó una chica de tez muy morena llega