Pasé en mi cuarto todo el resto de día, me mantenía aterraba el simple hecho de encontrarlo allá abajo sabiendo que tenía un arma en disposición, y que mi padre en un ataque psicótico como hace rato, llegase y me matara. Aún pensaba lo especial que sería mañana y que tanto lo podría disfrutar. Para mí ir con Evan era toda una fantasía, lo amaba, en todo el sentido de la palabra.
Se hicieron casi las diez de la noche, tenía hambre y sed, podría morir por deshidratación y no en manos de mi padre, de igual forma el pensar que mi padre podría matarme era una exageración.
Encontré a mi papá plácidamente sentado en la mesa distrayéndose con su teléfono. Al escuchar los pasos de bajar las escaleras se volteó encontrándose conmigo. Él me sonrió volviendo su atención hacia su móvil. Lo volví a ignorar y llegué hasta el refrigerador para beber agua y después buscar algo que tomar.
─ Ambrosía, te he preparado una avena y he comprado las galletas que te gu
Caminábamos por en medio de la calle. Por este sitio y a esta hora era muy raro ver cruzar automóviles, generalmente se veían personas. Las calles por el día de hoy se notaban medio solas, como estábamos en invierno hacía bastante frio y por suerte este vestido me cubría bastante bien. ─ ¿Cómo ha estado tu mamá? ─ Cambié la conversación. ─ Relativamente bien. Ha estado medio sobria estos días. ─ Informó. Pero, aunque su madre haya estado “bien” no significaba que le gustara hablar sobre eso. ─ Te entiendo. Mi padre se comportó muy raro estos días, pero ya nada es igual. ─ A veces parecía como si el destino hubiese mandado a Evan para sentirme acompañada y no una desafortunada que tiene una vida de m****a, pero con él me sentía acompañada y comprendida. ─ ¿Y dónde está? No lo vi cuando llegué, quiero conocerlo. ─ Preguntó. ─ Se fue de viaje, pero esta vez con unos amigos y me dejó un sobre de dinero. ─ Respondí con desagrado. Él
Habían pasado más de tres semanas desde el baile que había hecho la escuela y el “Viaje repentino” que había tenido mi padre, porque nunca regresó. Menos mal que creí su débil perdón y sus acciones llenas de gentileza, que era sólo para manipularme e irse con su otra familia, si es que la tiene. Por eso me regalaba dinero, para él poder irse sin ningún arrepentimiento. Evan tampoco me visitó desde la última vez que nos vimos, le escribí por F******k, pero no le llegaban los mensajes, intenté llamarlo, pero salía correo de voz, cada segundo hasta el día de hoy. No había podido dormir en dos días, cerraba los ojos y me dormía, pero el tiempo era poco, menos de treinta minutos. Mi sueño fue disminuyendo mientras pasaba el tiempo; los primeros días dormía más que demasiado, los siguientes las ganas de dormir cada vez eran flojas hasta ahora que sólo dormía unos minutos. No tenía muchas cosas que hacer, dentro de poco era navidad e intenté decorar la casa, tal y c
El pasado 02/12/2021 en un barrio de Texas, se encontraron dos cuerpos en estado de putrefacción avanzada. Uno de ellos era el cuerpo de una Joven llamada AMBROSÍA BRIDGERS DAVIS y un hombre mayor, su padre, llamado EDWARD BRIDGERS SINCLAIR. Un oficial de policía recibió la llamada a las 7:38 am de una vecina afirmando la extrañada desaparición de sus vecinos, expresando que la casa de ellos emanaba un olor fétido. La fiscalía de la nación se comunicó con la estación de policía mas cercano para que investigaran el caso y le dieran orden al caos.Los policías manifestaron que la puerta estaba cerrada por lo que tuvieron que utilizar la fuerza bruta y el olor que decía la informante estaba presente estando a solo unos metros. De tres habitaciones solo dos estaban cerradas bajo llave. En la primera se encontrab
Siempre que un arcoírisaparece a través de mi ventana,deseodisfrutarlocómo la mayoría de la gente lo hace.Pero no puedo...no podía hacerlo.Desde que el rojo me record
Cuando estamos en primaria nos preguntan: ¿En dónde nos vemos dentro de 20 años? Algunos responden que siendo bomberos, otros policías, las niñas soñadoras hadas, los estudiosos doctores, mientras que los insensatos, un simple y delicado no sé. Desde que tengo memoria recuerdo que era soñadora. Deseaba estar dentro en una pista, cantando, saltando y gozando de mi público, componiendo canciones, mis emociones. Me gusta cantar, pero al mismo tiempo mi tono de voz es un espanto, es casi un hecho que si intento hacer un altibajo muchos quedarian sordos. Pero ahora pienso ¿Qué seré dentro de 20 años? ¿Una mucama? O ¿Un cuerpo putrefacto? Desde hace días, tenía esa incógnita en mi cabeza cada vez que me levantaba para servirle la comida a mi padre y a sus antiestresantes, así les llamaba a las mujeres que papá tenía como costumbre traer cada semana. Podría llamarlas zorras, putas, pero era algo poco cortez de mi parte nombrarlas de esa manera, tal vez solo e
Todos soñamos con tener un mundo de colores, sueños que creemos que son imposible hacerlos realidad, tener amigos con los que contar. Todo era fácil en aquel tiempo; en donde los dulces no eran medicinas, en donde los juguetes llegaban sin ninguna responsabilidad, en donde tus padres te protegían y no te dañaban. No había preocupación por el ¿Qué pasará mañana? ¿Habrá comida? ¿Como me irá en la entrevista? Nos cantaban o nos leian un cuento antes de dormir y cuando ya estabas rendido tus padre acomodaban tus sabanas. Las risas y las sonrisas te caracterizaban, no importaban las caídas y humillaciones, esa radiante sonrisa siempre acompañaba. El tiempo fue un arma fugaz, pasó tan rápido, que puedo aún sentir las caricias y los besos de mi madre antes de ir a la escuela, el aroma dulce que inundaban mis fosas nasales antes de dejarla, los juegos de palabras con Alice. Pero ahora ya no hay más que platos rotos y olor a pesadumbre, el sentimiento de felicidad era algo ya
Hice la fila para recoger mi merienda y luego buscar un asiento. Me detuve en seco mientras buscaba un lugar cómodo donde sentarme, no sabía si era yo o realmente estaba delirando. El cabello rubio fue lo primero que vi, aquella misma cabellera que me topé esa noche en las vías del tren. Un escalofrío recorre mi cuerpo lentamente, puedo aún sentir el enojo que me causaron sus palabras sarcásticas. Estaba placidamente sentado hablando con un grupo de chicos a su lado habia una pelirroja que está en mi clase; recuerdo haberla visto en mi clase una que otra vez, se llama Cristine y otros dos chicos a los que no puedo llegar a identificar muy bien, pero uno es de tez morena y a su lado hay una chica con un largo lacio cabello negro. Y para mi mala suerte a unos cuantos pasos está una mesa completamente sola, tal y como me gusta. Tomo aire y camino a paso a rápido, estando a tan solo unos centimetos cerca de ellos aumento el paso hasta llegar a la mesa
Sabes que estás enamorado, cuando ya no sientes un toque frio, sino un toque cálido. Cuando ya no crees que el destino juega en tu contra, sólo te premia. Hace que pienses mucho en esa persona; Todo lo que hace es lo único que gira a tu alrededor, te gusta sentir el cosquilleo en tu estomago cada vez que sus miradas tropiezan, anhelas detener el tiempo cada vez que están junto a esa persona. Cuando te hablan ya no escuchas el eco y las frías palabras, sólo escuchas una hermosa y memorable melodía. Y yo, me había enamorado de una chica. Me enamoré de su linda sonrisa y blancos dientes, de sus hoyuelos en las mejillas cuando algo le causaba mucha gracia, de su sedoso y largo cabello castaño. Me enamoré de su cara sonrojada o su cara de confusión, su amabilidad y gentileza que denotaba cuando caminaba por los pasillos. A tan solo dos metros de distancia, solo utulizando mi imaginación puedo sentir sus labios rosados atravesando los míos, o mi cuerpo hundiéndose en sus delgados