Capítulo 278
Lo de mi lesión, absolutamente no podía saberlo Carlos.

No quería que supiera por mi situación, porque si lo hacía, seguro me miraría con esa actitud tan altiva, burlándose de que mi vida no iba bien desde que me alejé de él.

—Si no quieres hablar, no hables. ¿Acaso pensaste que quería escuchar?

Perdió el interés y apretó con fuerza el tobillo que tenía en sus manos. Sentí un dolor agudo.

Sin embargo, el dolor físico era mucho más fácil de soportar que el dolor emocional.

Él siempre hacía lo mismo, decía cosas ambiguas, intentando que me ablandara, y cuando veía que eso no funcionaba, recurría a la fuerza.

Pero, ¿cuánto de lo que hacía era sincero y cuánto era pura fachada?

Ya no tenía fuerzas para dar ni una pizca de cariño a su ego, porque ya había dado más de lo que podía soportar, tanto que solo recordarlo me causaba dolor en el pecho. No podía dejarme manipular de nuevo por sus juegos.

Que haga lo que quiera.

Pero no iba a dejar que me tocara.

Sonreí de manera provocativ
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo