Capítulo 430
—¿Qué tonterías estás diciendo? ¿Estás buscando una paliza o qué? —Celeste lo miró con fastidio, fulminándolo con la mirada mientras le respondía con un tono severo: —Eres mi hermano menor, siempre ha sido mi deber protegerte, y hoy fuiste tú quien me protegió. ¿Cómo podría enojarme contigo por eso?

—Me alegra escuchar eso,— respondió Juan, esbozando una sonrisa juguetona.

Después de la pequeña charla, los dos continuaron paseando por la zona comercial de Solestia. Durante el recorrido, Celeste no escatimó en gastar para su hermano, comprándole ropa y una variedad de productos de aseo y cuidado personal.

Una hora más tarde, al regresar a la mansión de la familia Abarca, se encontraron con todos los miembros de la alta jerarquía reunidos en el salón principal, en medio de un ambiente tenso y sombrío.

En cuanto Abuela Abarca vio entrar a Celeste, la reprendió con frialdad: —¡Mocosa insolente, arrodíllate ante mí de inmediato!

Celeste frunció el ceño, claramente desconcertada, y respondió
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo