Capítulo 39

—¡Por los cielos y las estrellas! ¡Una, dos y tres veces malditas sean estas llamas infernales!

Kyrios se desplomó en el suelo, sujetándose la boca como si intentara mantener a raya un enjambre de abejas enfurecidas.

—¡Maldición, eso fue como besar el mismísimo sol!—rugió, levantándose con una mezcla de indignación y asombro. Sus ojos, dos brasas encendidas, se clavaron en la pelirroja que parecía la mismísima encarnación de la ira divina—. ¡Escúchame bien, hechicera de pacotilla! ¡Casi conviertes mi lengua en cenizas! ¿Tienes idea del sacrilegio que has cometido?

Pero su furia se evaporó tan rápido como el rocío al amanecer al ver a Beltaine, su figura era un lienzo de desorden y deseo. Ella seguía recuperando el aliento, temblando bajo el abrazo invisible de la petite mort que se había apoderado de su ser. Tan frágil, tan expuesta, tan… suya.

El lobo interior de Kyrios aulló, un temblor sutil pero poderoso.

¿Qué brujería es esta? Siempre tan esquiva, siempre tan afilada con sus pala
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo