Abril, 17, 2019

Carretera San Diego – Oregón

Interestatal 5

Aquella chica de pelo rubio sonreía mientras conducía a su casa, sabía que la noticia impactaría su hogar.

Se acaricia el vientre, mientras se imagina la reacción de su futuro marido, que podría llamar el amor de su vida.

El teléfono sonó, informando que tenía un nuevo mensaje, pero decidió no contestar, debido a que estaba conduciendo en una de las carreteras más transitadas de todo Estados Unidos, y ahora mas que nunca debía ser una chica muy prevenida, y tener cuidado con muchas cosas.

De nuevo llego una notificación, pero miro con detalle, era una llamada, la cual era de su mejor amigo James, así que lo agarro y sin perder la vista de aquella carretera, contesto

-Dime que ya vienes – hablo su mejor amigo

-voy en la carretera, me falta menos de una hora para llegar – dijo la rubia

- Jocelyn, me hubieras dejado acompañarte – reclamo su mejor amigo - ¿estas conduciendo? ¿porque no dejas el teléfono? – grito

El era una persona bastante explosiva, era lo que más amaba la rubia de él.

- James, estoy bien – hablo la rubia – y no pierdo la vista del camino y más ahora – pauso un momento - pues te tengo una gran noticia

- ¿Gran noticia? – pregunto James

-  Imagínate quien será papá – hablo la rubia mientras se acomodaba el flequillo

Un grito agudo se escuchó en la línea, a lo que Jocelyn quito su teléfono del oído

-Ya le dijiste a Kendall ¿cierto? – pregunto James

-Aun no, se lo diré mañana en la noche, ya tengo todo preparado – dijo la chica mientras se paraba en un estacionamiento

-Bien te dejo, mañana en la mañana voy - dijo James emocionado – Felicidades

 - Gracias – hablo – te quiero mucho.

Colgó y después reviso su teléfono, para checar el mensaje que le habían mandado, era de Kendall, su prometido

Amor, espero que llegues pronto, me aviso Logan que fuiste al doctor, así que te estaré esperando… te amo

Sonrió, sin duda él era el amor de su vida

Fue a el estacionamiento, donde puso gasolina, no quería tener ningún percance en el camino.

Siguió su camino, miro la hora 10:28 pm no era tan tarde, así que podría llegar como a las 11.15 pm, y tal vez hablar con su madre, sobre la nueva noticia.

Una camioneta del carril contrario se atravesó a su carril, lo único que vio fueron luces rojas que se acercaban lentamente.

 Parece que los sonidos que estaban alrededor, pararon solo para que se escucharan los estruendos de los carros chocar entre sí, el carro de la rubia giro entre sí, hasta quedar boca abajo.

 Ella un poco consiente, temía por la vida de su pequeño hijo, así que, con todas las fuerzas de su cuerpo, trato de salir de su carro.

Después… se escuchó una explosión, seguido del sonido de las sirenas de una ambulancia.

Abril, 17, 2019

Medford, Oregon

Hospital Central

Kendall Hills

La llamada que había recibido mientras te estaba esperando, era una de las peores que había recibido en toda mi vida, tan solo con el pensar que tu cuerpo yacía en una cama de hospital me aterraba.

Conduje lo más rápido que me permitía la pequeña calle en donde vivíamos, hacia el hospital en donde me dijeron te habían traído.

Aunque el coche estaba mal estacionado, no me importo, baje rápido y fui a la entrada del hospital, donde la recepcionista estaba atendiendo unos papeles.

-Información de Jocelyn García – grite desesperado

- tranquilo joven – hablo la recepcionista

- mi novia se está muriendo – dije mientras me caía de rodillas.

Sentí las manos de algunas enfermeras que me querían levantar, pero no podía, hasta que una voz familiar me saco de mis pensamientos

-Vamos Kendall, ella te necesita bien – hablo James, uno de mis mejores amigos

Con algunos esfuerzos, fui a la sala de espera, tus padres estaban allí, al igual que James y Logan.

Miraba con tristeza a los señores García, mientras veía a tu madre llorar desconsoladamente.

 Estaba demasiado cansada, podía verlo en las bolsas negras que tenía abajo de los ojos, tu padre ni se diga, se veía triste y cansado.

Mire la pantalla de mi teléfono, 02:43 am. Así que me levanté de mi asiento y me puse de rodillas frente a tu madre.

 -Vayan a descansar - dije mirándolos - se ven muy cansados

 -Lo mismo te hemos dicho a ti - dijo tu madre 

 -Haremos un trato - dije - ustedes descansan hoy y yo descanso mañana - sonreí a medias

Sabía que te recuperarías.

