-Michael, ¿cuándo vas a traer a una chica a casa? Sólo veo que les sonríes, les guiñes un ojo, pero nunca te veo con ninguna. ¿A caso no te gustan las mujeres?-Claro que me gustan, simplemente no quiero una novia en este momento, me gusta coquetear con ellas, pero en cuánto salimos me doy cuenta que no tenemos nada en común y simplemente me despido cordialmente y dejo claras mis intenciones para no herir sentimientos.-Erin, Hanna y Harry, Josh. Quiero que le presenten chicas a su hermano, no vaya a resultar ser un desviado.-Ja ja ja. No creo que lo sea papá, pero está bien. Aunque opino que Michael es joven y debería poder decidir con quién salir y cuando hacerlo.-No digas tonterías Erin, cualquier hombre normal estaría deseoso por tener a una señorita en su cama a la edad de tu hermano, ¿cómo es posible que él no?Sin más que decir, los muchachos presentaron a Michael a 9 chicas en total, todas fueron rechazadas por el apuesto pero delgado chico de 19 años.Las jovencitas no most
Al notar el rostro sombrío de su prometido Ashley se sintió obligada a complacerlo para que no se arrepintiera. Ciertamente las dos familias se llevaban muy bien y tenían acuerdos de negocios, el matrimonio los uniría más y convendría a ambas familias, así que casarse era la mejor manera de mantener las empresas lo más alto posible.-Amor, ¿Por qué no damos una vuelta por el jardín?Michael no se resistió y acompañó a la joven por el hermoso jardín de tulipanes de la mansión, al llegar ahí la joven sentó a Michael y se sentó en sus piernas, comenzó a desabotonarse la blusa y tomó la mano derecha del chico y la metió debajo de su sostén, acto seguido comenzó a gemir.-Tócame.Hazme tuya.¡Mmm!-Ashley, nos van a ver, las camaras, tus padres y mis padres están adentro.-¿Qué importa? Vamos a casarnos. ¿A quién le importa si nos tomamos aquí el uno al otro?-No, Ashley, a mi no me gusta actuar así. No importa si nos casamos, yo soy una persona decente.-¿Qué tiene que ver esto con la dec
Ashley se enfocó en fingir que sería la esposa perfecta, compraba el desayuno para Michael y lo llevaba a su oficina, ordenaba a la servidumbre que lavara y planchara su ropa y se la llevaba a casa, por supuesto no haría nada de eso con sus propias manos, no sabía cómo y tampoco tenía intenciones de convertirse en una mujer del hogar.Después de realizar su rutina con su prometido pasaba por la oficina de Justin antes de marcharse y tenían una sesión de sexo intenso por todos los rincones de ésta.-Me encanta que me lo hagas, tú si sabes ser un hombre. No como el tonto de tu amigo.-¿Qué pasará con nosotros cuándo te cases?-Nada, no tiene por qué pasar nada. Seguiremos siendo amantes. Nada tiene por qué cambiar.-Sólo hay un problema, tendremos que vernos en otro lugar o nos descubrirán, no es normal que vengas a encerrarte todos los días conmigo.El idiota de Michael podría no notarlo pero sus perros falderos sí. -Está bien, buscaré un lugar más apropiado para vernos y te enviaré l
-¡Te casarás! Ya he arreglado todo, hoy vendrán por tí y firmarás un contrato prematrimonial, te irás y no volveré a verte nunca ¡maldita bastarda!Dijo Irina a su hija Sofía dándole una patada en el estómago. -¿Por qué me odias tanto? ¡Eres mi madre, se supone que debes amarme!Sofía se quejaba, pero Irina no contestó, la había odiado desde el día en que se enteró que estaba embarazada de ella. Intentó venderla muchas veces pero siempre algo lo arruinaba todo, esta vez lo había logrado a través de un intermediario por nada menos que 100 millones de dólares, no conocía al comprador pero esperaba que fuera tan malo con ella que la hiciera desear estar muerta.Dos horas más tarde un hombre sudoroso de unos 200 kg tocaba a su puerta. Irina abrió y dejó entrar al sujeto de mirada hosca.-Vengo por Sofía, aquí está el contrato, sólo tiene que hacerla firmar y el dinero será transferido a su cuenta. Mientras más rápido firme mejor será para todos.-¡Sofía! Ven aquí estúpida.Gritó Irina ar
