Jacob.

*¿Por qué tengo que ser yo el que consiga las respuestas? Cualquiera de ustedes puede salir y hacer el interrogatorio.

Silencio.

Eran unos malditos bastardos. No les bastaba con desacelerar el proceso de curación para que me doliera todo el cuerpo, sino que también tengo que jugar a que no quiero partirle el cuello a esta loca traidora.

-Te han dejado bastante mal. - Dijo con ojo crítico Brianna cuando entramos a lo que parecía ser su habitación.- Vamos a la ducha, estoy segura de que te verás mejor en cuanto te enjabone la espalda.- Dijo con una sonrisa “coqueta”.

O al menos pienso que estaba coqueteando conmigo; con las personas dementes nunca se sabe.

Me dejé arrastrar hasta el dichoso baño que no era más que un pequeño armario con baldes de agua de procedencia y olor dudoso.

-Sé lo que estás pensando. - Dijo mientras me ayudaba a meterme al balde más grande de agua.- Se ve mal, pero en cuanto hagan su estúpida ceremonia, me cambiarán a los cuartos de la gente importante y n