Darío Hoy cumplo un año y medio de relación con Naylea, por lo que decidí dar el gran paso.El día ha llegado. Después de meses de planear y coordinar cada detalle, estoy listo para pedirle a Nay que sea mi esposa de una manera que ella jamás olvidará. Quiero que todo sea perfecto, y que recuerde todo esto como un sueño hecho realidad. Así que decidí organizar una propuesta tal y como hace más de dos años, me había narrado en el viaje donde todo salió mal.Salgo de mi oficina en casa y escribo un mensaje para mi amada, quien está ansiosa por saber a dónde será nuestra cita de hoy."Vamos al lago donde salimos por primera vez. Te amo."Es lo único que le digo, no quiero darle muchas pistas para no arruinar la sorpresa.Ayer en casa, le dejé un vestido rojo un poco flojo de satén, con dos tiros largos cubiertos de rosas, las cuales, son el punto llamativo del vestido.Después de la propuesta, planeo que vayamos en bote a un gacebo en la otra punta del lago, donde nos estarán esperando
"Es increíble como la persona más cruel que he conocido me ha hecho más feliz que nadie". Es lo que pienso al ver a Dario a mi lado arrodillado esperando por la respuesta. Hoy cumplimos 1 año y medio de novios y tengo a Dario aquí, pidiéndome casarme con él. Nada podría estar mejor. Mi vida es increíble, estoy a punto de poner mi consultorio, trabajando para mi novio y tengo comunicación con mi madre, no puedo pedir nada más. —Si Darío, quiero casarme contigo—respondo mientras mis ojos llenos de lagrimas dejan en evidencia lo emocionada que estoy—y si, tendremos 8 hijos si así lo deseas—sonrío emocionada. Siempre soñé con este momento, en el que el hombre de mis sueños, el hombre perfecto, me pidiera ser su esposa de la manera más cursi y romántica posible. Y aquí está él, el magnate millonario, atractivo, inteligente, educado y más deseado, pidiéndome ser su esposa. En estos momentos me siento la persona más feliz y afortunada del mundo. "No hay mal que por bien no v
¡No puedo creer que mi madre haya hecho esto!Camino por las calles titiritando, la lluvia cae sobre mi cuerpo, mientras lucho por encontrar algún lugar donde pueda cubrirme de ella; mi flequillo pegado a mi cara, mis pantuflas chapoteando y mi pequeña pijama empapada son el reflejo de la terrible noche que estoy viviendo.Intento ser fuerte, pero siento que en cualquier momento me podría derrumbar, es demasiado para mí.———————————————————————————-Capítulo 1:*Ese mismo día por la mañana*LunesJusto cuando me estaba robando un pañuelo con el sudor de Harry Styles, mi alarma me despierta.Me levanto y camino hacia el espejo a observar mi cara, la noche anterior me dormí tarde por estar leyendo, pero ni modo, tengo que ir a la universidad.¿Por qué existe la escuela?¿Por qué me acosté tan tarde?Son los pensamientos que inundan mi cabeza mientras me dirijo al baño a hacer mis necesidades y a tomar una ducha bien fría que me mantenga despierta al menos los dos primeros temas del exam
—Bueno, ponte cómoda, veré si encuentro algo seco para ti.Recorro todo el lugar con la mirada, estamos en la sala, es muy amplia, de colores neutros como el gris plomo y el blanco, tiene una gran escalera que da al segundo piso, los muebles tienen un tapizado precioso; no está muy cargada, una planta en la esquina hace el ambiente más cálido, tiene un gran ventanal.—Toma esto—dice Natalia bajando por las escaleras—te voy a llevar al baño para que te puedas arreglar.—Llévala al baño de servicio—dice Dario de mala gana.No sé porqué se comporta así, no le he dado razones para que me trate de esa forma, obviamente no le agrada la idea de que esté en su casa, ni siquiera había hablado hasta ahora, me hace sentir incómoda, me quiero ir.—No, irá al de mi habitación— dice su hermana tomándome de la mano.Se nota que es una persona muy agradable y decidida. Estos dos son muy diferentes, ella estaba dispuesta a ayudarme desde el primer momento en que me vió ahí tirada toda mojada.—Como se
