Jacob. Lame a Dalila, dijo el chucho. La curarás, dijo el chucho. Estúpido chucho. Mi pareja me había abofeteado y ambos nos mirábamos sorprendidos. -¿Por qué me pegaste?- Dije con voz calmada aun sosteniendo su pierna. Eso la hizo reaccionar. -¿Por qué m****a me lames?- Dijo con dientes apretados. -Porque el chucho antes de dormir dijo que eso te curaría. - Dije con voz baja y peligrosa. -Oh... de acuerdo. Continúa. – Dijo con total calma. -¡¿Qué?! – Dije perdiendo mi muy fingida calma. - ¡¿Por qué m****a no haces escándalo cundo la idea es de Kell?! Y más importante, ¿Dónde está mi jodida disculpa? Ella resopló divertida. -Confío en Kell. Nunca haría algo para lastimarme y, si dice que eso me curará, yo le creo. – Dijo con un gesto despectivo de la mano. - En cuanto a tu disculpa: Puedes jodidamente sentarte y esperar. ¿Acaso te he pedido disculpas por morderte o por pegarte en las bolas? Te mereces eso y más a pesar de que esta vez haya sido con buena intención. Tengo gana
-En el primer piso, le dieron fuerte y probablemente tenga una contusión como mínimo. -Dijo Clara preocupada mirando las escaleras.-Ve por él, lo necesitamos, por favor.Clara se fue y Dalila me dejó seguir analizando la situación.-¿Piensas dejar que Charlie escolte a los civiles hasta aquí? Necesitará balas extras. - Dijo Dalila a mi derecha adivinando correctamente parte del plan.- No creo que nos sobren lobos para enviarlo con una escolta.-Si, pero no irá solo. Tú y yo lo acompañaremos.- Dije mirándola por fin.- ¿Te encuentras mejor?-¿Mejor?- Dijo después de unos segundos mirando mis labios. Yo sonreí a sabiendas y ella me fulminó con la mirada. - Si, me siento bien.-De acuerdo, ¿Crees que puedas curar a unos pocos lobos más y marcar a otros tantos?- Pregunte preocupado.-Sí, soy la superloba Alfa ¿No te has enterado?-Dijo con una sonrisa coqueta.-Algo me han dicho.- Dije volviéndome suicida y tomándola de la cintura. - Hablando en serio, dulce... gracias por ayudar a la manad
Dalila. (Unas horas antes)Mi grito me asustó incluso a mí misma. El hombre que me abrazaba por la espalda también despertó y dos segundos después un lobo saltó de la cama gruñendo en todas direcciones excepto a mí. Iba por mi segundo grito cuando una voz conocida me tranquilizó, pero también implicaba algunas cosas... cosas como que había dormido con mi hermanastro.*Mi hermoso ángel, ¿Qué sucede?-Uh... yo... ¿Cómo llegamos aquí?- Pregunté mirando al rededor. Fue una gran fiesta pero no tan salvaje ¿O si?*El humano idiota te cargó; anoche fuiste drogada mi tierno amor. ¿Cómo te sientes?-¡Oh! Si, eso explica mucho. Me siento bien, lobo bonito, solo estoy un poco confundida y muy amnésica.*No estuve contigo por un rato, tristemente, pero puedo rellenar la mayor parte de tu noche si quieres dulce corazón.-Eso sería bienvenido, muchas gra...Mi mirada se detuvo en la ventana de piso a techo al reconocer mi letra. ¿Qué mierda...?*Una gran obra de arte, si me lo preguntas. Debiste de
Dalila.Por el camino a la salida los recuerdos inundaron mi mente:*Debo partir, mi amado ángel.-¿A dónde vas?- Pregunté. Estábamos muy cómodos... O al menos yo lo estaba.Me explicó que tenía que hacer un poco de guardia y luego corrió a la salida.*¿Sabes?- Dijo mi loba. - Estoy un poco enamorada, Kell es el lobo perfecto... ¿Y si lo secuestramos y nos lo quedamos?Yo solté una pequeña risa.-¡Y ahora, damas y caballeros! ¿Hay algún valiente que quiera desafiar a nuestra campeona? -Dijo Evan tomando el micrófono. Grayson había desaparecido en algún punto de mis impresionantes victorias. Me sorprendió que tuviera las pelotas para pararse frente a todos sin importarle nuestros mensajes y grandioso maquillaje en su cuerpo.-¡Yo la reto por el título oficial! Una carrera, el ganador se lleva todo. - Dijo una voz entre el público.Sonreí y le pedí el micrófono a Evan.-¿Y qué estamos apostando?Los lobos en el lugar se volvieron locos y gritaban sugerencias sobre la apuesta.-Un millón
