—Cálmate, todo saldrá bien, está en manos de Mendoza.Miramos al capo, el cuarto que se acomodó para hacerse la cirugía estaba en completo silencio, los aparatos que se trajeron los dejaron sin emitir ningún sonido para no llamar la atención de los rusos.» Creen que no sé en manos de quién pongo la vida de uno de mis hermanos, les recuerdo Mendoza fue el que lideró la operación de mi muerte, mientras me trasladaban a este país, él me operaba y llegando a Estados Unidos se regresó para no despertar sospechas, también tiene nervios de acero.—Ya llevan una hora.—Esperemos.Rata había mandado a hacer un audífono redondo de media diadema para sostenerlo en la cabeza, le hemos hecho todas las pruebas y funciona, pero aún no se lo hemos entregado a Arnold. No queremos correr riesgos, debemos esperar que no tenga ese nimalejo en su cuerpo.—Estoy como si esperara el parto de un hijo. —comentó Cereza. En ese momento salieron los doctores.—¿Todo bien?Afirmó y nos entregó el dispositivo no
—No le sigo señor.—El tema no es mi cuñada, sino que necesito que mates a la hija de Blaz Fischer. —Me levanté.—No hay trato. —Me miró con ira y le sostuve la mirada.—¿Estás negando una orden mía?—No asesino a mujeres, ni niños. —alzó su ceja.—Te lo estoy ordenando. —No me moví de mi lugar.—Sí mato a esa mujer, también mataré a su hermana menor. —El tipo se levantó y se me acercó, no me moví ni un milímetro.—Mi hermana es tu novia.—Haría una excepción a mis reglas. Eso sí, primero mato a Irina y luego voy a hacer el trabajo.—Puedo matarte con solo presionar un botón.—Hágalo ya si quiere. —método de persuasión y presión. Fue él quien bajó la mirada.—Veo que no amas a mi hermana.—La aprecio, pero en el mundo que me muevo no amo a nadie, usted me entiende. Señor Nikolay, no mato mujeres ni niños, se lo dije en un inicio, así me dé cuatro veces lo que yo cobro por mis servicios de asesino. Espero que respete mi código.—¿Puedo saber por qué?—Son reglas que respeto de quién me
—¡¿Dios ya te viniste?! Veo que estabas necesitado de una buena follada.Voy a matarlo, juro que voy a matarlo. Le saqué el dedo del medio, se acercó al computador que ahora tenía frente a mí y puso la clave que memoricé inmediatamente. De una le escribí al patrón lo que necesitaban saber.Ellos respondieron que mañana me harían la intervención quirúrgica, para sacarme el dispositivo del diafragma y eso me alegró. El que se preocuparan por uno de los suyos, puedo ser una escoria, pero siempre he deseado pertenecer a esa hermandad.Y si esta era mi oportunidad para hacerlo, no lo desaprovecharía. Les di las gracias, le volví a recordar lo de Arnold y darle el nombre del enemigo de Nikolay, por nada del mundo debía pisar Alemania. Que una vez al mes les mandaría el reporte por este medio. Di las gracias y terminé la operación.—¿Sabes vaquero? —comencé a negar—. Hazme venir, mañana vuelvo por aquí, así vuelves a ser lo que fuiste el mes pasado.Le hice un amague de un puño, apenas me qu
Hace media hora está Lobo en intervención, Carlina se está comiendo las uñas, la vida de esa niña tiene similitud a la de mi esposa. Estuvo en un orfanato hasta los catorce años, luego la compraron para ser la empleada doméstica de una familia adinerada.Sin embargo, el señor de la casa, tenía cierta obsesión con ella y su mundo oscuro era perdido en la lujuria, abusaba de ella las veces que quiso, hasta que la esposa de Nikolay se enteró de ella, no ha perdonado a su padre por haberla abandonado.Por eso por cielo y tierra la buscó, algo que se debe reconocer de esa mujer fue que sin importar su restricción para pisar Alemania se logró infiltrar con varios hombres ajenos a la nómina de la mafia rusa y fue por su hermana. Al menos ahora no era el objeto sexual de ese magnate.Lo que no sabe ella o eso creo era que dicho señor era primo del enemigo de Nikolay, la vida era jodida y hace unos enredos ni el hijueputas, lo que sí hizo la mente maestra de Roland fue buscar toda la informaci
Las manos de mi marido me recorren mi pierna en la madrugada, desde hace dos días le corté los servicios, me tienen con la tontería que después me cuenta y después y ya van tres semanas de ese cuento.He cumplido con su petición de no salir del rancho, pero él tampoco colabora, después me regaña cuando hago algo que no debía, ¿cómo carajos voy a saber si puedo o no que hacer? Cuando metió su mano entre mi panty y tocó mi entrada que estaba húmeda, ya que tiene cinco minutos haciendo estragos en mi cuello.—Estás mojadita, Vida. —Su voz era una señal directa a mi entrepierna.—Y mojadita me voy a quedar Cielo. —rápidamente, salí de la cama.—¡Verónica!—Verónica nada. —Eran las cuatro de la mañana—. ¿Crees que hablo por hablar?Entré al baño. Tengo que controlar las ganas de hacer el amor con mi marido. Pero él no pensaba dejarme sola. Apenas abrí la ducha lo sentí desnudo en mi espalda.—Hermosa, por favor. —Me tomó la mano y la llevó a su pene—. Mira cómo estoy de duro. —Me hizo puch
—¿Los que se pasaban la mariguana, mientras uno afilaba una navaja y el otro miraba mi carro con ganas de robarse los rines?—¿Se dio cuenta de todo eso mientras pasabas por el lado? —Lo vi medio sonreír, estos hombres son increíbles—. Bueno, hace quince días no me quitó la mirada mientras caminaba de donde me deja el autobús, él caminó del otro lado de la acera y el lunes pasado que hice el mercado también me lo encontré en el supermercado en más de una ocasión y si le soy sincera, no me gusta cómo lo hizo.—Entiendo. Anda, te espero aquí abajo, no tardes y desde ya te informo. Regresarás en un auto.—No… —Me callé. La mirada penetrante del señor Gustavo es intimidante—. No quiero que mi padre se endeude más.—Y qué te parece si te presto un auto mío, o de Roland, o de cualquiera de nosotros. Todos te vamos a ofrecer lo mismo. Solo dime sí aceptas.—Prestado sí, yo me encargo de la gasolina, aquí en el edificio en las tardes estoy cuidando a varios niños y eso me genera un ingreso má
—¡Ay niña! Ven acá.Fueron los brazos de uno de sus hermanos los que me consolaron, estaba cubierta con la sabana, no volvió a decir nada, solo acarició mi hombro. Después de unos minutos me calmé.» Anda mujer, báñate, y con la frente en alto demuéstrale al mundo que tu alma no te duele. Eso te lo diría mi madre. Te espero afuera para irnos al Rancho.—Si señor.Apenas se fue ingresé al baño. Volví a bañarme, estaba en un estado de idiotez aguda y mi estupidez estaba en cuidados intensivos. Estúpida hasta el tope. Me cambié. En la sala vi que el señor Gustavo estaba molesto o más bien preocupado. Sonó su celular.—Patrón… no me contesta… no fue fácil, voy de regreso con Lupe… no es bueno dejarlo solo… quedo más tranquilo, Sí, señor.—¿Pasa algo? —Mira Lupe, hay muchas cosas en juego y aunque no comprendo lo que pasó entre ustedes, Arnold no se fue bien de tu apartamento… ¿Qué tanto sabes de su vida?—¿Se refiere a las crisis de ira, a su niñez en las drogas y el alcohol?—Te dejó e
—Mañana tienes clase. —dije.—Me voy temprano. —seguía sin mirarme.—Tu prometida…—Por favor Lupe, no se me quita la mirada de tristeza y decepción con la que te dejé esta tarde, por favor ayúdame a borrar eso de mi mente. —Me quedé mirándolo.—Güerito mírame. —Al llamarlo como lo hago lo hizo—. No quiero que te cases, pero eso no quiere decir que te odie. Lo de esta tarde… —Sus labios se apoderaron de los míos.—Sirena, te suplico que me dejes borrar esa impresión de que abusé de ti, jamás, jamás ha sido esa mi intención, te juro, me doy un tiro antes de violarte.—Arnold…Lo llené de besos, en cuestión de segundos estábamos desnudos en mi cama, me puso un dedo en la boca—No hables amor, voy a quitarme esto, solo déjame sentirte.Se quitó la media diadema que tenía en su oreja y comenzó a besar, lamer y morder todo mi cuerpo. Sus manotas volvían a lugares donde solo él ha entrado, él ha tocado y saboreado.Sus fuertes penetraciones y su dedo en mi clítoris realizando círculos para