Máximoestaba esperando los resultados de la radiografía de Alai. Tenía los nervios a flor de piel. No podía imaginar la idea de que ella quedara sin movimiento en una de sus piernas, y lo peor de todo, cómo le iba a decir que tal vez no volvería a moverla.-Hey, tranquilo Maximo, te va a dar algo - me dice Federico tratando de calmarme. A pesar de todo, el hombre ha estado ahí, aunque a veces lo quiero matar.-¿Cómo puedo calmarme si puede que Alai no vuelva a tener movimiento en una de sus piernas?- le digo casi gritando hasta que sale el médico.-¿Cómo salieron los exámenes, doctor?-La señorita tiene una inflamación cerca de la columna que hace que aplaste algunos nervios, y eso causa que no sienta la pierna.-¿Volverá a caminar? - ¡Dios, que diga que sí!"-Sí, hay que esperar a que baje la inflamación y comenzar con terapias, pero eso lo puede hacer ella en su país, ya que las terapias son varias.-¿En cuánto tiempo recuperará el movimiento?-Eso depende de la intensidad con que h
Alaitomó a Maximo del cuello y lo atraje hacia mis labios. Estaba muy necesitada después de tanto tiempo sin sentirlo. Me sentía ansiosa y sabía que él estaba peor. Él me quitó el sostén y comenzó a chupar mis senos, haciéndome gritar de placer.- Ahh, sí, Max - tomé su camisa y empecé a quitarla mientras besaba su pecho. Luego bajé a sus pantalones, me arrodillé, quité su correa y bajé sus pantalones junto con sus boxers, dejándolo completamente desnudo.- ¿Te gusta lo que ves, nena? - me dijo juguetón.- Me encanta - tomé su miembro y me lo metí en la boca, escuchando sus gemidos mientras tomaba mi cabeza para que su miembro llegara más profundo.- Nena, para, me voy a correr - pero no lo hice, sentí cómo se tensaba y eyaculaba en mi boca.- Mmm, qué rico - le sonreí.- Ven aquí - me cogió en volandas y me tiró en la cama.- Quiero probarte - pegó su boca a mi sexo y chupó mi clítoris, haciéndome retorcer de placer.- Oh, me encanta más - grité y tomé su cabeza cuando sentí que me i
MáximoEstoy asustado al ver cómo se desvaneció Alai en mis brazos. La llevo a mi cuarto y llamo al médico.- Le vamos a hacer unos exámenes y en una hora tendré el resultado.Pasó una hora y yo ya me quería morir, hasta que llegó el médico.- Bueno, su novia está sana. Lo que pasó es que su novia está embarazada.- ¿Qué? - Me quedo helado al escuchar esa noticia.- Sí, debe tener 1 semana. Igual hay que hacerle un ultrasonido. No sé qué decir o qué hacer.- Ah, y sería bueno que ella esté tranquila, ya que tiene la presión un poco alta y con el embarazo no es recomendable que eso pase. Puedo poner en peligro al bebé y a la mamá - ¿Ella en peligro? No, eso no pasará.- Gracias, doctor. - El doctor me da unas vitaminas para ella y se va, dejándome hecho polvo. Dios, voy a ser papá y ni siquiera sé cómo hacerlo. Es más, ni siquiera sé cómo decirle a Alai que está embarazada. Me tumbo al sillón y me pongo a pensar en esta nueva vida que tengo.AlaiMe despierto con unas ganas de vomitar q
Alai Me quedo estática sin saber qué hacer o decir. Max intenta decir algo más, pero mejor se calla, esperando que salga del trance. No lo puedo creer, voy a ser mamá y no estoy lista.-Max, esto no me puede estar pasando a mí - digo desesperada -¿Qué clase de madre voy a hacer si ni siquiera puedo cuidar de mí misma? - le digo casi gritando.-Cariño, tienes que calmarte. Ninguno de los dos está preparado, pero piensa, este bebé nos cambiará la vida y nos tendrá unidos de por vida - yo aún no caía en cuenta.-Max, no voy a poder con esto - digo señalando mi vientre, que aún está plano. Unas lágrimas salen de mis ojos y Max se apresura a secarlas.-Vamos a poder porque yo voy a estar a tu lado y juntos vamos a sacar adelante a nuestro hijo - por alguna razón las palabras de Max me reconfortan y me dan algo de tranquilidad.Asiento y me pego a él para que me abrace con fuerza y me haga saber que él está conmigo.-Te juro que los voy a cuidar a los dos y los voy a hacer muy felices - tom
