DORIAN: Trabajo y más trabajo es lo que hago, vivo sumido en todos mis pensamientos alejado de las personas, cuando solo quiero paz y tranquilidad me refugio en mi habitación, me quedo a veces leyendo un buen libro hasta quedar dormido, es más ni siquiera me meto a la cama basta con quedarme en el sofá que da justo a la ventana donde al salir el sol siento los rayos sobre mi rostro. Mamá me recrimina el por qué soy distante con ella, aunque ni yo mismo lo sé, éramos muy unidos cuando era pequeño y de pronto me fui alejando sin razón alguna.
– ¡hola baby! –llega entrando sin tocar como siempre mi pesadilla… Alexa, mi ex novia.
– ¡cómo demonios te atreves a pasar sin anunciarte!
–Pero que carácter ese amorcito, no debes tratar a una mujer así –sale reprochándome ahora ella, lleva puesto una minifalda demasiada corta y acaricia una de sus piernas para provocarme según ella es lo que cree.
–mira Alexa vete que tengo mil cosas por hacer.
–no seas así chiquito… mejor déjame –y detengo su próximo movimiento antes de que haga algo de lo que yo mismo me arrepienta después.
– ¡vete! es mi última palabra, ya no somos nada… ¿lo recuerdas? o quieres que te refresque la memoria.
–no sé porque sigues tratándome asi cuando lo único que quiero es… amarte Dorian, acaso no estás dispuesto a todo por nosotros –habla mientras su rostro denota “consternación” pero ese jueguito conmigo ya no funciona.
– ¿“Nosotros”?, jamás lo hubo y habrá, Alexa estoy demasiado ocupado con mis cosas y…
–siempre es lo mismo Dorian, jamás tienes tiempo para nada, pero yo estoy dispuesta a eso…
– ¿a qué te refieres?
–a soportar tus cambios de humor bebé –y camina para acercarse lo suficiente a mí, colocando sus manos sobre mis hombros a lo cual observo de reojo muy serio.
–sabes que… estoy harto de tu actitud Alexa, pensé que había quedado claro el que te alejaras de mi o tendré que tomar medidas muy drásticas –respondí zafándome de su “seducción barata”.
– ¡medidas cariño! por favor Dorian jamás harías algo asi –contesta con ironía y sé que está molestándose por mis amenazas.
–Estas advertida… te sigues metiendo en mi vida y mando a “fusilarte” –respondí con burla ahora, es obvio que al decir eso lo único que le advierto es… el meterla presa por acoso. – ¿por cierto… linda no olvides que con todo el dinero del mundo puedo mover lo que sea con solo chasquear un dedo? –seguí hablando con burla y noto como se molesta por mi respuesta tan repentina.
– ¡eres un insensato! –responde rodando los ojos furiosa y se da la vuelta para irse.
Alexa Rossi una mujer muy sofisticada y hermosa, fuimos novios un par de años pero nada del otro mundo, me fatigo su carácter de niña caprichosa e insoportable, nos conocimos en un bar, llegue a tomar una noche para "relajarme" no suelo hacerlo ya que me encanta vivir en mi habitación pero a veces siento que es necesario una pequeña distracción para salir de mi rutina, estaba sentado en la barra tomando un vodka y de pronto ella se acerco, llevaba puesto un ajustado vestido color azul, su cabello largo y ondulado que llegaba hasta la cintura al principio no le puse mucha importancia pero ella comenzó con su juego de "seducción" apenas compartimos un par de palabras y claro... solo buscaba diversión por mi parte por lo que frecuente un poco más el lugar, ella todas las noches llegaba según me contaba y así fue... compartimos números y comenzamos a charlar hasta hacerlo casi rutina, ella iniciaba como abogada por lo que le ayude con comprar un lugar donde pudiera tener su despacho propio y nos hicimos tan íntimos que iniciamos la relación, de la cual ahora me arrepiento jamás pensé que una mujer tan hermosa fuera el mismo infierno, claro está el carácter ambos lo teníamos y eso chocaba a leguas, decidí terminar con ella, no quería nada que me atara como un matrimonio, mamá sigue “asechándome” con que le dé un nieto pero me niego rotundamente, amo mi vida de soltería y basta con aguantarme a mí mismo y mis mil demonios que soportar el tener un hijo o una familia.
