Capítulo 15 ¡Qué mujer! Cuatro días después, Abigaíl tuvo la fortuna de conocer a la despampanante rubia personalmente. Se encontraba con la abuela Perla y el bebe en el jardín después de darle pecho a Maximiliano, cuando el ama de llaves anuncio su llegada y la de la mas joven de la Señoras West. Abuelita Perla, ¡Cuantas ganas tenía de verte¡—montrándose bastante eufórica la impresionante rubia fue hasta donde estaba sentada la abuela y la abrazo. De inmediato la fragancia de su perfume impregno las fosas nasales de Abigaíl y de la abuela que tosió un poco. —Hola Juliana ¿Cómo está tu papá? —Todos estamos bien abuela—al decir estas palabras se quedó viendo a Abigail y al bebe— ¡Este es Maximiliano, ven acá bebe quiero sostenerte en mis brazos! Sin pensarlo mucho, Juliana tomo de los brazos de Abigail al pequeño bebe y lo sostuvo con dificultad, mientras Nora West la observaba sonriendo burlonamente — ¡Le gustas Juliana! ¡Serás una buena madre!—una vez dicho esto él bebe se desper
Capítulo 16 ¿Qué haces aquí? —Al parecer esa mujer se ha ganado a la abuela Perla y a Santiago, si sigue así también lo hará con Zacarías—señalo Juliana, se encontraban en un café sentadas una frente a la otra —Lo mismo pienso yo—respondió Nora — ¿Qué podemos hacer? En verdad estoy loca por Zacarías, me gustaría casarme con él, me fascina su rebeldía, sus expresiones altaneras y salvajes, es tan guapo Nora West bajo los ojos para ocultar su expresión de rabia ¿Cómo podía ser tan valiente para escuchar a otra mujer exclamar esas palabras? Juliana era un mal menor, era frívola, muy artificial, no era una mujer que se entregaría el matrimonio como ella lo hubiera hecho si se hubiese casado con Zacarías. —Debes buscar una oportunidad de intimar con él —¿A qué te refieres? —Zacarías es un mujeriego, debemos buscar el modo, sabes cómo es tu papá contigo, no permitirá que Zacarías te deje plantada, podrías casarte con él, si haces bien las cosas — ¿Tú crees Nora? Sabes…siempre me he p
Capítulo 17 ¡Si no vas a pagar no toque la comida!— ¡Abuela! —como si lo hubiesen encontrado en una falta, Zacarías se sobresaltó, estaba tan sumergido en lo que pensó era su escena de seducción, que no previo bien la situación.— ¡Que estás haciendo aquí! —en ese momento la abuela se dio cuenta de la facha de Abigaíl e imagino la situación—¡Condenado muchacho! ¿Qué es lo que tramas? —la abuela como pudo levanto el bastón que la ayudaba a caminar e intento darle de bastonazo— ¡Sinvergüenza!— ¡Solo vine a buscar a Max!—protesto él— Y aprovechaste de quedarte, no te quiero ver entrar aquí, la única forma de que puedas entrar y estar aquí en esta habitación con Abigaíl a solas es que te cases con ella, ¡Me escuchaste Matrimonio! ¡Que pensaste infame!Abigaíl muerta de la vergüenza pensó que tenía que decir algo o hacer algo o irse al baño, no lo sabía bien.— ¡Abuela, no es lo que piensa!—Ve al baño hija a ponerte algo, mientras yo hablo con este vagabundo, aprovechador—en ese punto
Capítulo 18 ¡Tú no eres más que un vientre en alquiler!La noche pasada, Zacarías no supo que responderle a su abuela, en verdad sentía que había hecho un enredo de su propia vida.Hoy en la mañana antes de desayunar, se dirigió a la habitación del bebe, allí encontró a la enfermera lista para marcharse y a la niñera preparando las cosas del bebe. En un lado del sofá sentada con el niño recostado cómodamente en su pecho se encontraba su némesis dormida.—Señor anoche él bebe estuvo inquieto, la señorita y yo nos turnamos para cargarlo durante la mayor parte dela noche hasta que se quedó tranquilo, hay que llamar al médico.—¿Qué cree que sea lo que le pasa?—le pregunto dirigiéndose a la enfermera—No lo sé exactamente, pero puede ser que Abigaíl hay estado comiendo algo que le cayó mal al bebe a través de la leche materna—No lo creo, la señorita Abigaíl se cuida mucho en lo que come—respondió la niñeraZacarías estaba notando un patrón de conducta aquí, la enfermera hablaba en contra