AlaiEstaba asustada por el grito que metió Max, nunca lo había visto tan cabreado.- No me dirás - me grita y, como estoy tan sensible, se me llenan los ojos de lágrimas.- No vayas a llorar, dime mejor quién te hizo eso, Alai.- Te lo voy a decir, pero debes prometerme que no harás nada - le digo con la voz temblorosa.- Habla ya - me suelta.- Fue Federico. Se enteró del embarazo y se puso como loco - veo cómo su cuerpo se tensa.- Ese infeliz no puede dejar sus putas manos quietas, voy a matarlo - coge su chaqueta y se dirige a la puerta, pero yo corro y lo tomo del brazo.- Max, me prometiste que no ibas a hacer nada - le digo casi gritando.- ¿Cómo no quieres que haga nada si acaba de lastimar a mi mujer? Mira ese morado que te dejó - me señala el brazo.- Ya lo sé, pero no vale la pena. Por favor, no hagas nada - él respira profundo y luego me mira.- Está bien, no voy a hacer nada - yo sonrío y lo beso en los labios, pero él está serio, se despega de mí y se encierra en su desp
Alai- ¿Alai, acaso no me vas a contestar?- Sí, sí te contestaré. - Tomo aire para calmarme.- Me encontré a Federico por casualidad en el hospital. Se estaba haciendo unos chequeos médicos. Yo estaba muy nerviosa por entrar y tú no llegabas, y él, al verme así, se ofreció a entrar conmigo.- ¿Y esperas que te crea eso? - Me hierve la sangre.- ¡¿CÓMO PUEDES DUDAR DE MÍ?! ¡YO QUE NUNCA TE HE FALLADO! - Le grito desesperada.- No dudo de ti, dudo de las intenciones de ese hombre. Él quiere lo que es mío, te quiere a ti y de paso quiere a mi hijo, y eso no se lo permitiré. - Sé que Max está tratando de controlar su ira, pero es obvio que le sale mal.- Dime, ¿dónde estuviste hoy en toda la mañana? Porque no estabas en la oficina. - Le cambio el tema bruscamente.- A ti eso no te importa. - Abro los ojos como platos al escuchar su respuesta.- ¡Así que no es de mi importancia! Está bien, entonces mejor me voy de aquí. - Tomo mi bolso y cuando me dispongo a salir, Max me toma del brazo.-
AlaiEstaba feliz max me habia pedido ser su esposa y yo encantada dije que si. Estoy sobre su pecho descansando despues de hacer el amor- cuando quieres que nos casemos amor ? - me pregunta maximo- que te parece si en un mes igual no quiero algo muy ostentoso solo familiar- esta bien amor como tu quieras - lo beso en los labios y me subo encima de el- no sabes lo mucho que te deseo - le digo en el oido mientras le muerdo la oreja, escucho como el gime y toma mi culo apretandolo en sus manos- que esperas preciosa soy todo tuyo - yo sonrio y tomo su miembro mientras lo adentro en mi- ah si amor - me muevo rapido lo deseo con locura el toma mis pechos y los aprienta mientras que yo me descontrolo hasta que max me frena-
Me despierto con unas fuertes ganas de vomitar, pero cuando intento moverme no puedo. M****a, estoy atada. Volteo la cara y saco la poca comida que tenía. Escucho cómo abren la puerta y veo a Matías mirándome preocupado.\- ¿Preciosa, estás bien? - toma mi rostro, pero yo no quiero que me toque.\- No me toques, imbécil.\- Pequeña, sé que lo dices porque estás enojada, por eso no me enfadaré contigo.\- ¿Qué mierdas quieres, Matías? - le digo gritando, desesperada.\- A ti, preciosa. Solo a ti. Quiero ser feliz contigo. - Cuando escucho eso, me dan más ganas de vomitar.\- ¿Qué dices? Yo no quiero estar con el hombre que abusó de mí y me maltrató. Yo amo a otro hombre. - Dios, Max, búscame, por favor.\- Pues voy a hacer que te enamores de mí y así seremos muy felices. Es más, pienso viajar a otro lugar. Ya tengo casi todo listo. - Yo lo miro asustada. No me quiero ir. No quiero dejar a Max.\- No, Matías, por favor, no me hagas esto. Déjame ir. Entiéndelo, yo no te amo.\- Estás conf