DarioMe despierto por el insoportable ruido de mi alarma, me estiro y decido pararme. Me quito el bóxer para quedar completamente desnudo, entro a la ducha y dejo caer el agua sobre mi cuerpo.Hoy tengo ganas de usar un traje negro con una camisa azul cielo.Al salir del baño, tomo el traje que tenía en mente y me dirijo hacia el comedor, donde una de las señoras del servicio me tiene mi acostumbrado plato de frutas servido.—Buenos días Irisa— digo al llegar.—Buenos días señor Dario, ¿cómo está?—Muy bien, ¿y usted?.—Bien, la señorita Natalia le mandó a decir que se fue temprano porque tenía algo que hacer antes de llegar a la empresa.—Está bien—es lo único que contesto.Irisa es una señora mayor, lleva años en casa, desde antes del fallecimiento de mis padres, crecí con ella, es como una madre para mí.Tomo el tenedor y llevo el primer trozo de manzana a mi boca, seguido de esto, tomo un poco de jugo de naranja. Mientras me desayuno, reviso mis redes sociales, salí en el periódi
NayleaSalgo de la empresa echando humo, no quería demostrarle a Darío que su comentario sobre como voy vestida me afectó, no entiendo como una persona puede tener tan poquito tacto, él sabe mi situación y aún así no duda ni por un segundo hacerme sentir mal.Decido ir a la casa de mi madre, mi mejor amiga me dejó dinero suficiente para tomar tomar dos taxis (uno para ir para la empresa y otro de vuelta) pero necesito ir por mi ropa y mis ahorros.—Taxi—grito alzando mis manos—TAXIIIIISe para en frente de mí, abro la puerta y me subo.—Gracias señor.—A la orden—contesta—ponga en el GPS la ubicación del lugar al que quiere ir—dice señalando una pantalla que está pegada en la parte de atrás de su asiento—al final del recorrido le saldrá el costo del viaje.Me relajo en el asiento, cierro los ojos, quiero descansar aunque estoy segura de que llegaremos pronto, la casa de mi madre no queda tan lejos.—Señorita, llegamos.Observo la pantalla y saco el dinero del bolso para pagarle.—Muc
Naylea- MiércolesEntro a la empresa con toda la seguridad del mundo, que en segundos se esfumina al detallar al personal de esta, todos se ven muy maduros y profesionales, creo que soy la más joven aquí.—Buenos días—le digo a la recepcionista.—Buenos días señorita, ¿qué se le ofrece?—responde amablemente.—Quiero saber donde se encuentra el área de recursos humanos, necesito pasar a recoger un contrato.—En el piso dos, tome el ascensor.—Gracias.Me dirijo al ascensor fascinada por el tamaño de esta empresa, es enorme, creo que nunca me cansaré de decirlo, me siento como la primera vez que entré. Rápidamente me arrepiento de estar de curiosa porque choco con una persona que trae unos papeles.—¡Ay, lo siento!—digo antes de agacharme a ayudarlo a recoger todo lo que dejó caer por mi culpa.—No hay problema—dirige su vista a mí, es precioso, tiene una recortada militar que queda perfecta con su tipo de cara, sus facciones son duras y su cuerpo, a pesar de llevar traje, se ve ejercit
No sé en qué momento me dejé convencer por Stheisy para venir a esta fiesta. Ella, Matias, su novia y yo, nos adentramos a la gran casa.—¡Chicos, vinieron!Veo a Kris acercarse de manera despreocupada con un vasito rojo plástico en su mano izquierda, lleva un short verde de baño.—Hola amigo—se dan un cálido apretón de mano, yo solo observo la escena.—¡Amanda volviste!, ¿cómo te fue?—Muy bien, los colombianos y sus comidas se robaron mi corazón—responde esta con emoción.—¡Naylea!— dirige su atención hacia mí—me alegra que estés aquí.Lo saludo un poco tímida, me arrepiento de haber venido, a juzgar por la cantidad de vehículos del parqueo, hay muchas personas.—Vengan, la fiesta es aquí atrás.Salimos al patio, es hermoso y espacioso, tiene una piscina, algunas mesas con sombrillas, sillas de playa y varias parrillas situadas en distintos lugares, al fondo se aprecia a ver un gazebo, distintos tipos de árboles, una pequeña cascada y muchas flores de distintos colores.Nos sentamos