Alexa además de ser una abogada exitosa es una mujer que engatusa a cualquier hombre con tal de satisfacerse a sí misma y yo estaba cansado de ese juego, el tiempo que estuvimos juntos jamás me fue infiel o es lo que suponía yo por mi parte nunca mantuve relación con ninguna otra mujer no mientras estaba con ella pero un día simplemente me canse de ella pero creo que Alexa sigue insistiendo con el hecho de regresar, es tediosa y ya me canse de su inepta actitud sigue buscándome, me llama o escribe a todas horas y por más que la bloquee sigue en las mismas, parece una víbora metida hasta en mi sopa. Llego a casa cansado son casi las nueve de la noche, me doy un baño frio para quitarme el estrés que cargo y bajo a la biblioteca a tomar un whisky para por lo menos relajarme.
Abro apenas los ojos y para mi sorpresa oigo la voz de un niño fuera de mi habitación, me levanto y justo lo que sospeche está corriendo justo en el pasillo de la casa, me molesta ver mi paz siendo interrumpida y más por un… ¡niño!.
–Hola –se acerca a saludarme tímidamente mientras entre sus manos veo un auto de juguete, claro… es uno de mi colección de autos, frunzo el ceño molesto al verlo tomar algo que es mío.
– ¡Dorian ni pienses gritarle al niño! –llega mamá para defenderlo, su repentina reacción me ha tomado por sorpresa, como es posible que lo defienda y más aún… ¿de dónde salió este intruso?
Me quedo pasmado un breve instante reponiéndome por lo que acabo de presencia, jamás en esta casa han habido niños y mucho menos conozco o se que las amigas de mamá tengan nietos, además este niño salió de la nada y ni siquiera se de donde lo conoce mamá, pero lo defiende a capa y espada es lo que pude notar ahorita que lo vino a defender.
Ya que mi vida es pasar en la oficina sumido en mis cosas no he tenido el que volver a ver a ese niñito, mamá incluso ni siquiera habla de él, como se llama, o donde vive, quienes son sus padres jamás me ha dicho algún dato sobre él aunque lo claro que tengo es que solo llega de lunes a viernes y fin de semana no se aparece hasta he pensado que ha de ser un tipo de fantasma, los sábados y domingos mamá antes lo ocupaba para sembrar flores, ordenar su habitación, salir con sus amigas por un café o reunirse en casa para pasar horas y horas platicando de sus cosas pero creo que se le esta haciendo costumbre el ver revistas para lo que creo que será comprarle cosas a ese niño.
— ¡ven pequeño, vamos al jardín! — le dice mamá dirigiendo una mirada “amenazadora sobre mi” —no digas nada Dorian — sigue recriminándome y veo al “intruso” ese llevarse el auto de mi colección, el que tanto me costó encontrar, bufo y me devuelvo a mi habitación, no se quien sea ese niño y que hace aquí pero es más que claro que mamá lo adora.El fin de semana decidí quedarme en casa a descansar, bajo al comedor donde ya se encontraba mamá desayunando su exquisita sopa de siempre.—Buenos días —digo serio como siempre.—Buen día amor… — veo como sigue pegada su vista en la Tablet y busca… no sé qué cosa allí.— ¿Qué haces?—quiero hacer unas compras, ya sabes… con todo el dinero que tenemos podrí
HELENA: Aun sigo sin poder creer que la sra. Paty fue tan linda al regalarle todos esos juguetes y ropa a mi Antonio, es una mujer en verdad de muy noble corazón, no quería aceptar al principio pero dijo que se molestaría si yo rechazaba su regalo, entre todas las cosas que llevaba había un auto de juguete a control remoto, el que Antonio tanto desea tener y verlo tan feliz me llena de satisfacción.Los siguientes días fueron como los otros, tanto trabajo por hacer y quedándome hasta casi tarde para poder dejar todo en orden.—Helena hija… ¿dejarías que me lleve a Antonio al parque? —llega diciendo la sra. Paty a la cocina donde me encontraba acomodando unos platos. Veo a Antonio y esa sonrisa me lo dice todo, él la quiere mucho, asiento con una leve sonrisa, sé que la pasaran muy bien como siempre me digo a mi misma. Escucho el motor del auto donde ellos se van y me quedo a