-Mi... ¿Mi esposo? -Así es, ¿por qué te sorprende? Le dije al gordo Jack que te lo informara en cuanto subieran al avión.-¡Pues no lo hizo!-Bueno, eso ahora ya no tiene importancia, mi nombre es Michael Adams y soy tu esposo, como te habrás dado cuenta firmaste un contrato que te prohíbe divorciarte de mí, así que más vale que te acostumbres y empieces a amarme porque no te dejaré ir.Sofía estaba atónita, durante todo el día había pensado que su esposo era aquel hombre gordo y sudoroso que había negociado con su madre y además la había golpeado, no obstante, descubrió que no era así, al parecer todo había sido una farsa para engañar a su madre, si Irina hubiera sabido que este Adonis era quien estaba pagando por ella la habría ocultado hasta por debajo del agua antes que dejarla ir con él. Para Irina Sofía no merecía ser feliz, menos con alguien como él; guapo, atractivo, elegante, adinerado y sexy... -¿Amarlo? Yo ya tenía a alguien antes de venir aquí y usted me apartó de él. ¿Po
-¿Qué? Eso nunca pasará. ¡Jamás amaré a alguien como tú!Como pudo apartó a Michael de su cuerpo y recuperó la compostura, no sabía exactamente que le había sucedido pero había perdido el control en un instante, eso no podía volver a sucederle o terminaría perdiendo más que su control con ese hombre que aunque era muy apuesto la había apartado del que ella pensaba era el amor de su vida, eso jamás se lo perdonaría.(No puede ser, mis pantis están mojados. Este hombre...)-Yo no estaría tan seguro si fuera tú, ni siquiera te besé en los labios y ya estabas gimiendo, estoy seguro que, en poco tiempo estarás suplicando porque te haga mía, pero no te preocupes no soy rencoroso, si me lo pides te complaceré, después de todo estaremos casados hasta que la muerte nos separe. Ja ja ja.Después de haber dicho eso Michael se dio la vuelta y salió de la oficina, Sofía corrió detrás de él, aunque no quería tenerlo cerca necesitaba preguntarle algunas cosas como por ejemplo, ¿dónde se suponía que
-¿Juntos?Sofía estaba en shock, acababa de tener un acercamiento muy íntimo con el Adonis, su alma no había regresado a su cuerpo, ni siquiera había tenido tiempo de asimilar que ese hombre tan guapo era su esposo y no el gordo asqueroso de hace unas horas y ahora el hombre le había dicho que se bañarían juntos. Eso significaba que la vería desnuda.-¡Desnuda! Nunca nadie me ha visto desnuda, ¿acaso me hará el amor en la ducha? Pero yo jamás lo he hecho con nadie. ¿Y si me duele?La joven estaba entrando en pánico, todas las ideas que llegaban a su mente eran aterradoras para ella, nunca había estado con un hombre, tampoco la habían visto desnuda antes, su única experiencia sexual había sido el asqueroso beso de lengua que le había dado su novio del que estaba muy enamorada, después de eso le prohibió volver a hacerlo, en aquella ocasión se había sentido sucia y ultrajada, aunque fuera el amor de su vida quien la besara no quería volver a hacer algo como eso jamás.-¡Ya te dije que n
-¡Usted no es nada mío y no me pertenece!Espetó Sofía molesta. No podía aceptar que lo que veía le gustaba, eso sería admitir que el hombre le atraía. (Tengo novio, tengo novio esa cosota no puede gustarme, no le pertenece a mi novio)-Si ya terminó de bañarse salga, necesito terminar de bañarme y no me gusta que me miren mientras me baño.-Interesante, porque tú me mirabas como si fueras a comerme y yo no te pedí que cerraras los ojos, ja ja ja. Respondió él en tono bromista, echando un vistazo a Sofía para ver su precioso rostro ruborizado. Se sentía muy orgulloso de su apariencia física así que estar parado desnudo frente a ella no le generaba la más mínima vergüenza.-Si gustas puedo ayudarte, así terminarás más rápido.Ella negó con la cabeza a la velocidad de la luz antes de que el hombre siquiera se atreviera a meterse con ella a la bañera.-Lo haré yo, por favor salga.Por su parte, él no tenía intenciones de obligarla así que se dió la vuelta y se marchó. Rápidamente Sofía