Capítulo 19 Pasar tiempo de calidadAbigaíl sintió su rostro encenderse en llamas, apretó su puños evitando las ganas de golpearla, nunca antes estuvo tan furiosa en su vida. Sus pocos años de vida habían transcurrido plácidamente envuelta en el amor de su madre. Nunca tuvo otro motivo para luchar antes del problema de salud de su mamá. Ahora estaba Max y no permitiría que lo convirtieran en una herramienta para atrapar a ese hombre tan estúpido que ponía a esta mujer por encima de su hijo.Tenía que defender a su hijo, convertirse en la fiera en que antes se había convertido su propia madre para defender a su bebe del acoso, y la manipulación descarada de esta mujer.Poniéndose en posición de pelea, Abigaíl miro hacia arriba a la mujer, la mujer era alta y ella baja pero no menos fuerte, y tenía que defender a su bebe, esa era su principal motivación.Santiago se dio cuenta de la furia contenida en Abigaíl. Se percato en el momento justo cuando desapareció la tímida, recatada y call
Capítulo 20 Pensé que estabas alardeando—Abuela, escúchame arreglaré todo, no te preocupes, hablaré con Juliana—por la tarde, al llegar a la mansion, Zacarías considero conveniente hablar con la abuela y convencerla, sabía que cuando ella se proponía algo lo llevaba a cabo y en estos momentos su salud no era la mejor—No sé si ya se pueda arreglar algo—le dijo con pesar— esa mujer se atribuye derechos sobre mi casa, entra y sale, y hasta da órdenes, así no puedo vivir hijo, necesito una mayor tranquilidad—Abuela, voy a hablar con ella—le aseguro—Tienes una gran deuda de agradecimiento con el padre de Juliana, difícilmente la pondrás en su lugar y esto ha llegado a un punto en que ni siquiera defiendes a mi bisnieto de sus payasadas—Abuela ¿Qué dices? Ella no le ha hecho nada a Maximiliano, claro que el es mi prioridadLa abuela Perla suspiró— ¿Estás ciego? Yo estuve allí presente en el espectáculo que hizo en la habitación de Max. Si tú la quieres ver como una inocente paloma allá
Capítulo 21¿Qué paso? ¡Habla ya! Ante la exigencia de la abuela Perla, todos bajaron a cenar al comedor. El ama de llaves dispuso la cena de acuerdo a las indicaciones de la abuela. La habilidad musical de Abigaíl con un instrumento musical como el violín fue divulgado entre el personal de servicios.Nadie allí, ni siquiera Zacarías conocía de técnica musical o algo por el estilo, solo sabían que esa música les transmitía mucha paz y les llegaba al corazón, además trajo alegría a aquella casa tan silenciosa y tan grande. La abuela dispuso que Abigaíl y Zacarías se sentaran uno frente al otro y ella a la cabeza de la mesa como jefe de familia. Él bebe estaba en su cochecito al lado de Abigaíl. La abuela se veía muy alegre y eso complacía a Zacarías. En la tarde la expresión desanimada de su abuela lo había entristecido mucho, ahora gracias al concierto gratuito de la madrecita de su hijo ya había cambiado su expresión. Una llamada sorpresiva interrumpió la armoniosa cena —Dime Reina
Capítulo 22 ¿Eso es todo?Zacarías le gritó a Abigaíl a través del teléfono. Ella tuvo que retirar un poco el teléfono de su oreja y ponerlo en el altavoz, para responderle.—La abuela Perla se alteró mucho por el modo en que la señorita Juliana cargaba al bebé, intenté calmarla, pero de pronto se desmayó. Hay que explicarle eso al médico, ella tiene un problema nervioso, estrés o algo así, se altera ante el ruido, o algunos hechos, pueden ser sus nervios.—Está bien, hablaré con el médico —le dijo más calmado. y sintiendo remordimientos por como le grito, lo atribuía a su estado de ánimo...quiso disculparse, pero algo, no sabía que lo detuvo, quizás no quería que ella lo viera en esa posición de tener que disculparse—Por favor, necesito saber cómo está ella, no deje de avisarme, por favor —su voz sonaba muy angustiada.—Trataré, aún está con los médicos, te avisaré cuando pueda.—Si usted no puede, dígale al señor Santiago, no me acostaré para estar pendiente de cómo sigue la abuela