Èliàn estaba casi recuperada del ataque que recibió de Ratzmon. Habían emprendido el viaje de vuelta a Armond para idear un modo de rescatar a Oiluj. Ella y Neithan estaban en la habitación conversando acerca de lo ocurrido y lo que harán cuando la pantalla se encendió y Lin apareció seguida por Ahnya. . - ¿Cómo te has sentido? – Preguntó Lin a Èliàn. - Mucho mejor. – Respondió la muchacha. – Gracias.- ¿Has averiguado algo en relación al mensaje de mi padre? – Preguntó Neithan. - Si. – Respondió Lin. – Y no son buenas noticias. Ìhan descubrió el secreto de La Emperatriz. - ¿Ya sabes como se hizo inmortal? – Preguntó Èliàn sorprendida. Lentamente Lin asintió. Neithan iba a decir algo, pero Lin no se lo permitió. - Antes que nada
- Dime Mordana. – Dijo la Emperatriz sentada desde su trono y oculta bajo la penumbra de su oscuro poder. - ¿Qué has estado haciendo en estos días? – Mordana se encontraba inclinada a los pies de La Emperatriz, a quien sólo se le podían ver la bota. - Hemos intentado reactivar el sistema sonlorts. mi señora. - Es decir, que estás perdiendo el tiempo. - Mordana miró a la Emperatriz. – Típico.- ¿Por qué dice eso mi señora? – Preguntó Mordana con temor.- Porque no podrás reparar eso. – Dijo La Emperatriz. – Está inservible. – suspiró - Creo que como siempre, yo debo hacer las cosas por ti. – Mordana bajó la cabeza. La Emperatriz se levantó. – Quiero que ataques a la luz. – Mordana levantó la cabeza hacia La Emperatriz sorprendida. - ¿Atacar la luz? - Si
- Shainy fue invadido. – Dijo Èhlian una vez que regresara a Armond. Varias personas la seguían. – Mordana mató a mis padres. – Sus ojos estaban rojos por haber llorado toda la noche y a pesar de eso, seguían derramándose lágrimas por sus mejillas. – Intentaba buscar la ubicación de este lugar. – No se soltó el vientre. - Si atacó Shainy, eso significa que podría venir en cualquier momento. – Dijo una mujer que iba detrás de ella. - ¿Dónde está Ìhan? – Le preguntó ella. - En Noha. – Dijo la mujer mientras seguían caminando por pacillos con el suelo de mármol blanco y paredes de cristal por donde se visualizaba el espacio. – Se encuentra con Bog. - Seguro ya puso en marcha mi plan. – Dijo Èhlian. - Deberías descansar. – Le dijo la mujer. - Lo haré. – Se detuvo y se volvió. – Envía un mensaje a Ìhan, dile que me espere en la ciudad de Noha, en el departamento de Bog. Yo iré allá en dos días. - Èhlian
Hacían dos días que habían vuelto de Nueva York. Ely aún no reaccionaba y Juan se había quedado con ella en la habitación que les habían asignado. Por su parte Élián y Neithan se encontraban solos en otra habitación, él estaba desconsolado por la muerte de su hermano y ella lo acompañaba en silencio. - Me entregó la reliquia de Cerpentoide. – Dijo mirando el anillo entre sus manos. – Se reivindicó y murió.- A Mordana no le interesa el sufrimiento de los demás, sólo el suyo. Jessica estaba con Edward, Alanna y Ricardo conversando en el salón. - Hablé con el inspector. – Dijo Edward de pronto. - ¿Qué dijo? – Preguntó Ricardo con interés. - ¿Dónde se encuentra?- En Caracas, han logrado oponer resistencia contra los felinos que se encuentran all&aacu
- Tú habías muerto. – Decía Ely llorando y abrazando a Juan en el momento en el que Èliàn y su tía entraban en la habitación. – Te vi morir y estás aquí. - Y tú pretendías dejarte morir por mí. – Ella soltó y se secó las lágrimas. – No te lo habría perdonado. - Pero…- No tiene justificación. – Juan parecía realmente molesto. – Pero no tendremos esa discusión ahora. Nos compete sólo a ti y a mí. – En ese momento él estaba agachado y se sentó en la cama y la abrazó. - Que bueno que estés bien. – Le dijo Jessica a la muchacha. – Estábamos muy preocupados por ti. - Así es. – Dijo Edward. - Pero ahora podemos ver que no sucedió nada y que todo está bien. – Èli&
El tiempo pasó, Neithan tenía tres años y Èliàn ya tenía uno. Èhlian estaba en su habitación con los niños cuando Ìhan irrumpió con brusquedad. - Tengo noticias de Meithlan. – Èhlian se levantó de la cama mientras los niños jugaban. – Se encuentran en la tierra.- Que bien. – Dijo Éhlian con alivio. - ¿Cómo están todos?- Bien. – Dijo Ìhan. – Iré a la tierra a buscar la reliquia de la tierra. - ¿Ellos la tienen?- Si. Cuando se fueron de la galaxia neutra, la esposa de Meithlan tenía un niño, a Ruth, y estaba embarazada, el tiempo en la tierra pasa muy rápido. Los cuerpos, la materia se adapta a las condiciones que el planeta posea – Èhlian asintió. – Ruth ya es un hombre. – Èhlian asintió. – y el otro niño también – Èhlian se percató de que la expresión de Ìhan cambió.- ¿Qué sucede?- Los Draken se mezclaron entre una raza terrestre y su hijo menor lo quiere destronar. Al parecer, la hija de Mordana se encuentra allá. - ¿Mordana tuvo una hija?- Si. –
- Siento no haber podido hacer más. – Dijo Ely, Habían regresado de Chile y se encontraban de nuevo en el refugio. - No te preocupes. – Dijo Èliàn. – Hiciste lo que pudiste, fue suficiente. - Pero no hice nada. - Hiciste bastante. – Dijo Neithan. – Estuviste muy débil y aún así nos ayudaste. Es suficiente para mí. – Y le sonrió. Todo estaba preparado para regresar a la nave. Àhlian ya se había ido con el libro de Noha para revisarlo. Èliàn y Neithan estaban junto al trasbordador mientras se despedían de los demás. - Fuiste de gran ayuda. – Le dijo Èliàn a Jessica. – Espero que volvamos a vernos. - Yo también lo espero. – Y ambas muchachas se abrazaron. - Bueno, - Neithan hablaba con Edward. – Me alegro de que estés bien y fue un gus
Aparecieron en lo que parecía ser una habitación con paredes de cristal en medio de un garaje abarrotado de naves. Àhlian abrió la puerta y los tres bajaron. A cierta distancia había una puerta con una luz blanca muy fuerte por la cual había aparecido una mujer que parecía tener la misma edad de Àhlian e iba hacia ellos. La mujer iba a decir algo, pero al ver a Èliàn y a Neithan se detuvo y los miró con asombro. - No es posible. - ¿Sucede algo? – Preguntó Èliàn. - ¿Qué no es posible?- Eres Èliàn. – La muchacha se sorprendió al escuchar la confirmación de la mujer. - ¿Cómo…? – Ella no la dejó hablar, había mirado a Neithan. - Tú eres Neithan. Èliàn y Neithan estaban sorprendidos. Instintivamente los dos miraron a &Agr