Miedos y temores.

De camino a casa, Damián se encontraba sentado en la limusina, sumido en sus pensamientos sombríos y lleno de preocupación. Calculaba los peores escenarios en su cabeza, ya que Enrique le había informado que Tadeo logró escapar después de ser capturado, lo cual le llenaba de temores, pues suponía que él podría haber secuestrado a los niños.

Frustrado y furioso consigo mismo, comenzó a golpear el asiento con rabia. —¡Soy un idiota! ¿Cómo pude darle poder a ese hombre?

Él no podía entender por qué Tadeo quería ingresar a la habitación donde estaba Daniela. Sin embargo, después de escuchar el relato de Aylin, sintió que debía tener algo que ver con Darío, y gracias a su advertencia pudo trasladar a Daniela a una habitación diferente y descubrió que Tadeo no era alguien en quien confiar.

Al borde de las lágrimas, Aylin murmuraba mientras se mordía las uñas desesperadamente: —Ellos tienen que estar bien, mi niño es muy astuto. Siempre le he enseñado qué hacer si una persona malintencionad
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo