Madison
El dolor llega a mi de golpe, mi cuerpo pide que me mueva. Las imágenes de mi auto en llamas me hacen abrir mis ojos, miro borroso, el ruido de un pitido va y viene, cierro los ojos de nuevo, al abrirlos, la vista enfoca bien, es un cuarto, paredes blancas, huele a limpio, de nuevo el ruido de un pitido, el dolor se intensifica. Gruño en mi interior…mi cabeza va a explotar.
—D-Duele... —maldigo entre dientes. Karim aparece a mi lado.
—Por Allah, has despertado, Habibi. —escucho en su tono alivio, parece que tiene una venda alrededor de su cabeza y una bata azul.
—Karim…—cierro los ojos al sentir el dolor más fuerte.
—Tranquila, estoy bien Habibi. Llamaré a una enfermera, debe de haber pasado el efecto de la morfina. —se mueve hacia la salida, lo veo por completo, efectivamente tiene la bata azul y el vendaje alrededor de
Final de la primera temporada.Karim había quedado sorprendido con la calidez y el amor que le tenían a su padre, todo el pueblo había lamentado la muerte de Falah.Las calles se vistieron de luto, Karim había dejado Toronto ese mismo día y arregló el funeral con ayuda de la gente de confianza de su padre. Su cabeza había estado alerta todo el tiempo, había dejado a Madison en su casa junto con Giorgia, la hermana y había contratado más escoltas para su seguridad, aún en la distancia tenía el temor de que volvieran atentar contra ella, así que, durante la ausencia de él, trabajarían ambas desde su casa. Todo el día estaban monitoreadas, tenían de ayuda a su ama de llaves quien servía desde hace años para él. Karim descubrió que su padre había tenido varios atentados durante el a
Comienzo de la segunda temporada:Karim Burj ha pasado por uno de los peores momentos de su vida, la pérdida de su padre en un atentado. Después de su regreso de Abu Dabi, carga aún con sus secretos y un pasado, un pasado que está regresando para darle respuestas a tantas preguntas que no lo dejan dormir y una de las causas de sus ataques de pánico y ansiedad. Debido a los últimos acontecimientos, decide cortar de tajo toda relación con su asistente personal, llegando a la conclusión que sus enemigos han descubierto su punto más vulnerable:La señorita... Madison Green.***MadisonTirito del frío, estoy esperando a que Karim baje de su avión privado, sé qué podría gustarle este gesto, han pasado semanas desde que se ha marchado a Abu Dabi, por teléfono solo hablamos lo necesario y
MadisonMi llanto cesa, me siento una tonta, intento separarme, pero Karim ejerce más fuerza.—Creo que es mejor que me retire. Yo solo…yo…—balbuceo, Karim se separa un poco, baja su mirada hacia mí, atrapa mi rostro con sus dos manos, me mira detenidamente, puedo ver que se debate. Estoy a punto de hablar, pero él presiona suavemente con un dedo mis labios para que no hable.—Tenemos que hablar. —esas dos palabras me alertan, la frialdad con la que me mira me da un escalofrío.Me separo de él, Karim pone distancia entre los dos, me ofrece que tome lugar en un sillón. Lo hago, esperando a que hable, se acerca al mueble de las bebidas y se sirve.—¿De que es lo que quieres hablar? —mi ansiedad crece. Karim toma un largo trago, luego se gira hacia mí en silencio y en el mismo lugar.—Lo que tuvimos&hell
MadisonLas puertas del elevador se abren, he llegado al lobby, mis zapatillas suenan contra el mármol como espejo, tomo aire discretamente, mi corazón late acelerado, lo que acabo de hacer, ha sido…—Señorita Green. —escucho a mi espalda, me vuelvo por un momento y es Josef.Me detengo, estoy a unos cuantos pasos para cruzar las puertas dobles de cristal. Aprieto el cordón de mi bolsa.—¿Qué pasa, Josef? —Josef se acerca y hace una inclinación breve.—Las llaves del auto…—extiende las llaves, arrugo mi entrecejo. —El señor Karim dice que es suyo.—Josef, no voy a aceptar nada del señor Burj, es más, puedes decirle que se quede con mi liquidación, pero como he renunciado yo misma, que se quede con lo que me corresponde, no me importa.Una sonrisa aparece en sus labios
MadisonEstoy cruzando la acera para llegar al edificio de espejos, esta misma mañana había enviado solicitudes en línea a varias empresas con vacantes; antes de salir del departamento, Exportadora Asad-Bakri, había llamado para una entrevista inmediata. Entro al lobby, me sorprende al ver tanta elegancia en un mismo espacio, tiene techos altos con tragaluces en distintos puntos, en el centro del lobby se encuentra una gran lampara colgante, en forma de diamante, que al menor movimiento y con los destellos de los tragaluces, brillan. Estoy con mi maletín en mano, mirando impresionada el hermoso paisaje sobre mí.—¿Señorita Green? —bajo la mirada para ver a la persona que me ha llamado, me doy cuenta de que es una hermosa mujer, cabello rubio, entallada en un conjunto ejecutivo en color rojo sangre, su sonrisa perfecta de anuncio de pasta de dientes, aparece en todo su esp
Karim Estoy en la parte de atrás de mi auto blindado, desde aquí estoy viendo como Madison sale del edificio de Asad.—La señorita Green…—interrumpo a Mohammed .—Lo estoy viendo yo mismo. —Ella luce radiante, luce tranquila… ¿Cómo es que puede estar así? Yo no he dormido bien desde que me desafió al renunciar ella misma de mi empresa, desde que tuve que dejarla ir, ¿Acaso Asad le ha dado trabajo? ¿Cómo es que Madison ha llegado aquí? Veo como Madison levanta su mano para detener un taxi. Sube y el taxi se mete entre el tráfico.—¿Vamos a seguirla? —pregunta curioso, Mohammed.—No. No es necesario en este momento, espera aquí. —Bajo del auto blindado, entro al edificio de Asad, la intriga me carcome por dentro, ¿Por qué Madison a llegado ha
MadisonSubo al elevador toda temblorosa, las puertas se cierran, presiono el botón del piso de recursos humanos.—Calma, Madison. Calma…tienes qué…—las lágrimas se asoman e inmediatamente con los pulgares las barro, cierro los ojos e intento tranquilizarme, mi corazón late desbocado, ha sido una sorpresa ver a Karim en la empresa de la competencia.Las puertas se abren, me concentro en encontrar la oficina donde tengo que entregar mi documentación, una mujer rubia, alta, en un conjunto ejecutivo, color blanco y de corte elegante, me sonríe amablemente.—Pasa, Madison, bienvenida. El señor Asad, me ha informado que ya tiene el reemplazo para el puesto de secretaria de presidencia. —la mujer me señala la silla frente a su escritorio, le entrego la carpeta con la documentación ahora si completa.—Si. —le sonr
Karim Marco el número de Madison, el reporte que me han dado hace unos momentos me hacen querer arrancarme la cabeza de la incertidumbre. ¿Qué tiene que hacer Madison en el hospital? Estoy a punto de ir personalmente y averiguar esa respuesta por mi mismo.—¿Por qué nadie puede darme más información? —le digo a Josef, mi jefe de seguridad.—Están averiguando, señor Burj.—¡Qué sean más rápidos! —golpeo la superficie de mi escritorio, después de mi visita en empresas de Asad, había regresado a la empresa con un dolor de cabeza después de mi ataque de ansiedad.Josef llama desde su móvil intentando encontrar la respuesta a mi pregunta. Después de unos momentos, cuelga.—Señor Burj…—lo interrumpo ansioso.—Dilo, dilo, &iqu