Capítulo 22 ¿Eso es todo?Zacarías le gritó a Abigaíl a través del teléfono. Ella tuvo que retirar un poco el teléfono de su oreja y ponerlo en el altavoz, para responderle.—La abuela Perla se alteró mucho por el modo en que la señorita Juliana cargaba al bebé, intenté calmarla, pero de pronto se desmayó. Hay que explicarle eso al médico, ella tiene un problema nervioso, estrés o algo así, se altera ante el ruido, o algunos hechos, pueden ser sus nervios.—Está bien, hablaré con el médico —le dijo más calmado. y sintiendo remordimientos por como le grito, lo atribuía a su estado de ánimo...quiso disculparse, pero algo, no sabía que lo detuvo, quizás no quería que ella lo viera en esa posición de tener que disculparse—Por favor, necesito saber cómo está ella, no deje de avisarme, por favor —su voz sonaba muy angustiada.—Trataré, aún está con los médicos, te avisaré cuando pueda.—Si usted no puede, dígale al señor Santiago, no me acostaré para estar pendiente de cómo sigue la abuela
Capítulo 23 ¿Así es que la cuidas? Zacarías había tenido un día muy ajetreado, se sentía muy cansado, últimamente tampoco estaba durmiendo bien. Muchas cosas venían a su mente para preocuparlo, la salud de la abuela, su hijo Maximiliano, incluso los negocios con Reinaldo le preocupaban, desde su conversación sobre Juliana él se mostraba un poco frío con Zacarías. En estos momentos estaba sediento así que fue hasta la cocina a buscar un vaso de agua, y algo de comer. Al llegar allí contemplo con satisfacción todos los lujos que le rodeaban, esta era una cocina muy moderna se había decorado siguiendo las últimas tendencias. Se sentía orgulloso de todo lo que había logrado por sí mismo, desde que se distancio de su familia, nadie podría quitarle nunca lo que se había ganado con su trabajo y todo le pertenecería algún día a su hijo Max.Todo su esfuerzo no sería en vano, su trabajo estaba comenzando a dar sus frutos, no era todo lo exitoso que deseaba, pero cada día avanzaba más hacia e
Capítulo 24 ¡Puede dejar de ser un egoísta, por favor!—Muchachos ¿Qué es lo que pasa aquí? ¿Por qué discuten? Asustaron a Abi. ¡Ya son adultos! ¡Compórtense!—¡Abuela ahora mismo se vienen conmigo a mi casa!—le comento con autoridad— ¡No haremos tal cosa hijo! ¡Estamos bien aquí!—Perla ya sabia lo que estaba pasando, Zacarías nunca había querido compartir su cariño con su hermano, pero ahora parecía que tampoco quería compartir el afecto de Max y de Abigaíl— ¡Entonces me llevaré a Max!—Zacarías sabía que si Max se venía, Abigaíl también lo haría—Si quieres acabar con mi vida, puedes hacer eso, si quieres que siga viva te quedaras tranquilo y vendrás a vernos aquí—Abuela no me puedes chantajearme de esa manera, con ustedes aquí se me hace casi imposible venir a verlos, tengo problemas en la empresa, necesito tenerlos a ustedes conmigo, no puedo andar de aquí para allá—Allá en casa nos veías a las 9 de la noche, para tu propia comodidad ¡No señor!, te dije que nos quedaríamos un
Capítulo 25 ¿Qué hay de malo en eso?Zacarías West se quedó observándola, uno pensaría que la madrecita de su hijo, era una mujer sencilla y tímida, pero ya varias veces le había sacado su mal carácter, al menos cuando valía la pena hacerlo.Abigail se quedó contemplando al hombre, este tipo lograba sacar lo peor de ella, nunca había sido tan altanera o le había respondido de mala manera a nadie, pero el padre de su hijo tenía la propiedad de sacarla de quicio con sus tonterías.Escucha pueden quedarse un poco más, pero no permitiré que Alexander se tome atribuciones que no le corresponden contigo.— ¿A qué se refiere usted? ¿Qué motivos le he dado para que usted me acuse de dejar que se aprovechen de mí?—No sé por qué siempre me malinterpretas, lo que dije lo mencione por él, no por ti, aunque deberías darte tu lugar— ¿Y cuál según usted es mi lugar?—Tú eres la madre de mi hijo, no puedes estar coqueteando con cualquiera, eso avergonzaría a mi hijo en un futuro—esa frase la dijo h