Los siguientes días he estado más tranquilo con lo del trabajo, creo que si me era necesario el descanso, he estado observando a mamá desde mi habitación como juega con el pequeño “intruso” sonríe mientras juegan e incluso me ha tomado por sorpresa el que ahora invadieran el cuarto de juegos donde un día yo también me divertí de niño.—Tanto adoras a ese niño que ahora invadieron mi cuarto de juegos —me cruzo de brazos en la puerta de la habitación de mamá.—no seas asi Dorian además tú ya estas grande y bueno… alguien tiene que ocuparlo ¿no? —contesta mamá con tranquilidad y por ello es obvio que quiere hacerme enojar o es lo que creo.—si pero…—no seas asi hijo hay que compartir —dice dándome una leve palmada en la mejilla y saliendo de la habitació
DORIAN: — ¡amor te busca Alexa! —entra mi madre a mi habitación sin tocar donde me encontraba listo para dormir algo.— ¡que! —respondo molesto al escucharle.—no seas grosero Dorian baja al menos a saludarla.—perdóname mamá, pero no iré a verla dile que se vaya… “la llamare luego”—por favor Dorian solo saluda a tu única amiga… jamás te visto a un amigo más que solo a Franco y a Alexa, no sales, no te diviertes… no es bueno que este solo y encerrado tanto tiempo —me reprocha mi propia madre.—prefiero la soledad —digo a esto último y me pongo en pie para encerrarme en el baño hasta esperar si es necesario que mi madre me deje solo, luego de un breve silencio escucho la puerta cerrarse, no oigo ruidos y aunque mi actitud parezca de un niño no me importa mi madre no me o
HELENA: Este domingo y como todos creo yo, decidimos no salir con mi pequeño, la semana estuvo exhausta en todos los sentidos, aun no se ni como pagarle a la Sra. Paty por amar tanto a mi Antonio, incluso adora tenerlo a la hora de las comidas, ella dice que se siente a gusto platicar con él, a pesar de que mi pequeño tiene tan solo cuatro años, habla muy bien y es un platicador, pero por una parte me pone nerviosa el que este allí, sé que al hijo de la Sra. Paty no le gusta que invadan su espacio y no quisiera problemas.—Mami podemos ir con Abu —se acerca a mi Antonio mientras le preparo su chocolatada.—No amorcito será mañana hoy nos quedaremos a ver películas —respondo sentándome de cuclillas para quedar justo a su tamaño.—pero quiero ir… —y veo esos pucheros asomarse en su linda carita.—Sera mañana cariño.
—No… no trabajo aquí solo venia de paso —supe responder y él sonríe e iba a decir algo cuando…—Franco… te necesito inmediatamente —oigo su voz malhumorada y apenas si se asoma a la puerta.—Adiós —es lo único que me dice y me regala otra de sus perfectas sonrisas y le correspondo con una, salgo de allí y al estar fuera donde estaba el auto estacionado siento como si hubiera salido de prisión. Llego a la mansión y al entrar esta mi pequeño Antonio quien al verme deja sus crayones a un lado para abrazarme.— ¿Dónde estabas mami? —dice con sus bracitos rodeando mi cuello.—Salí un momento a… —y me besa con ternura, adoro ese gesto de mi pequeño.***aca quede sigue este+DORIAN: —perdiendo el tiempo como siempre —supe que decirle a mi amigo quien ib
Por la mañana veo a mama sentada desayunando y me saluda con amor como siempre, claro si no está el intruso…—Alexa iba muy mal ayer… ¿acaso pelearon? —comienza hablando mamá para terminar nuestro silencio.—no quiero hablar de eso mucho menos de ella.—Dorian… no es bueno que pelees con tus pocos amigos… a pesar de que ya no están juntos me pone feliz que mantengan una amistad…—Yo no necesito amigos mamá —recrimino embarrando un pan con jalea.—no seas asi de duro Dorian…—me voy, tengo que irme a la oficina —me pongo en pie y beso sus cabellos, sé que no tengo porque ser asi con ella… pero si le digo las intenciones de Alexa no sé si me crea… ella la ve como a una hija y la ha llegado a apreciar mucho.HELENA: Veo en el periódico que buscan a una asistente para
— ¡estas invadiendo mi espacio atente a las consecuencias! —le recrimina el, no sé qué hace la novia aquí… si no llego a la cena, decide aparecerse en el último momento es lo pienso. Ambos se ven con miradas frías y él se marcha dejándola con la palabra en la boca mientras ella aprieta sus puños y me voltea verme rápidamente.—Ya entiendo la servidumbre con el señor de la casa —habla y me mira con desprecio cosa que no soporte más.—Mire señorita nada le da el derecho de tratarme asi, a usted que le importa si soy de la “servidumbre” como usted dice pero a mucha honra… al menos no soy una tipa arrogante y castrosa como usted… con permiso —y paso empujándola mientras ella me ve con maldad sentía que iba a hacer erupción la mujerzuela esa.Llego al cuarto de juegos y tomo a mi niñ