-Hay una clara diferencia entre llamar mi atención jalándome el cabello a los cinco años y tratar de matarme a sus... ¿Qué? ¿Veinticinco?-Veintiseis. - Dijo Evan.-Bueno, es solo mi opinión, pero podría asegurar que solo es estúpido porque no sabe expresar sus sentimientos. - Dijo Charlie encogiéndose de hombros.-Yo tampoco sé expresarlos y no me ves caminando hacia él para arrancarle los ojos de gigoló. - Dije a la ligera.Bailamos más canciones y nos despedimos de las parejitas de nuestros amigos. Evan y Charlie prometieron quedarse conmigo hasta que me quisiera ir. Yo estaba bien con eso porque actuaban como un muro natural entre los otros lobos solteros y yo. Ya me encontraba incómoda al saber que varios lobos le habían pedido permiso a Paps Gabe para cortejarme y no estaba lista para enfrentar a mis pretendientes todavía. Estúpido Grayson, ahora tenía que rechazar a mis "citas".*¿Por qué? Puede que alguno merezca nuestro tiempo.Yo ignoré a mi loba. No estaba en condiciones de
-En realidad, no me siento muy bien... Jacob me cargó hasta el baño y yo me incliné hacia el lavabo. Dejé correr el agua fría cuando comencé a sentir que mi cuerpo se sobrecalentaba. M****a, no volvería a beber; seguramente éste era mi castigo por ese último vaso... que, ahora que recordaba, sabía diferente... Una nueva ola de mareo me redujo a una bola temblorosa en el cuarto de baño. Luces de colores nadaban en mi campo de visión y en la esquina vi un hermoso vals entre dos ranas enamoradas. Que bonito. -¿Dalila? -¡Shh! No interrumpas, estoy segura de que la rana le pedirá que se casen. Míralos bailar, son una pareja hermosa... -De... de acuerdo. Vamos, el doctor te verá en unos momentos. -¿Podemos quedarnos hasta que se besen? Nunca he visto cómo se besan las ranas. -Lo siento cariño, necesito que el doctor te revise...-Yo comencé a gimotear por la injusticia- ... pero podemos regresar para la boda. -Oh... está bien. Me gustan las bodas. - Dije sin poner resistencia cuando
Dalila. A la m****a los recuerdos, culparía al alcohol. Bajé los escalones y me encontré con una pequeña reja que impedía el paso a este piso. Intenté desbloquearla y para mi suerte estaba abierta. Con una sonrisa la atravesé y luego la azoté porque podía. Era mi "Jódete Jacob" alto y claro. Mientras continuaba mi recorrido por la casa de la manada en mi búsqueda implacable por la salida, recordé poco a poco la noche anterior. No podía creer que el bastardo me dejara pintar su ventana. Me encogí de hombros, se lo tenía merecido y no me iba a disculpar por ello. El resto de la noche y las partes sexys preferí dejarlas a un lado por el momento; no quería analizar mis sentimientos. *¿Estamos en negación? *Estamos en shock. Le dije muy segura a mi loba mientras ella se partía de risa. *¿Cómo puedes encontrar divertida la situación? *Uh, bueno... es reír o llorar sobre nuestra suerte cada que nos emborrachamos y a mí me gusta ver el vaso medio lleno. Yo suspiré. Menos mal que mil
Dalila. (Actualmente)Jacob corría por el bosque con Charlie corriendo tras nosotros. Ignoraba si iríamos a la casa de la manada por armas o si llegaríamos directo a la acción. Menos mal que lo que sea que había hecho Jacob estaba curando mi pierna, ya casi no me dolía. Ese último exiliado me había mordido hasta el hueso, maldito.-Oye chico amante. - Dijo Charlie resoplando. - ¿Por qué no me cargas también? El débil humano soy yo. - Dijo entre jadeos.-Porque ella es una princesa, tú solo eres una damisela en apuros. - Dijo escaneando los alrededores. - Estamos cerca, mantente alerta y cuídate de los colmillos.-No son los colmillos lo que me preocupa. Ustedes son muy fuertes, aún me duele la cabeza. ¿Estás seguro de que te seré útil si llego vomitando mis entrañas?- Dijo esquivando algunas raíces.-Pobre Charlie, ven aquí. - Dije palmeando mi regazo. - Estoy segura de que el idiota puede llevarnos a los dos. - Dije pestañeando inocentemente en dirección a la mirada molesta de Jacob