Capítulo 26 ¡Mientras yo viva tú nunca tendrás a Zacarías West!En el día de hoy, Zacarías se sentía ansioso, él siempre había sido antes que nada un hombre de negocios y disfrutaba con el trabajo. Su única emoción diaria era competir y ganarle a uno de sus competidores.Hoy se sentía emocionado por algo más que el trabajo, olvido de lleno sus destrezas y victorias empresariales. Su mayor emoción esta vez consistía en pasar el día con su hijo. La idea se le ocurrió espontáneamente el día de ayer en la casa de la abuela y por consiguiente se dio a sí mismo varias palmadas de felicitaciones en la espalda. Tenía que admitirlo era sobradamente muy astuto. Con eso lograría pasar tiempo con su hijo e impedía que Alexander estuviera con la madrecita y su hijo a solas mucho tiempo. Sacudió su cabeza, seguía recordando la forma en que había reaccionado la madrecita de su hijo en su sueño, para su desgracia últimamente solo pensaba en eso, deseando que se hiciera realidad...por supuesto, no e
Capítulo 27¿Cómo podía envidiar a Max? Abigaíl entró detrás de Zacarías y espero que la condujeran a la salita con el bebé en brazos, la puerta de entrada al despacho seguía abierta y Santiago estaba allí esperando instrucciones. Zacarías la condujo a una especie de anexo bien equipado con cocina, baño, una gran sala y una espaciosa habitación. Ella se detuvo en la puerta y observo todo eso. La puerta de la habitación estaba abierta y desde allí se observó una gran cama que dominaba el centro de la estancia. Las ventanas estaban cubiertas con grandiosas cortinas de seda con cenefas del mismo tono que las paredes. El efecto era deslumbrante y habría sido abrumador de no ser por una colcha azul marino y varias almohadas alineadas contra el cabecero Abigaíl enseguida pensó en que este era el lugar donde él traía a sus mujeres y sintió una gran repugnancia y mucho asco. Él pareció leerle el pensamiento porque de inmediato le dijo—Este es mi lugar de descanso, cuando trabajo hasta
Capítulo 28 ¡Mi cama es tuya cuando así lo desees! Con el corazón desbocado, Abigaíl se preguntó quién hacía tanto ruido en el despacho, siempre que estaba con Zacarías comenzaban los problemas, especialmente con las mujeres a su alrededor. No obstante, antes de que pudiera analizar la situación, escuchó que se abría la puerta del anexo. Recordó que hacía muy poco que se había comenzado a sentir cómoda como madre de Max. En la casa de la abuela Perla se le consideraba la madre de Max y se le trataba de esa manera. Allí se le preguntaba todo lo referente al bebe y ella decidía todas sus cosas. Todos estos días habían sido idílicos, en verdad se sintió como una madre responsable del bienestar de su hijo Antes de seguir recordando, se levantó de la cama para revisar al bebe, temiendo que el ruido lo despertara. No pudo evitar emitir un bostezo, vino a su mente un sueño extraño que tuvo cuando estaba dormida en esa imponente cama. En realidad sintió…que alguien tocaba sus labios, fue
Capítulo 29 ¡Te tengo una gran sorpresa! A Abigaíl esa última frase que dijo Zacarías la desequilibrio, quizás no fue lo que dijo sino el modo en que lo dijo, de hecho parecía que estaba coqueteándole. Lo miro nerviosa, y él al darse cuenta de lo que parecía que le dijo, solo agrego—estaba esperándote para almorzar —No podemos salir, el niño se inquieta ante los lugares extraños —–al decir esto se puso de pie —No saldremos, sé que estás en el modo madrecita de Max, así que tengo la comida aquí mismo en la salita, dejaremos la puerta abierta para estar pendiente de él, vamos debes comer algo, si tú estás bien alimentada podrás tener bien alimentado al chiquillo, además tengo la impresión que te está dejando en los huesos, estás muy delgada–eso se lo dijo acariciándole la mejilla con la palma de la mano, mientras su pulgar recorrió su boca. Ella observo que tenía los ojos brillantes. Claramente, estaba disfrutando con aquello. Vamos te daré de comer. Estoy orgulloso de ti realmente