 - Trato es trato Kendall - me dice tu padre mientras comienza a levantarse de esa molesta silla

 -Cualquier cosa nos avisas - me dice tu madre, sabía que ella no se quería ir, y tu padre la jalaba hacia la salida, mientras ambos se iban

 - Lo hare - dije para mí mismo

Mire a Logan y James dormir en una esquina abrazados, sabía que te encantaría una foto de eso, así que les tome una foto.

Me senté, mientras mis ojos se cerraban poco a poco, y sin darme cuenta me quedé dormido.

 Los ruidos de las puertas que se abrían, y se cerraban, me alertaron, haciéndome despertar, eran las 3.56 am, y un llanto de una señora me hizo darme cuenta de la realidad.

 Sin tan solo estuvieras aquí conmigo, a mi lado, no en esa cama...

 Todos los doctores corrían desde hace cinco minutos, así que me pare a la recepción, mientras despertaba a los chicos, pregunte, pero no hubo respuesta, nadie me decía nada de ti, no me decían nada del amor de mi vida.

 Comenzaba a preocuparme, porque no había nadie que me dijera nada.

-Cálmate – hablo Logan

-Mira – dijo James viendo hacía en frente

 Miré y vi al doctor que te atendía, mientras varias enfermeras lo seguían.

 -Doctor Bostwick - dije parándolo - ¿Que sucede? - dije con lágrimas en los ojos.

-No sabemos que paso, de un momento a otro todo se complicó - dijo mirándome triste

 -Haga todo lo posible - dije llorando, de nuevo sentía mi mundo caer

Se fue y me quede pensando en que muchos llamaban nuestra historia cliché, pero supongo tenían razón...

Y algo raro, debido a que tu odias el cliché.

Y todo comenzó hace 20 años, cuando nos conocimos a los 5 en la guardería, te vi tan tímida, tan frágil, que se me hizo una tontería no acercarme a hablarte, después de eso nos volvimos mejores amigos y al cumplir los 17 te pedí que fueras mi novia, lo mejor fue hace 10 meses que te propuse matrimonio...

Tan solo faltaban tres días para el día más feliz de mi vida...

Y tuvo que pasar esto...

Un maldito accidente de carretera...

Ojalá no hubieras agarrado el auto esta noche...

 -Estaba bien y algo se complicó – dije viendo a James y Logan

Ambos me abrazaban, mientras yo solo quería que estuvieras bien.

Lloraba cada segundo desconsolado, tus padres se habían ido a descansar hace más de cuatro horas, mientras yo me quedaba acá, y no recibía ninguna noticia.

Llegó el Doctor Bostwick, de inmediato me pare para ver lo que ocurría.

 - Ella quiere hablar con usted -dice bajando la cabeza.

 ¿Significa que estas bien?

Sonreí y miré a los chicos, ellos también sonreían, ella estaba bien.

 Entre a la habitación donde te encontrabas, aun estabas con esos cables conectados, aunque… tus labios estaban partidos, tu falta de maquillaje y pequeñas cicatrices en el rostro, y moretones en las manos, incluso así, para mi seguías siendo la mujer más bella de todo el planeta.

-Hola hermosa - dije sonriendo

- Ho...la - dijiste con un hilo de voz

- No hables te hará mal - dije llegando a ti y dándote un beso en los labios, amaba el sabor de tu boca

- Kendo - dijiste sin fuerza - lamento esto, - lágrimas salían de tus pequeños ojos - pero no puedo cumplir con la promesa, no puedo quedarme para siempre en tu vida - para ese momento yo ya estaba llorando – me siento tan débil, juro que estoy luchando, pero simplemente ya no puedo con esto, no creo poder seguir avanzando – dijiste llorando

- No digas tonterías - dije tratando de callarte para que no te debilitaras más – tu seguirás adelante, sabes que esto significa todo para mí, para nosotros

Sentí tus frágiles manos, en mis mejillas, tratabas de calmar mis lágrimas, aunque ya, para ese punto, nada podía calmarme.

 - perdóname - dijiste tomando mi mano - pero en el accidente perdí a nuestro bebe – dijiste a lo cual me quedé en estado de shock

- ¿Estabas... Embarazada? - dije llorando, mientras sentía tu mirada rompiéndose poco a poco

-Amor, perdón, pero me estoy muriendo poco a poco – dijiste en un sollozo, ya que su brazo se dobló.

Yo la abrazaba, la besé, después la solté

-Tranquila pequeña – dije sonriendo

Te mire y vi cómo me hacías señas con tu mano, para que me acercara a ti, para después sentir tus labios con los míos.

Disfrutaba este beso, sin duda era uno de los mejores, hasta que sentía como te separabas poco a poco.

Ese beso sabia a un adiós, y ese sabor no me gustaba para nada.

Te miré, y vi como cerrabas tus ojos lentamente.

Grite después de verte morir mientras sentía que llegaban varias enfermeras y me sacaban, viendo al amor de mi vida muerta.

 Donde una parte de mi... murió también.